El caso está cerrado en España

La justicia italiana se va de vacío tras declarar Raquel Sánchez Silva y seis testigos más

Raquel Sánchez Silva declaró en Madrid este viernes 13 de junio ante el fiscal de Palermo, Calogero Ferrara, junto con otros seis testigos: el representante de Raquel, su tío, una vecina, dos de sus amigos y la asistenta de su antiguo hogar, Vilma Graciela, que fue quien descubrió el cadáver de Mario Biondo la tarde del 30 de mayo de 2013, según informa Vanitatis.

Según narran fuentes judiciales al citado medio, el interrogatorio se basó en preguntas simples sobre el pasado de su marido y sobre lo que ella hizo el día de su muerte.

Dichas mismas fuentes explican que las declaraciones escritas de todos los testigos “no aportan absolutamente nada nuevo a la causa”, por lo que la investigación no parece que vaya a dar un giro.

Los padres de Mario, con TV italianas y minicámara

Los padres de Mario Biondo viajaron acompañados por dos periodistas de la televisión italiana, uno del grupo Mediaset y otro de la RAI, que accedieron con ellos al Juzgado número 13 de Plaza de Castilla.

Su intención este viernes era recopilar material para mostrar a los programas de sucesos. Sin embargo, al grupo se le requisó un bolígrafo con cámara incorporada.

La justicia española cerró el caso, que fue ratificado en septiembre. “Muerte por ahorcamiento”, afirmaba la autopsia. El caso sigue abierto en Italia, ya que la familia del cámara defiende la tesis de un asesinato.