El Congreso de los Diputados aprobó hoy el proyecto de ley de reforma de la radio y la televisión de titularidad estatal, en el que se establece la creación de la figura del presidente de la Corporación de RTVE, en la que se refundirían los cargos de presidente y director general, que será elegido para seis años por mayoría de dos tercios de la Cámara, y que también presidirá el consejo de administración. Además, el proyecto, aprobado hoy en la Comisión Constitucional con competencia legislativa plena -por lo que pasa ahora a su tramitación en el Senado para su regreso a la Cámara Baja probablemente a finales de abril, cuando recibirá su aprobación definitiva en Pleno-, establece la ampliación del número de miembros del consejo se amplíe de los diez actuales a doce. Ocho de ellos serán elegidos, igualmente por mayoría de dos tercios, por el Congreso (dos por designación de las dos centrales sindicales mayoritarias CC.OO. y UGT) y otros cuatro por el Senado. De entre ellos será elegido el presidente de la Corporación y del consejo, cuyo cargo será “la dirección ejecutiva ordinaria” de ambos organismos. Asimismo, en el texto final, configurado mediante una serie de enmiedas transaccionales de última hora del PSOE, se recoge que la Corporación se rija por un mandato marco por nueve años que fije los objetivos generales, y por sucesivos contratos programa, por tres años, aprobados por el Gobierno y RTVE, que desarrollarían las materias concretas, y que estaría condicionados por los Presupuestos Generales del Estado para el año en curso. La portavoz del Grupo Popular, Macarena Montesinos, se manifestó contraria a la unificación de los cargos de presidente y director general en una sola persona, al considerar que compromete la independencia que la ley pretende garantizar. En este sentido, apuntó que con ello el Grupo Socialista pretende “decretar la independencia, cuando lo que se hace es poner negro sobre blanco el sectarismo y el uso y disfrute de RTVE por parte del PSOE”, y recordó que su grupo fue el único que pidió en una enmienda que el futuro director general fuera elegido por el Parlamento. El portavoz del Grupo Socialista, Oscar López, le recordó que esa medida estaba incluida en el programa electoral del PSOE y que si no se incluyó en el anteproyecto de ley fue porque el Gobierno se limitó a recoger en éste las recomendaciones del 'Comité de Sabios', que no contemplaron esta propuesta. “El acuerdo se basa en que todos los grupos de la Cámara así lo pidieron y por eso se ha modificado la ley”, precisó. El portavoz de IU, Gaspar Llamazares, sin embargo, consideró esta medida un “avance sustancial”, mientras el portavoz de CiU, Jordi Vilajoana, reconoció que la nueva corporación “necesita un alto ejecutivo, con fuerza y con capacidad de decisión, por lo que refundir ambas figuras es una buena decisión, ya que la ley generaba dos figuras que hacían difícil la gestión de RTVE”. Mantener los centros territoriales Otro de los puntos centrales del debate en comisión fue la queja de algunos grupos, como el PP, ERC y PNV, de la ausencia de concreción en materia del carácter territorial de RTVE. En este sentido, el portavoz del Grupo Vasco, Joseba Beloki, se quejó de la “falta de concreción” del proyecto de ley en esta materia y la representante del PP, la “somera referencia” al tema que, a su juicio, el texto legal deberá tener una “referencia expresa a los centros territoriales.
Oscar López, sin embargo, quiso salir al paso del “mensaje catastrofista” del PP sobre posibles privatizaciones en ente o el propio cierre de centros territoriales, negando ambos supuestos. En este sentido, Julio Llamazares, reconoció que el texto “mantiene la referencia territorial de RTVE” que, sin embargo, echaban de menos otros grupos parlamentarios.
En la misma línea, los grupos parlamentarios de la oposición echaron de menos en el texto legal referencias claras y precisas al fomento de la pluralidad lingüística en la futura RTVE. “Se habla de identidad cultural, pero no del tema lingüístico, y eso no se puede obviar”, advirtió Beloki.
Por todo ello, Vilajoana propuso que haya centros territoriales “pero también centros de producción descentralizados, como Sant Cugat”. A su juicio, “debe quedar claro el carácter plurilingüístico por la vía de las desconexiones pero también en la televisión emitida a nivel estatal”.
Además, pidió que se cree en una sociedad estatal de producción de programas, separado de la edición y la difusión, al considerar que la producción no forma parte del servicio público, y sugirió que se eleve del 5 al 10 por ciento que TVE destina de sus beneficios al cine europeo y español.
Otros temas de preocupación para los grupos de oposición fueron el futuro de la Orquesta y Coros de RTVE y el IORTV, que Oscar López aseguró que están garantizados aunque no se hayan definido en la ley; la cautela sobre la conservación y propiedad del archivo histórico del ente, y la referencia en el texto a la posible existencia de canales codificados.
“Trágala” legal Tras dos horas de debate y otra más de votaciones, tanto el PP como el Grupo Vasco y ERC se quejaron del procedimiento acelerado para la aprobación del proyecto de ley, que Montesinos calificó de “trágala” debido a las enmiendas transaccionales introducidas en el último momento por el Grupo Socialista que llevaron a la introducción de las más importantes novedades al texto del proyecto. A su juicio, lo único que buscaba el PSOE con este sistema de aprobación en comisión es “sumar un proyecto más a la producción del Gobierno y adelgazar RTVE a toda velocidad para que sus activos sean aprovechados por otros operadores”. Sin embargo, el portavoz del PSOE precisó que se ha mantenido un “intenso diálogo y negociación”, con ocho ampliaciones de plazo de enmiendas, lo que demuestra el deseo del Grupo Socialista de llegar a acuerdos“.
Posteriormente a la celebración de la comisión, el portavoz socialista explicó que, con la nueva ley, el consejo de administración no podrá endeudarse “como hasta ahora”, ya que el incumplimiento de los acuerdos es motivo de cese de los consejeros.
Así, recordó que la futura RTVE partirá con una deuda cero, ya que en los Presupuestos Generales del Estado para este año se previó una partida para pagar el déficit que se genere este año y la deuda histórica se absorberá mediante un plan financiero específico.