Suenan campanas de boda para Patricia Conde. Eso es, al menos, lo que asegura esta semana la revista ¡QMD!. Según esta publicación, la presentadora de Sé lo que hicisteis podría estar planeando su boda con el rico empresario mallorquín Carlos Seguí, con el que vive un romance desde este pasado verano.
Parece que la relación va viento en popa y que Patricia no está dispuesta a dejar pasar más tiempo y que tiene claro, según fuentes consultadas, “quiere formalizar su relación cuanto antes”. Según esta revista, la presentadora de 31 años tiene clarísimo que “su chico tiene todo lo que busca en un hombre”.
De hecho, la revista publica unas imágenes en las que se puede ver cómo Patricia besa a su chico, en el aeropuerto de Barajas, nada más llegar de Palma de Mallorca para pasar unos días con la presentadora.
Ella no soportaría las relaciones a distancia
Otro de los motivos que le podrían haber empujado a tomar esta decisión es que, según QMD!, la joven, que tiene la misma edad que su nuevo novio, es ‘muy posesiva’ y no soporta las relaciones a distancia.
Además, la actriz y compañera de Ángel Martín al frente de programa de laSexta es de relaciones largas. Estuvo mucho tiempo con el tenista Carlos Moyá y también con el cantante Dani Martín. Sólo ha tenido relaciones fugaces con Alfonso de Borbón y Jordi y Miguel Torres tras su ruptura con el líder de ‘El canto del loco’.
Seguí pertenece a una de las familias más conocidas de Mallorca
Sea como sea, y para quienes no conozcan al que podría convertirse en el marido de Patricia Conde, se trata de un atractivo empresario que guarda parecido con David Beckham. Pertenece a una de las familias más conocidas de la isla en la que se ha fraguado su historia de amor este verano. Carlos dirige varios negocios familiares, entre ellos la discoteca Harlem, de Portitxol.
Aunque sólo llevan tres meses juntos, la pareja se conoce desde hace algunos años. Dicen que ya, en 2003, cuando Patricia acababa de romper con Carlos Moyá, vivió un apasionado romance con el joven que podría convertirse muy pronto en su marido.