Netflix ha presentado este martes 30 de noviembre La casa de papel: Parte 5. Volumen 2, la tanda final de cinco capítulos que pondrán el broche a la historia de la ficción española que más calado ha dejado a nivel mundial. Una temporada que llegará a la plataforma este viernes 3 de diciembre, y que se ha planteado como un emocional final de viaje.
En una rueda de prensa a la que han asistido los actores Úrsula Corberó, Álvaro Morte, Pedro Alonso, Najwa Nimri, Miguel Herrán, Jaime Lorente, Esther Acebo, Darko Peric, Hovik Keuchkerian, Luka Peros, Belén Cuesta y Enrique Arce, además de los creadores Álex Pina y Esther Martínez Lobato, y el productor y director Jesús Colmenar, el elenco y responsables de la serie de atracadores han anticipado algunas claves del desenlace, y han dejado la puerta abierta a explorar otros universos paralelos.
“Esta temporada final tiene gran parte de adrenalina y muchos giros, pero funciona muy bien en términos sentimentales”, avanza Pina, el 'padre' de La casa de papel. Para él, “el final está muy equilibrado” y pronostica la reacción que tendrán muchos cuando se enfrenten al episodio definitivo: “Cuando lleguen al último capítulo, la gente va a preguntarse: ¿¡Pero cómo van a salir de esta!? Hay mucho que contar en este final”.
“Esta entrega se siente un poco distinta porque de alguna manera estamos terminando el viaje. Ha sido muy largo, rocambolesco, lleno de aventura y también de emocionalidad. Por una parte teníamos ese débito de finalizar bien las historias de los personajes, darles mucha cancha a sus emociones. Y emocionalmente los que escribimos la serie también necesitábamos cerrar ese viaje con mucho sentimiento. En esta última parte, esta narrativa más emocional era parte nuestra porque nos estamos despidiendo también nosotros”, añade por su parte Martínez Lobato, la 'madre' de la criatura.
En ese sentido, Colmenar valora que “en el primer volumen manejábamos la épica de la guerra, y en este segundo manejamos una épica emocional de los personajes en la que alcanzan sus clímax”. El director, que ha formado parte del equipo desde la primera temporada, asegura que “hasta el último capítulo de La casa de papel el puzle no se termina de cerrar y no acabas de entender lo que ha sido la serie en su conjunto”.
Además, Esther Martínez Lobato adelanta que en los cinco capítulos finales “hay muchos guiños a cómo empezó la serie, hay situaciones que se repiten y tesituras que recuerdan a cómo empezaron”. Un aspecto en lo que ahonda Álex Pina: “Muchas de las secuencias que más me gustan de toda la serie están aquí, en esta temporada final”.
Final cerrado y spin-off
Una de las grandes dudas que suscita el final de La casa de papel es si las tramas tendrán un cierre absoluto, o si se dejará algún hilo para tirar de él en los siempre rumoreados spin-off. “Eso es algo que estamos pensando, pero ahora mismo está en el aire. Estamos dándole vueltas. No te puedo responder a eso hoy”, ha comentado el showrunner, evidenciando que están valorando poner en marcha alguna serie derivada, pero que todavía no es momento de hablar de ello.
Sí ha querido dejar claro su compañero Jesús Colmenar que la serie como tal, sí quedará cerrada con esta Parte 5: “El final de La casa de papel es el final de La casa de papel. No se deja la puerta abierta a una temporada 6 o 7, aquí culmina la historia. De otro tipo de proyectos alternativos no puedo hablar”.
[ACTUALIZADO] Apenas unas horas después de este encuentro con los medios de comunicación en el que el spin-off era algo “que estamos pensando” y que “está en el aire”, Netflix anunció, con vídeo incluido, que habrá una serie derivada con Berlín como protagonista.
Habrá que esperar a este viernes 3 de diciembre para conocer cómo termina la historia para El Profesor, la banda y la Inspectora Alicia Sierra. Lo que podemos saber por el momento es que Najwa Nimri, la encargada de dar vida a esta última, está más que satisfecha con el resultado. “Soy de las que ha visto todo el material y me ha encantado lo más grande. Me parece que era complicadísimo de solucionar, y me ha encantado. También el final de mi personaje”, ha opinado la actriz.
Jaime Lorente, por su parte, opina que no todos los espectadores quedarán satisfechos por el mero hecho de que no habrá más capítulos de La casa de papel. “Sea como sea el final, a nadie le va a gustar porque a nadie le gusta que terminen las cosas. Pero lo importante es el viaje de la serie. Lo que ha pasado con la gente es lo suficientemente fuerte para que merezca la pena”, ha declarado el actor que encarna a Denver.
De Tokio a Berlín
Sobre el desenlace de su personaje sí ha podido hablar abiertamente Úrsula Corberó, pues su Tokio murió al final del primer volumen. “Fue muy duro”, ha comenzado diciendo sobre la despedida del rol que le ha dado mayor proyección mundial. “Estoy súper contenta con ese final de Tokio y no sé si tengo que decir esto, pero en parte quería que sucediera así. Tuvimos un montón de charlas y creo que Tokio era carne de cañón desde el principio”, ha comentado, en la línea de lo que ya dijo (entonces, sin spoilers) en una entrevista con verTele previa al estreno de la Parte 5. “Creo que hay algo muy poético y bello en eso que dice de vivir varias vidas. Siempre había tenido la sensación de que había sido así desde que El Profesor contactó con ella”, ha añadido.
