Aunque sus dos primeros capítulos ya están disponibles en ATRESplayer Premium, será este miércoles cuando Toy boy llegue finalmente al prime time de Antena 3.
La nueva apuesta del sello Series Atresmedia lo hará marcando un antes y un después dentro del grupo, pues será la última ficción que se emita bajo el estándar de 70 minutos por capítulo.
También será la primera serie propia que Antena 3 estrene en la presente temporada, cuyo arranque aprovechamos en Vertele para hablar con Sonia Martínez, directora de ficción de Atresmedia, sobre las últimas series de la compañía y sobre el estado actual de la ficción en abierto.
La producción de 'Toy boy' dio comienzo antes de que Antena 3 recortara sus series a 50 minutos por episodio. ¿Se llegaron a plantear que 'Toy boy' también se emitiera con esa duración?
No, porque entonces habríamos tenido que parar la producción. Llevábamos nueve guiones, estábamos en preproducción y eso iba a suponer un coste. Además, el calendario de rodaje tendría que ser otro y todo se iba a complicar muchísimo.
Para protagonizar 'Toy boy' eligieron a Jesús Mosquera, un joven sin ningún tipo de experiencia como actor. ¿No es una apuesta demasiado arriesgada?
Bueno, no es la primera vez que recurrimos a actores que no han tenido ninguna experiencia. Lo que hay que hacer es trabajar mucho y siempre tener el as en la manga de rodear muy bien a todas estas personas que no tienen esa experiencia. Y en este sentido, los chicos [Jesús y el resto de strippers que protagonizan la serie] están muy bien rodeados.
Era un casting muy complicado porque exigía mucho. Y el entorno era tan diferente que si en determinados roles poníamos a actores ya conocidos podíamos tener un coste añadido de no verlo en ese papel. Como empezamos de cero con ellos no partimos de ningún rol anterior, así que meterte y creértelo es más sencillo.
Además, debe ser muy satisfactorio descubrir nuevas caras.
Claro. Yo siempre soy de la opinión de que hay que hacer una buena mezcla apostando por profesionales contrastados y por talento emergente. Creo que el espectador se siente premiado al descubrir con nosotros caras nuevas, hacen la apuesta con nosotros y se sienten involucrados de alguna manera y partícipes del proceso de creación.
Un ejemplo podría ser Álvaro Morte, al que la fama le llegó por una gran oportunidad que le brindaron desde la cadena.
Lo que pasa con Álvaro es que es una persona que lleva años trabajando. Estuvo en El secreto de Puente Viejo más de un año y además es un hombre de teatro, lo que pasa es que le tocó la varita mágica.
Visto el primer episodio, 'Toy boy' parece demasiado convencional en comparación a otras series recientes de Atresmedia.
Es una serie clásica en su estructura, en la forma de contar la historia y en el sentido de que el thriller es el pilar. Yo creo que lo novedoso que tiene son los personajes y el cambio de rol, porque aquí son las mujeres las que son poderosas y las que mueven los hilos. El resto baila al son que ellas tocan. Los hombres son juguetes en sus manos. Entonces, ese cambio de roles que hemos visto muchas veces al revés es lo que aporta, además del entorno, que nunca habíamos estado en él contando historias.
Otra de las series que tienen en cartera para esta temporada es El Nudo. ¿Por qué han decidido emitirla directamente en ATRESplayer Premium?
Cuando vimos El Nudo nos pareció que era un contenido que podía, de alguna manera, ser una historia bastante clásica también, pero la forma en la que estaba contada la hacía muy diferente. Nos pareció un buen contenido para estrenarnos en Atresplayer Premium.
¿Qué planes tienen con respecto a la plataforma?
Como diría el presidente aquel, estamos trabajando en ello. Tenemos cosas ya pensadas para la plataforma, como es el caso de La Veneno, que está en fase de guion y comenzará a rodarse en invierno. Ahora mismo estamos viendo qué tipo de series y contenidos nos gustaría tener. Serán contenidos que siempre aporten algo a lo que veníamos haciendo y que sean más propios para la plataforma que para Antena 3. Que tengan algo especial por donde vienen, por lo que cuentan o por la manera de contarlo. Pero todas tendrán su sello.
