Rodolfo Martín Villa será finalmente quien ocupe la presidencia de la llamada “Platajunta” digital, resultado de la fusión entre Canal Satélite Digital y Vía Digital. Su nombramiento, que se daba por seguro desde el pasado mes octubre (ver elconfidencial.com del 2-X-2002), quedó, sin embargo, puesto en entredicho después de que el pasado 10 de enero el Consejo de Ministros lo nombrara comisionado del Gobierno, con rango de secretario de Estado, para atender la catástrofe del Prestige. Aunque el consejo de administración de la nueva Sogecable quedará constituido a mediados de mayo, el nombramiento de presidente se retrasará hasta septiembre, para dar tiempo suficiente a que Martín Villa finalice sus actuales responsabilidades como coordinador de las iniciativas del Gobierno y de las Comunidades Autónomas en torno al desastre ecológico. El consejo de la nueva sociedad estará constituido por 21 miembros, repartidos entre Prisa (5), Vivendi (5), Telefónica (5), Caja Madrid (1), El Corte Inglés (1), Bankinter (1) e independientes (3). Las compañías fusionadas negocian en estos momentos el organigrama de la futura empresa, cuyos poderes ejecutivos estarán en manos de Javier Díez Polanco como consejero delegado. De acuerdo con fuentes cercanas al grupo Prisa, Díez Polanco se está resistiendo a las presiones ejercidas por Telefónica en orden a colocar a hombres de la cuerda de Vía Digital en el equipo directivo. En contra de lo establecido en los acuerdos de fusión, Diez Polanco ha rechazado la negociación del nuevo organigrama “porque quiero trabajar con la gente de mi confianza”. La ausencia, por tanto, de directivos procedentes del grupo Telefónica, está generando ya fuertes tensiones entre los ejecutivos de Vía Digital, que desde hace semanas carecen de funciones que desempeñar ya que el anuncio de la fusión ha paralizado en esta compañía todas las actividades.
De acuerdo con las fuentes consultadas por este diario, el proceso de integración de ambas empresas dará comienzo el próximo junio, lo que significará la puesta en marcha de un fuerte programa de saneamiento y ajuste que inevitablemente llevará consigo importantes recortes de plantilla que afectarán, sobre todo, a los trabajadores de Vía, aunque en Canal Satélite, con sueldos más altos, no las tienen todas consigo.
Al optar por Martín Villa el pasado otoño como eventual presidente de la futura Platajunta, Polanco y Alierta pretendieron dirigir un guiño al Gobierno para que las autoridades de la competencia autorizaran la fusión, teniendo en cuenta que era el candidato de Moncloa. Las preferencias de Polanco, con todo, se inclinaban por situar al frente del nuevo monopolio de la televisión por satélite a otro ex ministro, Eduardo Serra, titular de Defensa con el PP, alto cargo con el PSOE y actual presidente del Patronato del Museo del Prado y del banco de inversión SG Warburg España. Serra, que lleva a gala sus estrechas relaciones con el Rey Juan Carlos, había sido seducido por la propuesta de Prisa y se consideraba a sí mismo el hombre idóneo para el cargo. Martín Villa, de nuevo en comisión de servicio -como tantas veces- por culpa de la crisis del Prestige, recibe así una recompensa a los muchos servicios prestados en un puesto no ejecutivo y de alta remuneración que, además de procurarle una magnífica jubilación, le permitirá seguir estando en la “pomada”. Artículo publicado el 10/03/03 en elconfidencial.com