'Supervivientes 2022' reencontró a Marta y Tony Spina y expulsó a Anuar tras soltar todos los “secretos inconfesables”

“Anuar lo ha confesado todo, sus secretos y los de otros” adelantó Ion Aramendi al arrancar la novena gala de Supervivientes 2022: Conexión Honduras. Antes de saber que sería el nuevo expulsado de la edición, el hermano de Asraf lo soltó todo a Marta Peñate en Playa Paraíso.

Además, Peñate también disfrutó del reencuentro con Tony Spina, su pareja. Al que permitieron quedarse más horas con la concursantes desterrada. Así como también lo gozaron Anabel y Yulen durante una noche de pasión que mostró el programa.

Todo ello en una noche en la que se jugaron algunas de las recompensas más deseadas: un desayuno de leche con cereales, recuperar algunas pertenencias de su maleta y una ducha con jabón y toallas limpias.

El reencuentro cómico-romántico entre Tony Spina a Marta

Marta y Anuar, los desterrados de la semana, se esmeraron para encontrar cuatro piedras escondidas en la playa. Al lograrlas, tuvieron que rogar al pirata Morgan para conseguir la gran recompensa, y de la cabeza apareció Tony Spina, el novio de Marta.

Tras dos meses sin verse, ella se echó a llorar y se abrazaron intensamente. “Lo estás haciendo genial”, le decía él y ella respondía que le amaba. Eso sí, las bromas no cesaron. Él dejó entrever que ella no olía a Nenuco como solía hacerlo. Y ella le echó bronca por salir tanto de fiesta cuando ella no está en España: “Te quiero en casa llorando por mí todo el día, muerto de pena”, decía ella entre risas.

Mientras, Anuar se alegraba ante la escena romántica y acababa cogiendo una estatua y besándola para sentirse acompañado.

Las emocionantes palabras de Anuar a Marta, y viceversa

Minutos después, Anuar y Marta se sometían a la decisión de la auciendia. Pero antes, ambos reflexionaron sobre su paso por el concurso: “Me habéis enseñado a estar sola, a saber que puedo, a quererme y a estar algo más sana y equilibrada”, aseguraba ella. Mientras él explicó que entró “pensando que me comía el mundo, que sabía hacer de todo y he visto que no”.

Aramendi agradeció el aprendizaje a ambos y sentenció: “Los espectadores han decidido que el expulsado definitivo sea Anuar”. Al escucharlo, él acataba y subrayaba el juego de su compañera: “Marta se merece quedarse aquí es una concursante de 10 y merece seguir sacando sonrisas”.

En ese momento, Asraf entró por teléfono para hablar con su hermano: “Has hecho un concursazo, estamos orgullosos. Alguna palabra no me ha gustado, pero has estado genial. Te quiero mucho. No me esperaba nada de ti proque no haces nada de deporte pero has hecho de todo allí”.

Desvelada la gran incógnita de la edición

El programa mostró todo lo que había confesado Anuar a Marta, en sus últimos días como parásito y para “ser perdonado” por el Pirata Morgan. “He de reconocer que no hice fuego, fue una desesperación. Comíamos todos en crudo, nos pusimos malos y lo decidí”, dijo para empezar a desvelar sus secretos.

Preguntado por la razón de no decir la verdad: “Tania se enfadó con Alejandro, y muchos defendieron la mentira, me protegíaan y pensé que debía seguir manteniéndola”. Sobre cómo logró prenderlo: “Nos dieron una espiral y fue mi oportunidad”, dijo, confirmando las sospechas del equipo, que ya le castigó. Para acabar, Marta le absolvió de sus “pecados” con gestos eclesiásticos: “Una cristiana santificando a un moro”, bromeó Anuar.

Al regresar a plató, Aramendi preguntó a Tania la razón de seguir co la mentira: “Yo no lo vi en directo. Sí me dijo que había sido con trampas con gestos, pero nos pusimos de acuerdo con protegerlo. No quise decírselo a Alejandro para no hacerle cómplice”, aseguró ante las críticas de los colaboradores a su reacción dejando solo a su novio.

Pero no fue lo único que contó Anuar, también relató cómo Yulen y Anabel intimaban por las noches cuando él dormía al lado: “Ellos no paraban de hacer petting. Yo creo que va a salir un hijo. Me dijo él que llevaba mucho sin empalmarse y que con Anabel cada noche”.

Un juego de recompensa con lágrimas de rabia y emoción

Por parejas, los concursantes jugaron a mantenerse en pie en una plataforma en la que iban tirando los apoyos de sus pies. Así, Mariana, Ignacio, Alejandro y Yulen fueron los ganadores.

Los cuatro pudieron disfrutar de un desayuno con leche y cereales, de una ducha y de retomar algunas de sus pertenencias de sus maletas. Algo que provocó el llanto de Mariana al no encontrar la carta de su novio. Y el de Ignacio al abrazar de nuevo al peluche de su hermana.