¿Y en cuanto a volumen de estrenos?
No lo sabemos todavía, pero creo que cada trimestre tendremos un estreno importante.
Después de reducir las series a 50 minutos por capítulo y apostar por historias diferentes dentro de la televisión en abierto, ¿el lanzamiento de ATRESplayer Premium era el siguiente paso natural para la ficción de Atresmedia?
Claro, era nuestro paso lógico. Igual que otras cadenas se especializan en otro tipo de contenidos, nuestro sello de identidad tiene mucho que ver con la ficción, por lo que era lógico que, si nos metemos en este mercado, que es lo que está haciendo todo el mundo, fuese con las series como estandarte.
Atresmedia siempre ha presumido de rentabilizar sus series en el mercado internacional. ¿Esto, unido al lanzamiento de ATRESplayer Premium, ha hecho que la audiencia tradicional haya pasado a un segundo plano?
Para nosotros la audiencia siempre, siempre, siempre será importante. Es nuestro primer objetivo. Lo que pasa es que ya no es el único. Antes era el único y rentabilizabas con ese dato, pero ahora no es la única vara de medir. Esto te permite tener la cintura suficiente como para, en determinados momentos, elegir no solo pensando en la audiencia sino pensando también en otros factores que intervienen para que un producto sea rentable para nosotros.
Con todos los cambios que está experimentando la industria televisiva, ¿qué supone estrenar una serie en abierto en prime time en pleno 2019?
Supone que ahora hay parámetros que antes estaban controlados y que ahora no controlas tanto. Antes tenías las ofertas que tenías y era a lo que la gente estaba acostumbrada. Ahora tienes que jugar con que tu público es más adulto, que es el que sigue viendo la televisión lineal. Porque aunque creamos que la televisión lineal está muerta, en realidad no está muerta.
Si tú tienes un buen producto pensado para ellos o para la gente que en ese momento está viendo la televisión, probablemente no solo se asomen ellos, sino también los que estén a su alrededor. Es verdad que el consumo de televisión baja mes a mes, por lo que los datos ya no son lo que eran. Pero hay que jugar con ese cambio de entorno.
Cuando trabajaba en Telecinco yo hice Yo soy Bea y recuerdo que hacía un 40% al mediodía. Eso es impensable ya. Y nos ha ido pasado sistemáticamente. Entonces, no creo que haya que hacer una reflexión de que la televisión lineal está muerta, sino de lo que tenemos que hacer para adecuarnos a nuestro mercado. A lo mejor hemos sido nosotros los que nos hemos alejado de ese mercado y tenemos que replantearnos cómo acercarnos a él. Y luego diversificar con estudios, con Atresplayer Premium... Antes era una vía única y ahora tenemos varias.
¿Una de esas vías pasa también por hacer temporadas más cortas? Porque cada vez es más habitual que una serie triunfe en su estreno y vaya perdiendo adeptos con el paso de los capítulos.
Esto son estrategias. Tener una serie con más de una temporada es como ciencia ficción. Pero sí, son estrategias a las que tenemos que recurrir para ayudar al espectador en su experiencia de ver la televisión.
¿Pesa también que las comiencen en torno a las 23:00 horas?
Nosotros acudimos a la estrategia de los 50 minutos para no irnos más allá de las 00. Lo que pasa es que nuestro prime time comienza realmente a las 21:45 con El Hormiguero. Entonces, no es que el prime time comience a las 23:00, es que nosotros tenemos contenido desde las 21:45 para el espectador. Pero no creo que en este país seamos de acostarnos pronto. Serán otros los motivos, pero no creo que ese sea el problema.
La temporada pasada dejó, entre otras cosas, el adiós de 'Allí abajo'. ¿Cómo valora la despedida de la serie?
