'Al rojo vivo' ha tratado, en su edición del viernes 7 de agosto, un tema tan delicado como los retrasos en la adjudicación de las ayudas a las personas dependientes. Cristina Pardo ha hablado con una anciana valenciana, Pilar, cuyo marido falleció esperando no ya la prestación, sino una evaluación de su caso.
El testimonio de la entrevistada ha terminado de una forma más ligera, simpática, amén de algo incómoda: la “Karanka” de Antonio García Ferreras agradecía a la mujer su fortaleza a la hora de contar su caso. Esta, entonces, se declaró seguidora del espacio... Pero añadió: “Paso de 'Al rojo vivo' a Cuatro”, mientras imitaba con mímica el “zapeo” con el mando a distancia.
La presentadora contestó con humor: “Pues a ver si conseguimos que se quede en 'Al rojo vivo' y no pase a ningún sitio”. “Bueno, ahora ya seré más de 'Al rojo vivo'”, asintió Pilar.
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