La nueva Noche de los Secretos de Secret Story fue muy movida. Desde la entrada de Toñi Moreno en plató, ya llamó la atención la presencia de Cristina Porta como nueva tertuliana los domingos. Algo que ya se había adelantado pero hasta ahora no se había hecho realidad.
La segunda finalista de la edición pasada recordó la “urticaria” que le causaba escuchar aún las palabras “prepotente y altiva” tras haber sido tildada de ello durante tanto tiempo. Así como se mostró “en contra de quienes critican los carpetazos”, aunque cree que lo de Álvaro por Carmen no es tanto amor.
El programa también desveló una pista del secreto de Adrián: una máscara de Pinocho. Alatzne hizo su curva de la vida. Las mellizas protagonizaron una bronca descomunal entre ellas. Y la presentadora adelantó que fichaban temporalmente a alguien del clan Pantoja. Además, aclararon la razón por la que Kenny se marchó unas horas de la casa: “Me hice la prueba de la ciudadanía, para poder estar legal. Ahora puedo reclamar a mi madre y traérmela conmigo”, agradeció el cubano al programa.
Mientras que la nominada con menos votos, que se salvó automáticamente fue Carmen: “Qué fuerte, mucha gracias. Qué alivio de golpe”, dijo la joven.
Kiko Rivera, de nuevo en la casa: “Encantado de vivirlo de nuevo”
“Es uno de los rostros más populares de nuestro país, pertenece a una conocida saga familiar y muy pronto entra en la casa a convivir con nuestros concursantes” adelantaba el programa desde sus redes sociales mostrando una silueta que muchos acertaron: la de Kiko Rivera.
Moreno conectó con él por videollamada, al estar confinado para poder entrar a la casa esta semana: “Llevo varios días sin salir porque me volvió a dar un ataque de gota, pero encantado de poder vivir de nuevo esa experiencia”.
Eso sí, el hijo de Isabel Pantoja aclaró en calidad de qué entraba al programa: “Voy aunque no sea concursando”. A lo que la presentadora añadió: “Entrarás en la casa siendo el padrino de una prueba. No puedo desvelar nada más”.
La difícil vida de Alatzne: abortos, depresiones y salud
La otra gran protagonista de la noche fue Alatzne que recordó todo lo que dijo en la curva de su vida. Un repaso con el que no pudo reprimir las lágrimas.
Recordó cuando se casó con su primer novio, que acabó siendo “alcalde en el País Vasco” cuando el conflicto con ETA estaba en pleno fervor. Por lo que vivían “con escoltas, no teníamos libertad”. Algo que le marcó para siempre.
Años más tarde se enamoró de su segunda pareja con quien intentó ser madre hasta en dos ocasiones pero lo perdió. Momento en el que los médicos descubrieron que tenía una enfermedad hereditaria y no podría tener hijos. “Se me olvidó sonreír, la tristeza se convirtió en rutina. Me diagnosticaron depresión”, narró.
La salud de su familia también fue delicada y, con el tiempo ,después de superar ese bache, descubrió que el “amor de su vida es su padre” a quien agradeció todas sus enseñanzas.
Álvaro perdió su esfera en manos de Kenny
Álvaro estrenó el pulsador, “al no poder soportar la pasividad de la casa” y lo hizo tras un careo con Kenny. El primero confesó que creía saber lo que escondía el cubano: “Acudiste a las colas del hambre”, aseguró. Mientras Kenny le despistó en la charla.
Aún así, cuando Toñi preguntó a Álvaro si quería pulsar, este se envalentonó y lo hizo. Pero antes lo argumentó diciendo que si perdía su esfera, le parecía bien dejarla en manos de su compañero. Y así fue, porque el secreto de Kenny no era ese.