El vicepresidente de la Asociación Multisectorial de empresas de Electrónica y Comunicaciones (Asimelec), Jesús Casado señaló durante la celebración del II Congreso de TDT, organizado por la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información, que “hay preocupación entre los fabricantes por la situación de la TDT”, que necesita objetivos claros y que la fecha del 2010 para el apagón tecnológico no se toque. “El apagón analógico es necesario y posible”, informa Efe.
Casado recordó que ya existe un Plan de Transición a la TDT, que contempla 20 programas en 32 zonas donde se irán implantando gradualmente hasta llegar al 2010 y que la cobertura actual es ya del 85%. Entre lo que “falta por hacer” destaca la interactividad y dijo que hay zonas de España y radiodifusores que no están tomando medidas para que la señal llegue con la suficiente calidad y resolución de imagen.
“El MPH (usos interactivos) implica algo más que un producto en el mercado” y pidió una “única versión del MPH para todos y dirimir quién lo paga. No podemos instalar el MHP en los descodificadores si no sabemos el modelo”. También consideró necesario que haya mediciones de audiencia fiables y que se autorice el pago por visión, además de la creación de un Consejo Audiovisual.
El vicepresidente de Asimelec señaló que de los más de cinco millones de televisiones planas que se han vendido, más de dos millones incluyen la TDT y las restantes no. Andrés Armas, director general de Impulsa TDT, dijo que entre las barreras que se encuentra la implantación de la TDT son los costes de adquisición de la nueva tecnología, el hecho de que necesite un mando a distancia adicional, “problemas en la calidad de la señal y falta de contenidos diferenciados”.
Armas dijo que de los siete millones de hogares que tienen acceso ya a la TDT se convertirán en ocho millones a finales de este año, aunque subrayó que “algunas comunidades autónomas no han adaptado sus sistemas todavía”. Miguel Ángel García, gerente de Fenitel (empresas de antenistas), pidió que se respete la fecha del apagón, que se completen los plazos de cobertura y que no se cambien las condiciones de emisión en las zonas ya cubiertas.
“Los usuarios no son conscientes del concepto de apagón -dijo- que provoca falta de demanda y se ralentiza la adaptación de instalaciones, porque el usuario todavía ve la fecha lejos”, y consideró necesario desarrollar productos de valor añadido, como el pago por visión y los servicios interactivos.