Susi Caramelo, sobre enseñar sus pechos: “No quiero resumir mi carrera en eso porque me lo he currado mucho”

Susi Caramelo visitó por primera vez El Hormiguero para promocionar su programa en Movistar+. “¿Esto es real?” entraba diciendo la presentadora que no había estado hasta entonces en el programa de Antena 3.

Tras bailar junto a Pablo Motos, se sentó en la mesa y relató divertidas anécdotas como que le habían hecho una “lluvia dorada los fontaneros”, que amamantó a un gato durante cuatro días y hasta que se dejó una faja en casa de un actor del que no recordaba el nombre.

Pero si en algo se recreó Susi fue en el concepto de “pibonexia” del que se alzaba como la mayor referente: “Me creo que estoy que te cagas de buena todo el rato”, explicó a Pablo Motos a quien dijo que también lo era. “Yo sé que no soy un pibón pero me siento pibón todo el rato”. Y señaló que hasta en las telenovelas empezaban a usar el término: “La gente de Latinoamérica me conoce por ser pibonéxica”.

Tras ello, Motos le preguntó por el momento en el que se sacó los pechos en una alfombra roja cuando ejercía de reportera en Las que faltaban de Movistar+: “Ahí empezó todo”, reflexionó la invitada haciendo referencia a que se hizo conocida y demandada por los programas. “Si llego a saber que sacarme las tetas me iba a hacer tan famosa las hubiera enseñado antes”, confesó entre risas.

Aún así, subrayó lo siguiente: “No quiero resumir mi carrera en eso porque me lo he currado mucho. Pero ese día se alinearon los astros, estaba en un photocall que no me enteraba de nada, y veía a todas con escotes, con las tetas fuera, y me las saqué. También las quería enseñar antes de que se me caigan”, bromeó.

El final de la historia con Álex González

Otro de los momentos famosos de Susi Caramelo ocurrió hace unas semanas cuando publicó en sus redes el “drama” de coincidir con Álex González mientras le hacían a ella las mechas en la peluquería: “Es mi vecino, y yo había salido mil veces a la calle hecha un pincel por si me lo cruzaba y tuvo que verme con las platas en la cabeza”.

Sin embargo, Susi desveló cómo acabó la historia: “Aún así conseguí su teléfono y después le mandé una foto pidiéndole que borrara lo que había visto por la mañana. Y me respondió... ”pibón“.

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