Así fue el resumen de 2024 de TVE: un casting de Almodóvar contra los bulos, donde Paiporta tuvo la última palabra
Un 31 de diciembre más, el sexto ya, TVE ha hecho su resumen del 2024 que cierra. La iniciativa, que comenzó en 2019 como una pieza especial dirigida por Carlos del Amor para el Telediario, ha ido acaparando la atención año tras año, hasta alcanzar entidad propia, asentarse y concentrar las miradas, hasta convertirse en un acontecimiento de la programación de la corporación. Un acontecimiento para el que incluso se ha hecho necesario un “casting” de personalidades, deseosas de encarnar al ejercicio que culmina.
José Sacristán quien puso carne y voz al 2019, el año inaugural, y desde entonces han tomado el relevo José Coronado en 2020, Blanca Portillo en 2021, Luis Tosar en 2022, y Lola Herrera hace ahora doce meses, en 2023. En esta ocasión, sin embargo, no hay una única encarnación, sino que el formato cuenta con hasta diez candidatos, todos ellos bajo la mirada de Pedro Almodóvar.
Eduard Fernández, Victoria Luengo, María Galiana, Barbara Lennie, Aitana Sánchez Gijón, Hovik Keuchkerian, Juan Echanove, Antonio De la Torre, Pablo Pineda y la deportista Carolina Marín son quienes ayudan a narrar el 2024, en una ocasión en la que la promoción se ha intensificado notablemente. Hace ahora una semana que comenzaron los spots de avance del especial, que también ha sumado expectación con reportajes durante el día 30 en el Telediario. Toda esa atención se ha notado en el formato, que ha tenido su mayor duración hasta la fecha, con 47 minutos. También el que ha contado con más estrellas, y no solo las que estaban ya previstas.
De la DANA a la desinformación y el acceso a la vivienda
Alrededor de las 15:10 horas, tomando buena parte del último Telediario 1 del año, comenzaba la emisión. Convertido en mediometraje, el especial comienza al son de Mi gran noche de Raphael, que acompaña desde el despertar a los famosos. “Qué día más malo para hacer un casting”, lamentaba Galiana, mientras se asoma por la ventana y observa la lluvia caer, con el cielo aún oscuro. Unas y otros ensayan y se preparan para la audición, en un montaje que incluye con una llamativas apariciones de José Manuel Serrat e Iñaki Gabilondo. También aparece Daniel Guzmán, que se queda a las puertas de hacer el casting por tener el DNI caducado desde hace cuatro años: “Qué despiste tan tonto”.
Ya en la sala de casting, unos y otras departen, antes de que Almodóvar entre al set y se coloque en su asiento para atender a las pruebas. Arranca Antonio de la Torre, que sin embargo sorprende al echarse para atrás nada más comenzar su momento: “Quería ser 2024 para intentar afrontar el papel desde la comedia, pero viniendo me he dado cuenta de que es es imposible. Al final no hay casi lugar para la gracia cuando se hace balance del año vivido”.
Eduard Fernández toma el relevo: “Un año malo, que termina de la peor forma posible”, dice, mencionando la DANA que sufrió la Península, en particular la Comunidad Valenciana. Con todo solemne, recordando la peor catástrofe natural de este siglo en país. Poniendo el foco en la ola de solidaridad, en la labor de bomberos, policías, sanitarios, militares de la UME y obreros que han trabajado en la limpieza y la reconstrucción. Pero también se refirió el lodo de la desinformación y la indignación contra los políticos, con las imágenes del recibimiento a los reyes y Pedro Sánchez en Paiporta, así como los enfrentamientos “Si finalmente soy yo seré recordado por esos días finales de octubre, donde todo cambió. Cuando el tiempo pasa las desgracias suelen olvidarse, cuando se apagan los focos son los que lo han perdido todo son los que se quedan a oscuras. Darles luz es una obligación”.
María Galiana, la siguiente, aprovechó su veteranía para “hablar con conocimiento de causa” de algo relacionado con lo anterior, el cambio climático. “A mí me gustaría dar vida a este año para decir que entre enero y septiembre la temperatura media del planeta fue un 1,54 grados más alta que en el siglo XIX”, destacaba, pidiendo reducir “las emisiones de gases de efecto invernadero”, cambiar hábitos alimenticios, ahorrar energía y tomar transporte público, “mimando la tierra”. “Con pequeños gestos contribuimos”, enfatizaba, recordando la imagen de El Sahara inundado por primera vez tras 50 años. Con ese paisaje, la actriz lanzaba un mensaje contra el negacionismos, “uno de los grandes males presentes y me temo que futuros”. “No me preocupáis vosotros, sino los que vienen después”, decía, antes de pedir ser 2024 para añadir otra causa: la lucha contra el edadismo.
