Alba Carrillo no seguirá en Telecinco. La modelo, que ha sido una habitual de los programas y reality shows de Mediaset España durante la última década, se ha quedado fuera del nuevo escenario del grupo. La tertuliana llevaba días sin aparecer ante las pantallas de Ya es mediodía, del que era colaboradora estrella en su sección Fresh desde los inicios, y no volverá a intervenir.
Desde verTele hemos preguntado a fuentes de Unicorn Content, productora a la que estaba vinculada Carrillo, que confirman que el contrato como colaboradora terminó el pasado 31 de marzo y no ha sido renovado. Por tanto, efectivamente, no seguirá ni en Ya es mediodía ni en otros programas de la productora en los que pudiese colaborar o intervenir.
Cuestionados sobre el motivo por el que no se le ha renovado el contrato, las mismas fuentes de la productora no dan ningún tipo de explicación. Sin embargo, según ha sabido este medio, que Carrillo no continúe como colaboradora ha sido fruto de un acuerdo en consenso entre la cadena y la productora. Esto viene a confirmar lo que había publicado La Razón, aunque en este caso sería por distintos motivos a los que expresa el citado medio, pues no formaría parte de la política de vetos emprendida por Mediaset en sus programas.
Mediaset y los vetos de sus personajes
En cualquier caso, la salida de Carrillo se suma a que La Razón también había añadido más nombres a esa lista personalidades que ya no recibirán más atención por parte de sus programas. Son los del cómico Bigote Arrocet, la empresaria Carmen Lomana o la modelo e influencer Georgina Rodríguez. Fuentes de Mediaset consultadas por verTele niegan rotundamente que esto sea cierto, y de hecho este martes 18 de abril, mediante un comunicado, lo han hecho oficial: “Georgina Rodríguez, Carmen Lomana y Edmundo Arrocet no han sido vetados por Mediaset España”.
Otras fuentes del entorno de la cadena consultadas por verTele puntualizan cómo está la situación. Explican que no existe una lista oficial de vetados como tal, y que hay vetos a distintos 'niveles': por ejemplo, hay personajes a los que no se puede invitar a programas en plató; otros de los que no se puede emitir imágenes; y otros de los que ni siquiera se podría hablar o mencionar.
Cabe aclarar que esta estrategia no viene directamente de Alessandro Salem, puesto que el nuevo CEO de la compañía no está familiarizado con todos los personajes en cuestión que conforman el universo del grupo. Más bien surge de los directivos que han cogido más fuerza en esta etapa en Mediaset. Uno de ellos es Mario Rodríguez, director general Corporativo del grupo y adjunto al presidente. Como encargado de los asuntos jurídicos de Mediaset, ha tomado estas decisiones con criterio jurídico para evitar demandas, basándose en demandas y casos perdidos que han tenido en el pasado. Rodríguez es uno de los directivos que están implicados en este tipo de decisiones, pero no el único, y por eso bailan los nombres y se producen tantos cambios. Eso implica que desde los mismos programas no saben exactamente quién toma las decisiones ni conocen con exactitud los vetos o sus niveles.