Presentación

“El Internado” vive su primer duelo con “Hospital Central”

“Hasta ahora, parecía que Globomedia sólo sabía producir comedias costumbristas con olor a panceta, pero con El Internado queríamos hacer algo diferente y lo hemos conseguido”, declaró ayer un orgulloso Daniel Écija, productor ejecutivo de la exitosa serie de misterio que regresa hoy a Antena 3 con la muerte de un alumno y la incorporación de tres nuevos actores -Alejandro Botto, Eduardo Espinilla y Blanca Suárez- como novedades principales.

En la presentación de esta segunda temporada, Sonia Martínez, directora de Ficción de la cadena, también se felicitó por haber cumplido el objetivo de Antena 3 en este curso, que “era apuntalar la parrilla de la emisora con series españolas”.

Luis Merlo asegura que el personaje de Héctor, el director del internado, que interpreta en la serie, le ha “aportado mucho” y cree que “la definición más extendida de esta ficción por parte de todo el mundo” es que es una serie “distinta, que no se parece a ninguna otra”.

Su compañera de reparto, Amparo Baró, que da vida a la gobernanta, confiesa que el éxito de El Internado le ha “sorprendido”. “Es la primera vez que se entrega un Ondas a una serie que sólo lleva 6 capítulos”, ha recordado la veterana actriz, que reconoce que “temblaba” en el estreno, no porque no pensase que estaba en una buena serie, sino “por el miedo lógico a lo desconocido”. “Estoy muy orgullosa de estar en esta casa” -ha dicho en relación a Antena 3- “y espero que el éxito nos siga acompañando”.

26 capítulos al año de “El Internado”

El equipo de “El internado” rueda a un ritmo de producción de 26 capítulos al año. La serie que protagonizan Luis Merlo y Amparo Baró vuelve mañana con una tanda de 8 capítulos para tomarse después un descanso y regresar en la primavera de 2008.

Écija avanzó que los guionistas “todavía no tienen un desenlace fijado” para “El internado”, ya que “el misterio sólo representa un 15% o 20% de las tramas argumentales, de manera que la serie puede tener todavía un largo recorrido”.

“El Internado” es una serie “que habla de la soledad, del amor y de los personajes perdidos”, comentó hace unas semanas el productor ejecutivo de Globomedia, Daniel Écija, durante el visionado de esta segunda temporada, que seguirá teniendo el misterio como eje principal, “aunque también tratará las emociones y las relaciones personales con varios triángulos amorosos en estos nuevos episodios”.

Según explicó el director general de Antena 3, Mikel Lejarza, el motivo por el que “El internado” se ofrece como una temporada corta y no como una tanda completa de 13 o más episodios es el “nivel excepcional de producción que requiere una serie de estas características”, explicaron Lejarza y Écija.

En este sentido, el productor ejecutivo de Globomedia comentó que el equipo de “El internado” graba a un ritmo de cinco semanas aproximadamente de rodaje por episodio.

Daniel Écija lamenta que en España tendamos a infravalorar nuestra ficción frente a la estadounidense. En su opinión, “El internado” ha marcado un hito en cuanto al nivel de producción.

“Si esta serie se llamase ‘The College’ en lugar de ‘El Internado’, y fuese la Fox la que nos estuviese enseñando un trailer, seguramente diríamos que es extraordinaria”, pero como la hacemos los españoles, pensamos que es sólo una serie más de televisión, cuando su nivel de calidad es excepcional y está a la altura de las americanas“.

Un profesor encantador y una alumna retorcida, nuevos personajes

El reparto mantiene el equilibrio entre la veteranía de actores tan reconocidos como Luis Merlo, Amparo Baró y Natalia Millán y la apuesta por nuevos valores como Martín Rivas, Marta Torné, Yon González, Ana de Armas y Elena Furiase.

Tres nuevos actores con trayectoria, pero todavía desconocidos para el gran público de televisión, se suman al reparto esta temporada. El argentino Alejandro Botto -primo de Juan Diego Botto- que encarna a un nuevo profesor; Blanca Suárez, que da vida a una alumna que irrumpe en el grupo de los adolescentes: y el niño Eduardo Espinilla, que será un nieto de Jacinta (Amparo Baró).

Alejandro Botto es Mateo, el nuevo profesor de matemáticas, un hombre cuya arrolladora personalidad esconde un pasado tormentoso.

Blanca Suárez interpreta a Julia, alumna manipuladora y problemática que entrará a formar parte del grupo de adolescentes.

La supuesta muerte de un alumno y los triángulos amorosos, en las tramas

La supuesta muerte de uno de los alumnos, cuya verdadera identidad nadie conoce, condicionará sobremanera la existencia de los más jóvenes en el internado, que serán muy conscientes del gran peligro que corren si siguen adelante con sus investigaciones.

En el plano de las relaciones personales, dos parejas, la de Héctor y María y la de Marcos y Carolina, verán peligrar su continuidad por la existencia de terceras personas.

A medida que transcurra la temporada, el pasado se hará presente y algunas de las grandes intrigas se irán desvelando, como es el caso de los motivos por los que la pareja de huérfanos formada por Marcos y su hermana Paula han terminado internos en La Laguna Negra tras la misteriosa desaparición de sus padres.

Julia, una alumna rebelde y manipuladora

Julia (Blanca Suárez) conoce muy bien los motivos por los que su madre la ha enviado a La Laguna Negra pero, no por ello, está dispuesta a cambiar su actitud altiva y caprichosa.

La férrea disciplina de El Internado no va a poder con su fuerte carácter. No le importan los riesgos que tenga que correr para hacer su voluntad.

La llegada de “la nueva” afectará de lleno a Carolina (Ana de Armas) y Victoria (Elena Furiase), acostumbradas a tener una habitación para ellas solas. Sin embargo, el dormitorio no será lo único que tenga que compartir Carol, que verá como Vicky, su amiga de toda la vida, se dejará llevar por Julia y se alejará poco a poco de su lado.

Blanca Suárez compagina sus estudios de Comunicación Audiovisual con su trabajo como actriz, tanto el cine –donde coprotagonizó el largometraje “Escalofrío”, de Isidro Ortiz- como en teatro. Durante más de 12 años ha recibido clases de interpretación -la mayoría en la escuela de Artes Escénicas Tritón-, una formación que ha complementado con varios cursos de Expresión Corporal y formación en baile clásico y Funky Jazz.

Mateo, un profesor con mucho encanto

Mateo (Alejandro Botto) es el nuevo profesor de matemáticas de La Laguna Negra. Un hombre dinámico y positivo dispuesto a transmitir su entusiasmo a todos los que les rodean.

Alejandro Botto (Argentina) comenzó su formación como actor en 1993, en las academias de Agustin Arezzo y Lizardo Laphitz. Más tarde entraría en la escuela de Cristina Rota y en la de Susana Yassan. En el 2000 siguió con su formación en Nueva York, en el HB Studio. Su experiencia profesional abarca desde el teatro –“Despertares y celebraciones”, “Macbeth”, “La catarsis del tomatazo”- hasta el cine –“Desierto Sur”, “Los abajo firmantes”- y la televisión “Verano del 98”