La cuarta intervención era de Pablo Pineda. El actor se presentaba al casting para representar al 2024, un año en el que se modificó por tercera vez en su historia la Constitución “para borrar una palabra con la que nos definían, heredada de otros tiempos”. Se refería al término 'Disminuido'. “Es imposible pedir igualdad si desde el mismo uso del lenguaje nos hacen de menos”, decía Pineda, decidido a “poner en valor la importancia de cuidar las palabras” de ser elegido.
A continuación, Juan Echanove se colocó en la marcha para traer reflexiones “sobre el mundo que nos espera, que tiene mucho que ver con el que dejamos atrás estos meses”. Su discurso arrancó con la victoria presidencial de Donald Trump, “el primer presidente condenado” y los miedos que generan sus primeros nombramientos, como el de Elon Musk, y sus políticas. Continuó hablando de los conflictos por el mundo: “Somos ya varios años hablando de guerra”, decía, lamentando que “ya miramos poco a la de Ucrania” tras más de mil días de guerra. “También es el segundo año de otra, que sigue imágenes sobrecogedoras, de una población civil asolada, destruida, maltratada. Mirar a Gaza es mirar directamente al fracaso”, añadía, temiendo el auge de la extrema derecha, pero celebrando hitos como el del nombramiento de la primera mujer presidenta de México. Su alocución concluía con una petición: “Quiero ser el 2024 para conjugar el verbo reflexionar. Y si lograra llegar a serlo, solo pediría un deseo: menos guerras y más poesía”.
Echanove entonaba con emoción Los cuatro muleros antes de dar paso a Victoria Luengo. La actriz, con honda emoción, puso el foco en “algo que está haciendo mucho daño: la desinformación, los bulos, la falta de verdad o las mentiras que buscan desestabilizar”.
Puso ejemplos de todo tipo, como el de la campeona olímpica de boxeo en París 2024, Imane Khelif, que sufrió una campaña de odio en redes, asegurándose que era un hombre. Pero la protagonista de Reina Roja no tuvo que irse tan lejos geográficamente: “Lo peor de la desinformación lo vivimos durante la DANA. El peor bulo: el del parking de Bonaire, que muchos medios compraron como cierto, creando todavía más dolor y más zozobra”, denunció, reclamando “apartar a los inventores y los falsos predicadores”, y señalando los bulos contra la inmigración. Frente a esos bulos, puso el foco en los problemas reales, como el de la vivienda: “Vengo a decir que 2025 será mejor si más gente puede tener un hogar, si la información gana la partida y enterramos para siempre los bulos y sus terribles consecuencias”.
“Se politizó hasta el humor”, por los bulos por 'La Revuelta'
Por sorpresa, Antonio de la Torre reapareció, habiéndose replanteado su prueba, hablando de acuerdos y de acuerdos. Por ejemplo, el de la Ley ELA, “la única aprobada por unanimidad en 2024”, ensalzó con ironía la recuperación del género epistolar, con la carta a la ciudadanía de Pedro Sánchez en la que el presidente anunciaba que plantea dimitir, y también destacó el sonado regreso a suelo español de Carles Puigdemont. No faltaron las alusiones, a través de un sumario, de las causas judiciales que han afectado a la vida política diaria: el caso Koldo, el del novio de Isabel Díaz Ayuso, la imputación del fiscal general del estado por presunta revelación de secretos, las condenas a Eduardo Zaplana y Rodrigo Rato, así como la investigación contra Alvise Pérez por presunta financiación ilegal.
Hubo espacio en su bloque para hablar de RTVE, del acuerdo para renovar su Consejo de Administración; pero también del fenómeno televisivo del año, como fue descrita La Revuelta. Se hizo hincapié, dentro de ese montaje, en cómo “se politizó hasta el humor”, antes de pedir: “una sonrisa para 2025”.
Si De la Torre habló de grandes historias, Hovik Keuchkerian resumió 2024 “a través de historias pequeñas”. “Lo pequeño demasiadas veces pasa desapercibido. Las historias pequeñas suelen estar llenas de ternura, y de eso va esto, de ternura”, comentó el solicitado actor, que recordó que el 19 de abril se batió en España el récord de trasplantes en un solo día, con 48; también el desarrollo del dispositivo ARCEX, que apunta a la médula espinal de manera no invasiva y permita a personas con parálisis recuperar funciones en las manos: “43 personas ya lo han comprobado. Dicho en otras palabras: 43 personas han vuelto a acariciar. ¿No es una noticia maravillosa?”.
