En la tercera gala de Supervivientes 2021, Antonio Canales se convirtió en el nuevo desterrado que se trasladó a la playa de Lola para convivir con ella. De forma que la audiencia salvó a Melyssa y Tom.
La viceversa vivió su noche más agridulce al descubrir que los espectadores no querían que regresara aún a España y, minutos después, volvía a convertirse en líder tras una prueba de agilidad mental en la que “no quiso parecer tonta”.
Tom, Alejandro y Gianmarco se convirtieron en los nuevos nominados del grupo, mientras que Melyssa añadió a la lista a Palito Dominguín.
Antonio Canales, desterrado junto a Lola
Tras la salvación de Alejandro Albalá en Tierra de Nadie, los nominados que quedaban eran Tom Brusse, Melyssa Pinto y Antonio Canales. La primera salvada de la noche por la audiencia fue la viceversa que, lejos de alegrarse, confesaba su malestar: “Estoy jodida, pero igualmente agradezco a la audiencia la confianza”. Jorge Javier le transmitía ánimos asegurando que en unos días desearía quedarse y ella se derrumbaba en los brazos de Tom y entre lágrimas.
Minutos después, el francés era el siguiente salvado y el bailaor celebraba marcharse: “Gracias por la experiencia, me vuelvo con tipín y esta noche duermo en un colchón”.
Un barco llevó al flamenco hasta la playa junto a Lola que al descubrir a su nuevo compañero lo celebró por todo lo alto. Ambos se mostraron alegres por hacerse compañía, a pesar de las condiciones en las que les tocaba convivir.
Las “dos mentiras” de Antonio Canales sobre Fidel Albiac
Desde plató, la defensora de Antonio Canales quiso aclarar las “dos mentiras” que había pronunciado el concursante sobre Fidel Albiac. “Antonio se ha ido sin ver el documental y sabiendo que la pareja [Rocío y Fidel] nunca ha querido que se hable de ellos”, empezaba contando.
Por lo que dirigiéndose a Jorge Javier, le desveló: “Tú le preguntas y él dice que no lo conoce. Lo hizo para protegerlos a ambos pero la realidad es que Fidel estuvo 20 días o así en su casa”.
Sobre la segunda “mentira” que hacía referencia a que no lo había visto más de tres días en su vida: “Cuando vivió en su casa, Antonio lo hizo por hacer un favor al familiar pero él estaba de gira 280 días al año pero ni se sentó con él ha tomar un café. No se vieron y no es su amigo”.
Las dos caras de Melyssa
Melyssa se había saltado las normas el pasado domingo pidiendo a la audiencia que la expulsara. Algo por lo que la abroncó tanto Lara Álvarez como Carlos Sobera.
Sin embargo, los espectadores no le hicieron caso y la salvaron. Algo que ella lamentó profundamente y ni siquiera pudo reprimir las lágrimas cuando Jorge Javier le aseguró que en poco tiempo desearía seguir en la isla.
Unas palabras que quizás surtieron efecto porque en la prueba de líder que disputó minutos después se alzó como la mejor, garantizándose una semana más en el reality. Con una sonrisa y en lo que parecía que comienza a ser su resurgir.
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