¿Aceptaría alguien concursar en un programa del estilo de “Gran Hermano” sin saber cuándo terminará su encierro.. o a sabiendas de que podría durar.. para siempre? ¿Aguantarías vivir “eternamente” en un paraíso terrenal? Bajo estas premisas estrenó la Fox el pasado 1 de marzo “Forever Eden” (Paraíso Eterno). Se trata de la última propuesta de telerrealidad de la cadena de Rupert Murdoch, que lleva a un grupo de solteros a un complejo hotelero ubicado en un jardín tropical para filmar su vida real a modo de telenovela. La novedad está en su duración “indefinida”. Es decir, los participantes no saben si su “aislamiento” durará 3 meses, 3 años... o eternamente. Eso sí, pueden abandonar el concurso siempre que lo deseen, pero cuánto más tiempo aguanten sin caer en la tentación de volver a la civilización, mayor será el premio económico, ya que éste es acumulable durante el transcurso del programa. Un decepcionante debut Presentado como “la primera telenovela real infinita”, “Forever Eden” generó una gran expectación por el giro de tuerca que aportaba su duración indefinida. Sin embargo, hasta ahora el programa no ha cumplido las expectativas de audiencia. El primer día obtuvo un aceptable registro de 7.2 puntos de rating (11% de share) gracias, en parte, a que sucedía en la parrilla al exitoso “American Idol”. Sin embargo, el programa ha ido perdiendo audiencia en siguientes emisiones –cuando ya no iba precedido por el reality musical- hasta caer a un registro de 3.9 puntos de rating (6% de share), el pasado 8 de marzo. Las críticas tampoco han sido muy favorables, aunque esto no resulta muy significativo teniendo en cuenta que la telerrealidad, por norma general es un género que produce rechazo entre los críticos televisivos, sea el formato que sea. En cualquier caso, la audiencia en ocasiones es voluble, por lo que estaremos atentos a la evolución del programa por si éste consiguiera invertir la tendencia y remontar su discreto debut. Un “Paradise Hotel” con duración indefinida “Forever Eden” es una idea de Mentorn, la misma productora responsable de “Paradise Hotel”, un reality show que emitió la Fox el pasado verano en el que un grupo de hombres y mujeres, todos ellos solteros y atractivos, eran recluidos en un hotel de lujo. Cada semana uno de los concursantes era expulsado del “paraíso” y reemplazado por una nueva persona de fuera según la votación del público, de manera que el número de huéspedes siempre fuera es el mismo. Con “Forever Eden” la productora decidió dar un paso más y hacer que “la vida en directo” dure indefinidamente. Por lo demás, la mecánica es parecida a la de “Paradise Hotel”. El programa sigue la convivencia de un grupo de atractivos jóvenes, todos ellos sin pareja, que residen en un hotel paradisíaco de cinco estrellas. Una telenovela sobre la “vida en directo” “El encierro podría durar hasta 6 meses”, declaró durante la presentación del programa uno de sus productores, el experto en reality shows, Mike Darnell. “O podrían ser 3 años. La idea es que no van a hacer un reality show. Lo que van a hacer es divorciarse de sus vidas. Se convertirán en estrellas de un serial televisivo, porque sus vidas van a ser televisadas por un periodo de tiempo muy, muy largo”, advertía entonces Darnell sobre este nuevo formato que recuerda al argumento de la película Ed TV. Los participantes pueden abandonar el paraíso cuando quieran El programa no obliga a nadie a quedarse. Los huéspedes pueden abandonar el hotel cuando quieran. El incentivo para que aguanten el mayor tiempo posible es económico. Cuanto más tiempo permanezcan en el concurso, más dinero irán acumulando a la cantidad final que se lleven a sus casas. Cada semana hay una expulsión por votación del público. Los eliminados consiguen la mitad del dinero que tuvieran acumulado hasta el momento de su expulsión. Si alguno decide abandonar voluntariamente el concurso, puede hacerlo en cualquier momento, pero perdería todo el dinero acumulado.
Invitados “sorpresa” de vez en cuando Como es habitual en los reality shows, los productores introducen continuos giros de tuercas y sorpresas en el día a día del concurso para mantener el interés por la convivencia, que es presentada a los espectadores de manera dramatizada, como si fuera una telenovela real. De vez en cuando aparecen invitados por sorpresa, que suelen ser personas que pertenecen al pasado de los participantes “con el fin de poner todo patas arriba”, decían los responsables antes del estreno del programa.