Sobre el rodaje de sus últimas escenas, la actriz ha dicho que “fue un proceso muy heavy porque rodé todo cronológicamente y tardé mucho en recuperarme. A día de hoy creo que me he recuperado, pero no lo tengo claro tampoco”. Ahora, desde fuera, espera con entusiasmo el estreno de los capítulos finales: “Con el volumen 2 estoy muy entusiasmada porque no me he leído los guiones, no sé qué pasa. Me pasaron los capítulos hace dos días y he decidido no verlos porque así no puedo hacer spoilers. Me apetece ver esta última parte como una espectadora y como fan. Se me está dando una oportunidad que no podía rechazar”.
Aunque él sí que ha seguido formando parte de la serie tras la muerte de su personaje, también Pedro Alonso ha valorado cómo fue para él pasar de ser un activo en las escenas de acción, a despedirse del mono rojo de Berlín para aparecer solo en flashbacks: “Cuando hablamos de recuperar el personaje, mi miedo era perderme el presente de la acción de un personaje que vive desatando el caos. Eso nos llevó a reinventarnos, y al final el personaje ha sido a su vez diferentes personajes. He echado de menos la acción, pero en Copenhague no se está mal”.
Tiempo de despedidas
Para todo el elenco se cierra ahora una etapa que les ha dado sus mayores alegrías a nivel profesional. Sobre ello ha hecho balance Álvaro Morte, al que el papel de El Profesor ha situado en un lugar privilegiado tras años luchando por hacerse un hueco. “Ha sido mucho tiempo de disfrute. El Profesor me ha dado muchas cosas muy bonitas y de todas ellas me quedo con el trabajo que he podido disfrutar estando codo con codo con gente maravillosa. He podido aprender muchísimo. Más allá del fenómeno, cuando en un futuro mire atrás me quedo con ese trabajo de campo que ha sido el rodaje día a día con unos compañeros y textos maravillosos”, ha reconocido.
En la misma línea se pronuncia Esther Acebo, Estocolmo: “Hemos compartido tanto que te llevas a casas muchas vivencias muy intensas”, ha admitido, al tiempo que reconoce que conforme pase el tiempo irán asumiendo todo lo que ha supuesto La casa de papel: “Dentro un tiempo seremos más capaces de darnos cuenta de que estábamos dentro de este fenómeno enorme del que ahora no somos tan conscientes”.
A nivel personal y profesional, todos se quedan con las vivencias. Y en lo material, hay una actriz que desde la primera etapa de la serie acumula recuerdos: “En la segunda temporada me llevé todo pensando que era el final de la serie. Y en la quinta me volví a llevar todo. Me he quedado hasta el colgante de brillantes de Tokio”, ha confesado Úrsula Corberó, asegurando que “tampoco me lo han pedido de vuelta”.
El legado de 'La casa de papel'
Como los fans de La casa de papel ya saben, la serie tuvo una primera etapa en Antena 3 que concluyó con un final en teoría definitivo, y 'resucitó' tras incorporarse al catálogo de Netflix y convertirse en todo un fenómeno mundial. Sobre este proceso, y el precedente que ha sentado la ficción patria, ha reflexionado Álex Pina:
“Antes nos costaba mucho llegar a vender la serie a otros países, no teníamos los canales de distribución de las majors. Al final colocarnos en Netflix, estrenar a nivel mundial y jugar en las ligas de las grandes producciones, ha colocado a la industria en un sitio en el que no nos atrevíamos ni a pensar. Siempre hemos sido un país acomplejado en ese sentido, se hablaba de 'españoladas', y hemos llegado y mucha gente está llegando. Hemos conseguido que lo muy local se pelee con lo más grande y les ganemos en muchos casos. Este es el viaje de una consolidación de la industria”, ha comentado el showrunner.
A su lado, Colmenar también ha dado su visión: “Tengo la sensación de que muchos de los que estamos aquí llevamos muchos años luchando dentro de la industria televisiva española. Primero intentando derribar grandes barreras que había con el 'buenismo' y la 'señora de Cuenca'. Ha sido una batalla ardua durante muchos años, y para mí La casa de papel ha supuesto el clímax de esa batalla. Queríamos hacer una ficción televisiva más cinematográfica que pudiera ser global y exportable. Y ves ahora la ficción española y es alucinante”.
Sobre lo que les ha aportado a nivel profesional, Pina ha añadido: “La casa de papel nos ha dado crédito. Toda la ficción se mueve por tendencias y de pronto ahora parece que lo español tiene mucho sentido y a la gente le interesa cómo contamos las historias. [La serie] Ha empujado mucho a que nos vea y se nos reconozca. Y personalmente ha supuesto muchísimo. Lo que te da un gran éxito es la posibilidad de contar muchas más cosas, te da crédito. Siempre hemos intentado hacer una ficción diferente y contar nuestras propias historias sin intermediarios. La casa de papel nos ha cambiado la vida y hemos aprendido mucho [con ella]”.
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