Alfonso XIII productor, 'los Almodóvar' de la época...

Irreverente y didáctico reportaje sobre el origen del cine X, en La 1

Paco Gisbert, jefe de redacción de la revista Primera Línea, analizó para 'La España de Víctor Ros' los orígenes y precursores de la pornografía y el cine erótico en nuestro país, con sorprendentes datos para muchos desconocidos.

Por ejemplo, explicó que “Alfonso XIII no solo era aficionado a la pornografía, sino que además era productor. Encargaba por medio del Conde de Romanones sus propias películas para disfrute y uso propio”.

Alfonso XIII fue uno de los primeros 'productores' de cine porno en España

Estas películas, que aparecieron hace años en un monasterio de Valencia, se las encargaba a los hermanos Baños, los primeros 'directores' de cine porno de nuestro país. El monarca “sugería incluso los argumentos y les daba el dinero”. Las 'actrices' que usaban para ello eran todas prostitutas.

Gisbert analizó luego películas porno de estos hermanos como 'El Ministro', una feroz crítica a la clase política de la época en la que una mujer de un funcionario recientemente despedido acude al ministro para pedir la readmisión de su esposo. El ministro, a cambio, le pide favores sexuales.

En 'Consultorio de señoras', los hermanos Baños representan una consulta del médico a la que acuden una madre y su hija. Gisbert explica que el doctor “le hace un reconocimiento completo, en el cual se aprovecha de ella”.

La que Gisbert define como “la más transgesora de la época” es 'El confesor'. En ella, un sacerdote escucha las confesiones carnales de una beata que acude a su iglesia y después se aprovecha de su promiscuidad a cambio de su “penitencia” en forma de Aves Marías y Padres Nuestros.

“Los hermanos Baños serían como los Almodóvar hoy en día”

Gisbert también puso en relevancia a los autores de estas películas, los Hermanos Baños: “Eran reputados realizadores, serían como los hermanos Almodóvar ahora. Alfonso XII encarga estas películas a unos especialistas. Y estos señores, que habían filmado un montón de películas con cierto éxito en las salas, se dedican a hacer películas pornográficas. Evidentemente no están firmadas, pero son suyas”.

Para ver las películas, Alfonso XIII llegó a habilitar una sala de proyecciones en el Palacio Real, a la que invitaba a amigos y nobles para verlas.

“No se distinguía entre erotismo y pornografía porque todo era sucio”

Gisbert hizo luego un breve repaso por los orígenes de la pornografía, en la fotografía. Fotógrafos profesionales contrataban prostituas, las desnudaban y las fotografiaban. Explicó que no había distinción entre erotismo y pornografía porque, para la época, “todo era sucio”. Las imágenes se transformaban en pequeñas postales, a la venta luego en prostíbulos y bares.

El cubismo de Picasso, influenciado por estas fotografías eróticas

La fotografía erótica llegó incluso a influir en el arte cubista de Pablo Picasso. Gisbert explica que el artista compró una imagen pornográfica y vio unas formas que le inspiraron posteriormente para el famoso cuadro 'Las señoritas de Aviñón', explicando además que no se refería a Francia, sino a un prostíbulo en la calle Aviñón que había en Barcelona.

El fin de la clandestinidad tras la muerte de Franco fue definitiva para el impulso de la pornografía en España. El experto explica que hasta 1975 las películas solo se movían en círculos muy pequeños de coleccionistas, y que ahora su acceso es mucho más fácil con Internet y la falta de censura.

En cualquier caso, recuerda que los artistas que servían a la Corona y a la vez hacían fotografías o cuadros eróticos o transgresores eran algo habitual, valiéndose del ejemplo de Goya. Gisbert también cuenta que en aquella época “se miraba a otro lado” con la pornografía, y que realmente no estaba prohibida más que por el poder de la Iglesia, que la consideraba pecado.

*Puede ver el documental completo AQUÍ