En la séptima gala de 'Gran Hermano VIP' la audiencia expulsó a Israel demostrando por segunda vez que apoyaban al bando de “las chirlas” (contrario al de Belén Esteban). Tras la salida de Israel del torero del cubo – sala en la que estaban ambos nominados- Ares tuvo que acatar las instrucciones del Súper para superar una nueva prueba. Debía echarse por encima sangre, barro, vómito y/o cucarachas y que se creyeran sus compañeros que había tenido una terrible experiencia en el cubo.
La reportera lo hizo así y el resto de los concursantes quedaron horrorizados. Por su parte Belén Esteban quedó totalmente desorientada por la salida de Israel y el regreso de Ares.se lo creyeron por completo.
La realidad dentro del cubo era otra: Ares había tenido que elegir entre cuatro potingues para echárselos por encima y tener una cuartada ante sus compañeros. Las cucarachas, la sangre, el barro fueron las que escogió para embadurnarse. Sin contar lo que había pasado dentro del cubo, tenía que elegir a uno de sus compañeros para entrar con ella y vivir una bonita experiencia.
Belén Esteban no estaba dispuesta a entrar en el cubo y lo dejó claro antes de comenzar a nominar: “Estoy muerta de miedo, no estoy tranquila. Me pasa eso y me pongo fatal, me pica hasta la cabeza de pensarlo. Tenía bichos vivos. No sé qué habrá dentro, pero no quiero ir. No soy valiente, soy una acojonada, no quiero eso”, dijo la concursante.
Aunque Fede y Coman se habían ofrecido voluntarios para entrar en el cubo con Ares, la concursante escogió a su amiga Aguasantas para que le acompañara en la experiencia asegurando que ellas tenían un lema: “En lo bueno y en lo malo”.
Aguasantas se puso la bata manta por encima dispuesta a acompañar a su amiga en una experiencia tan dura, pero cuando se vio ante la puerta del cubo se puso histérica y no fue capaz de entrar. Ante la situación de histeria que se estaba viviendo en la casa, Chari se ha lanzó a la piscina y decidió entrar en lugar de Aguasantas. Con mucho miedo, Chari se agarró al brazo de Ares y entró en el cubo dónde las estaba esperando una estupenda cena a base de mariscos.