La UER y la cadena organizadora de esta edición de Eurovisión, NDR, han celebrado hoy una rueda de prensa extraordinaria para aclarar la polémica ante los medios suscitada por las incidencias técnicas con el sonido durante la retransmisión de la primera semifinal de anoche, según informa Eurovisión Spain.
Ambas corporaciones han pedido disculpas por lo ocurrido: problemas generalizados con el sonido y especialmente con el audio de muchos de los comentaristas.
Falló el sonido en 10 países, aunque no al mismo tiempo
Finalmente se ha concluido que el sonido de los comentarios de al menos diez países falló ayer, aunque no al mismo tiempo en todos ellos.
Como solución de emergencia, varios de estos países optaron por emitir los comentarios de sus enviados a través de sus teléfonos móviles.
Se aumentará la seguridad técnica para futuras galas
Según se ha podido saber, al acabar la gala hubo un fuerte debate entre la NDR, la UER y la compañía responsable del sonido, que ha recomendado aumentar las medidas de seguridad técnicas para las futuras galas, así como añadir más personal especializado.
Esta misma noche se harán pruebas para garantizar la segunda semifinal
Está previsto que esta misma noche la empresa haga pruebas sobre el sistema para garantizar el funcionamiento correcto en la segunda semifinal de mañana, conjuntamente con todos los países restantes implicados.
Por su parte, el nuevo Supervisor Ejecutivo para el Festival, Jan Ola Sand, y que ayer pudimos ver estrenando sus funciones en sustitución de Svante Stockselius, ha mostrado su malestar por la situación pero se muestra muy confiado en que las pruebas de esta noche consigan garantizar el correcto funcionamiento del sistema en las dos restantes galas.
“España no es culpable de la eliminación de Noruega”
Con el comienzo del festival de Eurovisión, empieza también la polémica. Noruega, una de las favoritas de esta edición, fue eliminada en la primera semifinal que emitió ayer La 2 con el mencionado problema de sonido que impidió que se escuchara la mayor parte del tema que interpretó Stella Mwangi.
Sin embargo, se sospechaba que el fallo en el audio del que fueron testigos los espectadores españoles también había afectado a otros países, un extremo que ha sido investigado y aclarado ya por la organización del Festival, así como los responsables de la delegación española en Düsseldorf.
El diario alemán Bild reconocía esta mañana estos problemas de sonido y explicaba que las “líneas” se cayeron, por lo que los locutores que retransmitían el evento “tuvieron que recurrir al teléfono para seguir con su trabajo”, explica el periódico.
Los 12 puntos de España no hubieran salvado a Noruega
La polémica ha salpicado a España. Lo cierto es que en nuestro país solo se escuchó el comienzo y el final de la canción Haba Haba, de Stella Mwangi, a pesar de que la imagen se veía a la perfección, tal y como se puede ver en este vídeo a partir del minuto 0:43.
Pero, ¿fue víctima la representante noruega del fallo de sonido durante su actuación? Al parecer no, según explicaba Jon Ola Sand, un responsable de la UER, en un artículo de la televisión noruega NRK que recoge Eurovision-spain.com.
En este sentido, “si los 12 puntos del público español hubieran ido a parar a este país”, cosa que no sabemos, “Stella tampoco hubiera sido finalista,” asegura la NRK, eximiendo así a la votación española de cualquier responsabilidad. Es preciso saber que a pesar de estas informaciones, nunca se hacen públicos los votos que recibe cada país en las semifinales, para evitar que se condicione la final, por los que se desconoce cuántos votos logró la canción noruega en la semifinal de anoche.
*Actuación de Noruega sin fallo de sonido (vídeo BBC)
Hay que recordar que en la gala de ayer, en la que participaban 19 concursantes y se elegían a 10, votaban todos los países involucrados en la misma, pero también dos miembros del Big Five: España y Reino Unido, donde sí se escuchó bien la canción noruega, tal y como demuestra el vídeo de la BBC.
Los problemas de sonido siguieron durante toda la noche
La voz de José María Íñigo permaneció silenciada durante cerca de 10 minutos tras la actuación de Noruega. El propio locutor pidió disculpas una vez pudo volver a conectar con la audiencia. Desde ese momento, la voz de Íñigo y de otros muchos comentaristas llegó por teléfono, tal y como explica el diario alemán Bild, con gran dificultad.