En audiencias masivas, sólo existe la televisión

En la época de la atomización y de la competencia de internet, la paradoja reside en que el medio de comunicación masivo por excelencia seguirá siendo la televisión.

Vertele se ha hecho eco del espectacular dato de audiencia de la final de “X Factor”, 17 millones de espectadores y 55% de cuota de pantalla de ITV1 en el Reino Unido.

En Francia, TF1 acaba de registrar un 51% de share con la emisión de la película “Bienvenidos al norte”, con 14.4 millones de espectadores, en un entorno tan duro como el de la televisión francesa.

La final del Campeonato Mundial de Fútbol de Sudáfrica con la victoria de “la Roja” fue seguida por casi 14 millones de telespectadores, un 82,9% de cuota de pantalla (sumando audiencias de Telecinco, Canal + y Canal + Liga), mientras que la prórroga se convirtió en la emisión más vista de la historia de la televisión de España, con 15.605.000 teleespectadores y un 85,9% de cuota de pantalla.El minuto de oro, justo un minuto antes del gol de Iniesta, logró un 91% de cuota de pantalla y 16.815.000 teleespectadores.

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¿Alguién da más?

Cuando se trata de movilizar audiencias masivas, nada puede competir con la televisión.

En 1990 un escritor americano, George Gilder, anunció que a finales del siglo XX la televisión tradicional se extinguiría porque la tecnología no permitiría a los espectadores sintonizar programas que coincidieran con sus intereses particulares.

¿La verdad? Cada día pasamos más tiempo antes las pantallas, viéndola de forma distinta, pero los grandes acontecimientos nos convocan, de forma masiva, delante de la televisión de siempre.

En la época de la atomización y de la competencia de internet, la paradoja reside en que el medio de comunicación masivo por excelencia seguirá siendo la televisión.

Vertele se ha hecho eco del espectacular dato de audiencia de la final de “X Factor”, 17 millones de espectadores y 55% de cuota de pantalla de ITV1 en el Reino Unido.