Tras recibir la enhorabuena de Susanna Griso por lograr juntar a Felipe González y a Artur Mas en un 'cara a cara' que abrirá la nueva temporada de Salvados este domingo, Jordi Évole ha reconocido que conseguirlo “no fue fácil” por las agendas “bestias” de ambos, “pero al final lo logramos y muy contentos” en una entrevista en Espejo Público.
El periodista ha explicado las conclusiones que sacó de ese encuentro: “Hay muchas ganas de dialogar, pero no sé si se dan los pasos para el diálogo. Una de las cosas que ha pretendido este programa es que ahora que se habla de hablar, se hable. Y que el ciudadano perciba lo que se piensa en esas alturas políticas”.
“En muchas fórmulas, Felipe González coincide con el mensaje de Rajoy”
Griso le ha dicho que el próximo debía ser con Rajoy, y Évole ha recogido el guante: “Ojalá. La invitación está hecha y nos hubiese encantado que hubiese sido así o que sea en el futuro así”.
“Este es un primer paso. La presencia de Felipe González, el presidente que más años hemos tenido en democracia, tiene una simbología importante. Y para mí igual puede variar en algunas fórmulas, pero en muchas otras también coincide con el mensaje que está lanzando Rajoy”.
Sobre los asuntos que tratará Salvados en su nueva temporada, Évole ha adelantado dos: “Tenemos un programa dedicado a la reinserción de presos, y otro que estamos grabando ahora mismo sobre pobreza energética”.
También han recordado la reapertura del caso del Metro de Valencia
La presentadora de Espejo Público aprovechó también para recordar la reapertura del caso del Metro de Valencia, a la que contribuyó Salvados tras dedicarle un especial. Évole ha reconocido sentirse “muy satisfecho”, pero sólo ser responsable de “un granito de arena”: “Antes que nosotros hubo periodistas a nivel local que lucharon para publicar todo aquello que no se había publicado en su momento, y nosotros lo recogimos en el programa”.
“Sobre todo la satisfacción me llegó por la gente que pertenece a la asociación de víctimas del accidente del Metro de Valencia. Nosotros podemos hacer un programa, pero no inventárnoslo. Si ellos no hubiesen mantenido esa lucha, no hubiese habido nada”, ha concluido.
Évole se ha despedido pidiendo clases a Griso para controlar “tertulias animadas”
El programa también ha recuperado su “entrevista”, en esa misma entrega, a Juan Cotino, recalcando cómo no quiso responder a sus preguntas ni cuando los ciudadanos que les rodeaban se lo pidieron a gritos. Tras hacer una breve valoración de ese momento, Évole se ha despedido pidiendo “unas clases” a Griso, ya que ella está acostumbrada a “moderar tertulias animadas”, y él no.
“Cuando empezó el programa y salieron Artur Mas y Felipe González... Aquello era como cuando salen dos miuras, y yo no llevaba ni capote. Hice lo que pude”, se ha despedido Évole bromeando.