'Supervivientes 2020' mostró la traición de Fani a Rocío Flores y el cambio físico de Bea
Conexión Honduras emitió una entrega que arrancó con las siguientes palabras de Jordi González: “En los cayos ha habido sexo, bajo las estrellas. Hugo e Ivana no se han podido aguantar más”.
Además, el programa mostró la nueva enemistad entre Fani y Rocío Flores, que habían sido grandes amigas hasta ahora.
Así como Bea, la primera expulsada de la edición, pudo ver su cambio físico con casi 4 kilos menos.
Hugo e Ivana, pasión bajo las palmeras
La pareja que se formó desde el arranque del reality y que había protagonizado los únicos besos, caricias y abrazos entre concursantes de esta edición vivió una apasionada noche en la isla.
El programa les permitió estar a solas bajo la luz de la luna y, como ya ocurriera el año pasado con Fabio y Violeta, el “palmeroning” sucedió.
Un momento apasionado que sigue echando leña al fuego del culebrón Adara que iniciara la concursante en GH VIP al enamorarse de Gianmarco y dejar a Hugo. Ahora éste, “como era previsible” según algunos colaboradores del reality, se ha acostado con Ivana que también tuvo un affaire con el italiano.
La supuesta traición de Fani a Rocío Flores
Aunque Fani y Rocío Flores han sido un gran apoyo mutuo desde la preconvivencia, en las últimas horas las palabras de los compañeros han hecho que se enfrenten.
Según algunos, Ivana nominó a Fani por unas cosas que decía por detrás de Rocío. “Me sorprende porque estás todo el día pegada a mí y de repente vas soltando cosas de mí. Al final la gilipollas de la edición soy yo”, decía la nieta de Rocío Jurado al enterarse.
Y es que los concursantes aseguraban que la de La isla de las tentaciones había llamado vaga y materialista a su “amiga”. Aunque ella lo negaba, Rocío la tachó de mentirosa y le pedía que para mantener sus dos caras al menos tuviera mejor memoria.
Bea, al ver su cambio: “Me veo genial”
Bea se había convertido en la primera expulsada de la edición y ya estaba en el hotel esperando a viajar a España.
En la conexión con Jordi González, este le pidió que se quedara en traje de baño para ver el cambio de su físico. Ella lo hizo y un espejo descubrió su reflejo: “Tengo las cejas como si fuesen dos gatos tumbados. Horrible. Y el grano que estaba deseando vérmelo”, fue lo primero que observó.
Minutos después confesaba que se veía “genial”, cuando el presentador le dijo que había perdido 3,8 kilos.
