La importancia de llamarse Mariano en las televisiones del mundo
Las televisiones del mundo están aprendiendo a pronunciar el nombre de Mariano Rajoy. En la BBC apenas se entiende, en la francesa TF1 resulta casi cómico y en la Italiana RAI se escucha a un locutor decir 'ra ra ra', como el que anima a su equipo, antes de arrancar con el nuevo presidente del gobierno español.
En las cadenas patrias hace mucho que se pronuncia Rajoy con gran corrección. Lo que tendrán que aprender es a tratar con el nuevo ejecutivo conservador. Hace tiempo que los máximos responsables de las televisiones empezaron a mover sus fichas para llevarse bien con los populares, que en los próximos años necesitarán menos a los medios que en épocas anteriores.
Aparte de anécdotas divertidas, como las declaraciones de Ana Rosa Quintana o Mariló Montero, en las altas esferas se han producido reuniones con miembros de la cúpula del PP para tratar temas que van desde la obligatoriedad de financiar el cine hasta las futuras fusiones empresariales, pasando por la privatización de las autonómicas o el tono de los informativos en la era Rajoy.
Telecinco goza de aparente buena salud, pero las acciones de Mediaset valen poco más de la mitad que hace un año, al margen de problemas como el papelón de La Noria. A cambio de un buen tratamiento, Piqueras lleva tiempo dedicando sus telediarios a hablar de sucesos, 'modeluquis' y otros asuntillos sin contenido político. Al PP de momento parece no importarle más que al PSOE que paguen a personajes cercanos a la delincuencia, tipo madre del Cuco, Julián Muñoz o la propia Isabel Pantoja, nueva estrella de Paolo Vasile.
La tonadillera, presumiblemente, acabará pagando sus penas o sus multas con dinero de Tele 5, que le entrega una fortuna por bailar, cantar las uvas o poner a su niño a hablar con su padre muerto o contar que ha embarazado a una novia de 20 años... O eso fue en otro sitio? Pronto seguimos con el futuro de las cadenas en la continuación de este blog.
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