Alexader Siddig, actor de extensa experiencia en televisión, ha mostrado su descontento por la manera en que 'Juego de Tronos' le despachó de la serie, tras cinco capítulos. Pero el sudanés va más allá y cuestiona la manera en la que la ficción “juega” con los fans.
Lo ha declarado al portal oficial de 'Star Trek', donde comparaba lo mucho que había cambiado la forma de promocionar una ser, desde que participó en 'Star Trek: Espacio profundo': “Creo que el secretismo es comprensible, pero también es un elemento que eleva las expectativas... Cuanto más secreto es el proyecto, más especial es. Y 'Juego de Tronos' juega a eso. Despistan al público y les dan pequeños avances que los guían en las direcciones equivocadas”, dice, y recuerda las filtraciones de los episodios de la sexta temporada: “Estoy convencido de que esos cuatro capítulos fueron filtrados por la propia HBO”.
Al fichar por la serie, donde interpretó a Doran Martell: “Todo era lo mejor de lo mejor. Tienen el mejor equipo técnico de todo el mundo. Es impresionante. Todo lo que recuerdo es eso, que todo era enorme. Eso y a los actores rezando para que no los mataran”.
“Puede que dijera algo equivocado a la persona equivocada”
Ese fue su destino: “Es curioso, no sé bien qué sucedió. Me habían contratado para hacer al menos cuatro episodios esta temporada, pero cuando llegué a Los Ángeles para promocionar otra cosa, recibí una llamada”, narra. La llamada era de alguien de la serie, aunque no le dijo quién era realmente. “Me dijeron: ”Ya sabes por qué te llamamos“, y yo dije: ”Sí, supongo“. Me dijeron que me iban a matar al final de la última temporada, pero que habían decidido que finalmente me matarían nada más comenzar esta”.
“Había algo raro en todo aquello, porque me habían contratado para cuatro episodios más en la siguiente temporada”, continúa.“¿Por qué me contrataron para esos cuatro capítulos? Porque les cuesta dinero tanto si los hago como si no, así que no tiene mucho sentido económicamente hablando”.
Siddig es de la opinión de que el equipo de la ficción no quería que su personaje tuviera la relevancia que algunos le estaban dando a su fichaje. “Quizás pensaron: 'Vamos a probar que nos vamos a separar de los libros, que vamos a hacer otra cosa, empezando por aquí'. Puede ser eso, o puede que yo la fastidiara. Puede que dijera algo equivocado a la persona equivocada”.