Allí abajo nos ha dado muchas alegrías, y el resultado de esta última temporada ha sido similar a como está la televisión ahora mismo. Es lo que suele pasar en la actualidad y más con una serie que llevaba ya cinco temporadas. Entonces, el balance es muy positivo porque no es solo la última temporada, sino todo lo que llevaba por delante. Hemos sido muy felices haciéndola.
En el caso de '45 revoluciones', ¿a qué achacan sus datos de audiencia?
A toro pasado las cosas son siempre más fáciles. Puedo entender que los productos no funcionen, porque muchas veces no lo hacen y yo misma he hecho series que no han funcionado, pero lo que más me ha chocado de 45 revoluciones ha sido el desapego del espectador con la serie. Esto me ha llevado a pensar que es un producto con una calidad fuera de duda, pero que los que tenían que verla no estaban para verla. Probablemente nos equivocamos en el momento en que la emitimos.
Luego hay pequeñas cosas que pueden haber intervenido, como es el género musical, que puede que no interese tanto como nosotros pensamos. A lo mejor habría que haber hecho hincapié en que no era una serie musical. Son pequeñas cosas, pero realmente el tema está en que a la gente que le podía interesar la música estaba en una época que no le interesaba. Todo el mix no cuajó.
En todo caso, la apuesta queda ahí.
Sí, sí. Para mí, tanto los éxitos como los fracasos, cuando vienen de apuestas que se basan en el trabajo enorme que se hace para hacer productos con ese nivel y entrega, y sin nunca menospreciar al espectador, estoy satisfecha. Mira, no he tenido éxito, pero estoy satisfecha. No escondo nada, porque además es lo que hace que este trabajo sea tan especial.
Imagino que uno de los retos a corto plazo es dar con una nueva comedia.
Sí. Estamos en fase de guion y preproducción y vamos a arrancar el casting de Benidorm, que es una comedia con Plano a plano. Y tenemos un par de proyectos en desarrollo para trabajar otra comedia.
Antes mencionaba 'La Veneno'. ¿Cómo va la búsqueda de su protagonista?
Estamos en ello. No es un casting fácil, te lo aseguro, pero estamos muy felices con los Javis. Nos conocemos desde hace años y es un verdadero placer trabajar con ellos. Tienen tanto talento... Rodearte de gente entusiasta y pasional es lo que te enriquece. Saber rodearte de esta gente que siempre va a ir a favor es un tesoro.
¿Queda alguien de la industria con quien no haya trabajado y desee hacerlo?
Siempre hay gente nueva con la que trabajar. Lo importante es que nos entendamos y que tengamos los mismos objetivos, porque seguro que nos vamos a seguir encontrando. Con la que gente que lleva muchos años y todavía no hemos trabajado juntos será porque no tenía que pasar.
Hay gente con la que trabajo muy a gusto y nos buscamos y nos encontramos aunque no lo tengamos planeado. Y estoy segura de que en dos años vamos a oír nombres nuevos que antes no estaban. Estoy convencida porque los hay.
2019 nos deja las despedidas de 'Vis a vis' y 'Velvet' y el regreso de 'La casa de papel'. ¿Cómo ha visto las tres series fuera de Antena 3?
Siempre me situó ante ellas como si fuesen parte de mí. Han sido proyectos muy importantes en Atresmedia y en mi carrera profesional. Son productos muy diferentes que tienen una vida interior especial. Estoy muy contenta y las veo feliz. Cuando veo Velvet en Movistar, Vis a vis en Fox y La casa de papel en Netflix de alguna manera es como cuando tus hijos se independizan, les va bien y por eso te sientes feliz.
¿Tuvo alguna sensación extraña al ver ese primer capítulo de 'La casa de papel' en Netflix?
Yo sobre todo estoy feliz por Vancouver, por Álex (Pina), por Javi (Gómez Santander), por Esther (Martínez Lobato), por Jesús (Colmenar), por Migue (Amoedo), porque llevamos años trabajando juntos. Y como cualquier profesional que se dedica a esto, no solo lo ves con ojos de espectador, sino también de profesional y creo que han hecho un trabajo maravilloso, magnífico.