Tres años después de su último trabajo en Los Serrano, Lydia Bosch regresa esta noche a la televisión con Águila Roja, la exitosa serie que La 1 emite a las 22:15 horas.
La actriz interpretará durante los próximos dos capítulos a la Madre Isabel, una monja con un oscuro pasado y secretos inconfesables, muy diferente a los papeles “blancos y sin dobleces” a los que Bosch nos tenía acostumbrados.
“Muchos se van a sorprender tras verme en esta nueva faceta”, confiesa la actriz a Vertele.com, que desea que esta aparición en Águila Roja sea solo el comienzo de su regreso definitivo al trabajo después de unos años alejada de las cámaras. “Tengo un proyecto en cine y otro para una serie de televisión que espero que se hagan realidad”, nos adelanta.
Su último trabajo en televisión fue en 2008 en “Los Serrano”. Ahora vuelve de la mano de la serie más vista, ¿cómo se ha gestado este regreso?
Daniel Écija me llamó para colaborar en la serie y me hizo mucha ilusión porque Águila Roja tiene muchísimo éxito y porque el personaje me pareció muy atractivo. Yo pensaba que me tendría que vestir con esos trajes tan femeninos que lucen las mujeres en la serie, cuando, de repente, me dijo que iba a interpretar a una monja. Y me encantó. (risas).
¿Por qué dice que le gustó el personaje?
No tiene nada que ver con lo que he hecho hasta ahora y eso es una suerte, porque me va a permitir demostrar al público que puedo interpretar otro tipo de personajes. Y no solo al público, también a los productores y demás profesionales del medio que están acostumbrados a verme solo de una forma. Espero que mi paso por Águila Roja sirva de escaparate y que dé sus frutos.
Por estas palabras se deduce que tiene muchas ganas de volver definitivamente a trabajar tras una época alejada de los focos…
Sí, quiero volver, en mayúsculas (risas). La vida, por unas u otras razones, te hace tomar una serie de decisiones y ahora tengo muchas ganas de trabajar. Además, ya tengo varios proyectos que espero salgan adelante porque me apetece mucho: una serie y una película.
¿Puede darnos más detalles de esa serie?, ¿sería con Globomedia?
No puedo adelantar nada. Ésta, en concreto, no sería con Globomedia, pero ojalá pueda volver a trabajar en esta productora.
Ha dicho que le ilusionaba especialmente volver con una serie como “Águila Roja”, ¿aceptó rápidamente el papel?
He trabajado con Globomedia muchas veces y Dani Écija es un gran amigo que nunca me ofrecería algo que no me pueda aportar o que no pueda hacer. Si él me dice que salte, yo salto. Es un productor que me cuida. Además, en Águila Roja he trabajado con muchos actores que ya conocía, como Francis Lorenzo, Pepa Aniorte o José Ángel Egido.
¿Ha sido su reencuentro profesional con Francis Lorenzo tras “Médico de familia”?
Sí, aunque yo con Francis me llevo fenomenal y es un gran amigo. Es divertidísimo y crea muy buen ambiente en los rodajes. Eso es fundamental para trabajar feliz.
En “Águila” interpreta a una monja con un pasado oscuro y secretos inconfesables, ¿cómo es la Madre Isabel?
Es muy complicado hablar de mi personaje sin desvelar nada. Yo normalmente he hecho papeles sin dobleces, bondadosos, y Madre Isabel no es precisamente una persona sin dobleces. Cuando el público descubra de dónde viene y qué relación tiene con cierto personaje de la serie, posiblemente entiendan por qué actúa de esa manera.
El hecho de que haga un personaje diferente a lo que estamos acostumbrados, ¿ha sido una dificultad para usted o una motivación especial?
Cambiar de rol siempre es divertido, te da la posibilidad de demostrar otra faceta y trabajar desde otro punto de vista. El público sí que se va a sorprender de verme así. Espero haber dado credibilidad a este personaje que me ha tocado interpretar.
¿Le siguen hablando a día de hoy de “Motivos Personales”?
¡Es impresionante! La gente sigue parándome y preguntándome por la tercera temporada, que nunca se llegó a grabar, aunque sí estaba prevista.
Incluso escrita, ¿no es así?
Sí. El guión está hecho, pero no se llegó a grabar. Además, en esa tercera temporada ocurría algo potentísimo para lo que yo me llegué a preparar físicamente. Sería muy complicado volver a reunir a todo el reparto, pero si volviera, triunfaría, sin duda.
Quizás debido a papeles tan recordados como el de Natalia Nadal ha conseguido no caer en el olvido durante estos años que ha estado sin trabajar, ¿tiene esa sensación?
Me siento muy afortunada del cariño que me da la gente. Es la parte buena de la fama, aunque habrá a quienes no les guste, por supuesto. Ahora parece que estoy cogiendo el Ave y ¡en primera! A ver si tengo suerte. Yo creo que sí, que todo va a salir bien.
¿Estaría dispuesta a volver a presentar un programa?
No me importaría. Es verdad que los proyectos más inmediatos son de ficción. Ahí me siento como pez en el agua, más realizada, pero no tengo ningún problema en conducir un programa.
¿Cree que ha cambiado mucho la televisión desde que usted presentaba?
Muchísimo. Yo ahora casi solo veo canales infantiles, por mis hijos. Las series españolas han logrado estar ya en primera división, no se rechazan como antes. En cuanto a los programas, se da mucha importancia a un tipo de contenido que a mí no me gusta, pero hay que recordar que ahí está el mando para que cada uno vea lo que quiera.
¿Qué suele ver en televisión además de los espacios infantiles a los que se refería?
He seguido habitualmente Águila Roja y otras series como Gran Reserva o Los misterios de Laura.