El Grupo Planeta ha pisado el acelerador en su plan de desembarco en Antena 3. La actual situación de la cadena, en la que la toma de decisiones relevantes se ha paralizado a la espera de la llegada de los nuevos propietarios, es precisamente uno de los argumentos de peso que el grupo editorial catalán ha utilizado para adelantar el plazo de «entrega de llaves». Además, Telefónica tampoco está dispuesta a que su estudiada estrategia pueda tropezar con piedras en el camino que compliquen el cierre de la operación, como el problema del contrato entre Onda Cero y Blas Herrero.
El Ministerio de Ciencia y Tecnología no se hizo de rogar y ayer mismo dio su visto bueno a la compra-venta de Antena 3. Mientras tanto, hasta bien entrada la sobremesa, el bufete de Miguel Roca, que se ocupa de la representación legal de Planeta, remitía a los Servicios de Defensa de la Competencia la documentación requerida para salvar el último trámite administrativo de la venta.
Por su parte, Luis Blasco, aún presidente de Antena 3, se apresuraba a convocar un Consejo extraordinario para la mañana del próximo lunes. El vertiginoso ritmo de unos y otros no contaba con la apretada agenda de algunos consejeros, como los de RTL, para quienes era imposible presentarse en esa fecha, ni con los procedimientos de trabajo de Competencia.
Finalmente, el Consejo de Antena 3 donde José Manuel Lara será designado presidente de la cadena y Maurizio Carlotti ocupará el cargo de consejero delegado, se celebrará el próximo viernes 6 de junio o el lunes 9 a más tardar. Para entonces, Sáenz de Buruaga habrá tenido que decidir si opta por aceptar el cargo de director de Informativos o ejecuta su blindaje, cifrado en cinco millones de euros.