La casa del Gran Hermano estadounidense ha acogido en los últimos días notorias polémicas por los comentarios inapropiados realizados por varios de sus concursantes. No obstante, la situación parece haber llegado al límite con el último episodio vivido en el reality de CBS, que atraviesa ya su 15ª edición.
El Departamento de Policía de Conway (Arkansas) ha iniciado una investigación contra Spencer Clawson, después de que este supuestamente bromeara en el programa sobre pornografía infantil, según recoge TV Guide.
Aunque parece evidente que el concursante realizaba estas declaraciones a modo de chanza de dudoso gusto, el tema ha sido lo suficientemente serio como para que se las fuerzas de la ley hayan decidido cortarlo de raíz.
La policía: “No hemos encontrado por ahora ningún indicio de conducta criminal”
Durante una conversación con McRae, Clawson cogió el micrófono del citado compañero (no lo llevaba puesto en ese momento) e imitando su voz comenzó a decir lo siguiente: “Me gusta masturbarme con pornografía infantil. Me encanta que sean de 3 o 4 años. Mis (vídeos) favoritos son aquellos en los que se ve que están en un sótano”, anunció.
Las palabras de Clawson fueron suficiente justificación para la policía para abrir diligencias. “Debido a la naturaleza de los comentarios, nuestro departamento ha actuado rápido para revisar en este asunto”, publicaron en un comunicado emitido a TMZ. “Hasta el momento, no hemos encontrando ningún indicio de conducta criminal”.
La empresa donde trabaja se desmarca y toma acciones contra su empleado
Por su parte, Union Pacific, la compañía para la que trabaja, ha querido desmarcarse de las palabras de su empleado: “Debido al volumen de correspondencia recibida sobre los comentarios de Spencer Clawson del 5 de agosto”, explican, “queremos reiterar que se han tomado todas las acciones que nos permite el convenio colectivo hasta que que el señor Clawson sea expulsado del concurso”.
Spencer Clawson también realizó insultos homófobos y racistas junto a otros compañeros
No es la única actitud inapropiada que ha emprendido el citado concursante durante su estancia en el programa. Clawson, revisor de ferrocarril de profesión, fue uno de los siete participantes en el concurso que profirió insultos homófobos y racistas hacia el resto de sus compañeros a comienzos de julio. GinaMarie Zimmerman y Aaryn Gries, dos de las implicadas en este altercado, fueron despedidas de sus respectivos trabajos, como ya recogimos.
Críticas de exconcursantes a CBS por suavizar los hechos en sus resúmenes
Las críticas por los comportamientos mostrados en esta edición está colocando a CBS en la picota. La indignación ha crecido debido no solo a los hechos acaecidos entre las paredes de la casa (especialmente por las declaraciones ofensivas producidas desde el comienzo del reality, a finales de junio), sino también a la “permisividad” de los productores, que han procurado evitar mostrar en sus resúmenes las imágenes y contenidos más desagradables, suavizando así la imagen que los espectadores reciben de sus huéspedes, según recoge Reality Blurred.
Ragan Fox, quien participara en la duodécima edición, escribió una carta abierta a los productores de Big Brother: “¿Qué sentido tiene elegir concursantes de minorías raciales, étnicas y raciales si en producción se va a editar toda muestra de racismo, discriminación y homofobia que estas personas se encuentran dentro de la casa? Si realmente queréis dar un giro sorprendente, enseñad a los espectadores de CBS a esa gente blanca y heterosexual hablar de gays, asiáticos y afroamericanos”.