La actriz Ana Obregón, enfadada por la emisión de unas imágenes de su hijo, habría encargado en abril de 2007 a su guardaespaldas, Eloy Sánchez Barba, que le diera una paliza al presentador Jaime Cantizano.
Al menos eso es lo que publica esta semana la revista Interviú, que asegura que la conversación fue grabada por la Guardia Civil en el marco de una investigación por el asesinato de un hombre en Madrid.
Ana Obregón ha presentado una querella criminal a la revsita Interviú por la publicación de este reportaje, según ha informado esta tarde el progarma de Telecinco “Está pasando”. A continuación reproducimos por su interés el reportaje de Interviú:
A mediados de abril de 2007, la popular actriz y presentadora Ana García Obregón estaba indignada con Jaime Cantizano, el presentador del programa rosa ¿Dónde estás corazón?, que se emite los viernes por la noche en Antena 3. Obregón llamó por teléfono a su guardaespaldas, Eloy Sánchez Barba, y le dijo, refiriéndose al presentador:
“Estoy muy cabreada, ¿no has visto lo del gilipollas ése, lo del programa de Cantizano? Se han metido con Álex [el hijo de Ana García Obregón y Alessandro Lequio]. Quiero que le des una paliza, pero que no lo haga cualquiera, quiero que busques a ‘los Miami’”.
Ana se refería a la banda de los Miami, un grupo de delincuentes españoles, vinculados con la noche madrileña, amigos de algunos famosos y dedicados, entre otras cosas, a los ajustes de cuentas, el tráfico de drogas y el cobro de deudas.
Sánchez Barba, responsable de una empresa de seguridad, tiene entre sus clientes a varios populares locales nocturnos de Madrid, empresas constructoras y la familia de la actriz Ana Obregón. Eloy, junto a varios de sus empleados, se encargaba de la seguridad personal de Ana, sus padres y su hijo adolescente.
Él mismo conducía en ocasiones el coche en el que viajaba la popular actriz. Eloy trabaja para la familia García Obregón desde, al menos, el año 2002, según ha podido saber interviú.
La Guardia Civil, que estaba investigando a Sánchez Barba por su implicación en el asesinato de Miguel Ángel Salgado, un informático que murió tiroteado en el garaje de su casa de Ciempozuelos (Madrid) el 14 de marzo de 2007, grabó la conversación telefónica y puso de inmediato los hechos en conocimiento de la jueza, que desgajó de las diligencias del asesinato lo referente a las supuestas amenazas de la actriz al presentador.
Los agentes que investigaban el caso se entrevistaron también con Jaime Cantizano y le pusieron sobre aviso, aunque no le dijeron el origen de las amenazas. Le preguntaron por si había recibido ese tipo de presiones o si se le ocurría quién podía quererle tan mal.
El presentador contó a los agentes que no sabía de nadie, que llevaba una vida ordenada, que apenas salía por las noches y que repartía su tiempo entre su trabajo en televisión y el gimnasio. El pasado viernes, la actriz desmintió en el programa Está pasando, de Tele 5, que hubiera “buscado las cosquillas” a un famoso, tal y como se apuntó en esa misma cadena.
La jueza que lleva el caso del asesinato y el magistrado que incoa el presunto delito de amenazas de Ana Obregón se coordinaron. De forma que el juzgado que investiga las amenazas a Cantizano decidió esperar y dejar el tema en punto muerto, hasta que los investigadores resolvieran el crimen, algo que ocurrió la semana pasada. El pasado día 20, agentes de la Guardia Civil detuvieron a Eloy Sánchez Barba, acusado de estar implicado en el crimen del informático madrileño.
La brillante operación de la Comandancia de Madrid culminó con la detención de la ex esposa del ejecutivo asesinado, la abogada Dolores Martín Pozo, acusada de haber encargado el crimen, y el pistolero, un ex militar llamado Charles Michael Guarín, que fue quien disparó el arma, según fuentes de la investigación.