Wyoming critica a Eurovisión por su censura sobre Palestina: “Pueden actuar con lentejuelas pero no con principios”
Eurovisión 2024 está viviendo uno de sus mayores “eurodramas” solo arrancar la primera semifinal. Aunque venía de más lejos (por la tibieza de la Unión Europea de Radiodifusión al confirmar hace meses la participación de Israel tras haber echado el año anterior a Rusia, asegurando que el festival es “apolítico”), la situación se extremó cuando este martes Eric Saade lució un pañuelo palestino y el certamen lo censuró y criticó.
Ante tal panorama, El Gran Wyoming empezaba la entrega de hoy en El Intermedio reflexionando sobre todo lo ocurrido: “El cantante sueco Eric Saade, con familia de origen palestino, actuó con un pañuelo palestino anudado en la muñeca. Y esto ha desatado una enorme polémica en el concurso”, contextualizaba.
Para continuar con su habitual ironía: “Ya ven qué cosas. No lo entiendo, yo creía que se podían llevar complementos, nosotros un año salimos con una guitarra de plástico y no molestó a nadie. Al menos hasta que el Chikilicuatre empezó a cantar, claro”.
Añadió: “La Unión Europea de Radiodifusión, la responsable del concurso, ha emitido un comunicado lamentando lo ocurrido y asegurando que Saade ha comprometido lo que ellos llaman el 'carácter apolítico' del evento. Eso es una prenda que en Palestina la lleva todo el mundo, es una prenda de vestir. Pues se ve que los cantantes de Eurovisión pueden subirse al escenario con lentejuelas pero no con principios”, sentenciaba.
Y añadía la siguiente reflexión: “Parece que con la masacre de Gaza hay que medir muy bien las palabras y los actos. Hoy por ejemplo, el ministro de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy, ha enviado una carta a las empresas españolas que trabajan en Israel para pedirles que no colaboren involuntariamente con el genocidio en Gaza. Y ha usado precisamente esa palabra: genocidio. La embajada de Israel no ha tardado en enviar un comunicado en el que rechaza lo que ellos llaman la falsa acusación de ministros intelectuales y medios de que Israel está cometiendo un genocidio y aseguran que esto demoniza e incita al odio y al antisemitismo”.
Tras ello, sacaba sus propias conclusiones: “No voy a ser yo quien lleve la contraria a la embajada pero lo que demoniza a Israel no es la carta de un ministro, son sus intolerables actos en la franja de Gaza. Condenar esta matanza no es ser antisemita, apoyar al pueblo palestino no es estar al lado de los terroristas. Denunciar este genocidio, que ya se ha cobrado más de 30.000 vidas, no es propaganda política como aseguran en Eurovisión, es ponerte al lado de las víctimas, en contra de los verdugos. Y sentir compasión de un pueblo al que están aniquilando”.
Momento en el que Wyoming cogía un pañuelo palestino y se vestía con él “En fin, voy a ponerme esto que tengo un poco de fresquito. Para que no se olvide, estos gestos son francamente necesarios. Sé que me estoy arriesgando a que esto me cierre las puertas de Eurovisión pero ya estaba vetado por cantar como el culo”, ironizó.