En su texto hubo espacio para algo que Iñaki Gabilondo le había pedido unas cuantas escenas antes, para conmemorar los 100 años de la radio; para celebrar que el lince ibérico ya no está en peligro de extinción, con la música inconfundible de El hombre y la tierra; y para destacar la historia del pueblo riojano de Albelda de Iregua, que forjó con 178 kilos de céntimos una nueva campana para su iglesia, tras haber sido robada la anterior.
La violencia machista, protagonista
La violencia machista fue el tema principal que abordó Aitana Sánchez-Gijón en su intervención, enumerando varios asesinatos de mujeres a manos de exparejas. “Podría seguir y citar los más de 40 nombres propios que nadie citará en 2025. Más de cuarenta vidas truncadas. Nos siguen matando”,continuaba, citando también a Gisèle Pelicot. “Yo quiero encarnar a 2024 para dar voz a esas mujeres, para pedir que cese la violencia machista, que se imponga el respeto, que el no sea un no y que solo el sí sea un sí”, dijo, mientras aparecían imágenes de Íñigo Errejón, que dejó la vida política ante las informaciones sobre su conducta inapropiada y que actualmente está imputado por una denuncia de agresión sexual de Elisa Mouliaá. Sánchez-Gijón destacó también los delitos de odio, recordando el juicio por el asesinato a Samuel Luiz, antes de concluir: “El odio arrasa con todo”.
Bárbara Lennie dedicó sus esfuerzos a la cultura, “esa riqueza casi intangible que nos hace mejores”. Aludió a la catedral de Notre Dame, y al éxito de La sociedad de la nieve de Juan Antonio Bayona, pero también al premio a la mejor interpretación del Festival de Cannes a la española Karla Sofía Gascón por Emilia Pérez, y al León de Oro de Venecia para La habitación de al lado de Almodóvar. Hubo espacio para el homenaje a Marisa Paredes y para Mayra Gómez Kemp en su intervención, así como al cámara de RTVE Vicente Gil, fallecidas: “Son, como cada año, demasiadas despedidas”, concluyó, con un espacio de recuerdo a todos los fallecidos del mundo de la cultura. “Hay que exprimir el tiempo al máximo”.
La última en pasar fue Carolina Marín. “No soy actriz”, dijo ella, antes de que la interrumpiera Almodóvar: “Déjame que eso lo decida yo, Carolina”. Su parte estuvo centrada en los éxitos deportivos: habló de Elena Congost, que en los JJOO Paralímpicos prefirió echar una mano a ganar una medalla“ para ayudar a su guía, que se desvanecía; y la de su propia lesión en plenas semifinales de París 2024. ”Sabía que me había roto la rodilla, la tercera vez“, recuerda, antes de recordar a su rival, He Bing Jiao, por el gesto que tuvo al subir al podio de bádminton, con un pin de España. Ensalzó todas las medallas olímpicas de este 2024, así como a la retirada de Rafa Nadal, ”el rey de la tierra que cuelga la raqueta y entra en el Olimpo“. También recordó la decimoquinta Champions League del Real Madrid y la del Barcelona de fútbol femenino, así como la victoria de la Eurocopa. ”Si pudiese pedir algo sería que todos volviésemos a jugar como si fuésemos niños“.
Homenaje a los ciudadanos de Paiporta, los protagonistas del 2024
Tras Marín, a Almodóvar le quedaba tomar un veredicto. “Qué difícil elección, porque todos son imprescindibles”. Para asesorarse, pidió la colaboración de los años anteriores a través de una videollamada. “¿Por qué no le das el papel a todos? Todos lo merecen”. El cineasta estaba de acuerdo...
Y, sin embargo, había una sorpresa. Aparecía en el decorado el Coro de la Unió Musical y de la Banda Primitiva de Paiporta, para realizar una actuación no incluida en la escaleta. “Venimos a cantar en nombre de mucha más gente y de un pueblo que necesita ser escuchado”. Cantaron al unísono Un beso y una flor, mientras se reproducían imágenes de la catástrofe de la DANA. Los ciudadanos anónimos cantaban también, desde la localidad, mirando directamente a cámara, recayendo en ellos el protagonismo.
Con este momento musical, cerraba el especial del año del Telediario de TVE. Un especial escrito y dirigido por cada año por Carlos del Amor. De la realización se encarga Antonio Casado, con Mónica Agudo como coordinadora de contenidos, Juan Lage y el look de la imagen y un amplio equipo de los servicios informativos con la colaboración este año de Prado del Rey y con la participación de un amplio equipo de RTVE.