Croacia ha hecho valer su condición de gran favorito a ganar Eurovisión 2024 en su paso por la gran final de la 68ª edición en el Malmö Arena. El artista Baby Lasagna ha contagiado al público del colorido frenesí roquero del contundente Rim Tim Tagi Dim, a punto de concluir las actuaciones de la gala, y ha acabado segundo sólo por detrás de la ganadora Suiza con Nemo y su 'The Code'.
Con este poderoso tema sobre el éxodo rural que cuenta con un trasfondo emocional personal para su cantante, cuyo nombre real es Marko Purišić, el país balcánico selló el pasado martes su pase a la final esperando romper una racha de cierta intrascendencia en el certamen.
De las últimas 10 ediciones, Croacia se había quedado en la ronda de semifinales en siete ocasiones. En los 30 años de participaciones del país, el mejor resultado correspondía a las candidaturas de 1996, Maja Blagdan, y 1999, Doris Dragović, que terminaron en cuarto lugar en ambos casos.
Esta vez, el que fuera integrante de la banda Manntra afrontaba el que podía ser su mayor éxito global, algo que llama la atención al tener en cuenta que no era la primera opción de su país.