¿Qué le llama la atención de su nuevo programa, “Engaño”? La habilidad que tienen los concursantes para diseñar estrategias y crear situaciones muy al límite, porque no olvidemos que sus parejas lo están viendo todo. Es como un mini “Gran Hermano” donde ellos conviven encerrados 4 días y 3 noches. No hay que seducir, hay que engañar y ser muy sutil. ¿Cuáles son esos momentos límite del programa? Cuando las chicas se reúnen con sus novios y estos les dicen como están viendo su actuación. Es curioso ver cómo algunos de ellos las animan a que sean más lanzadas y sean más sensuales para que el concursante piense que son solteras. Entonces, ellas se animan, se lanzan, ellos lo están viendo todo y, al final, aunque se trate de un juego, se empiezan a preocupar y descomponer un poco... Es muy bueno. Al tratarse un formato inédito en nuestro país, ¿cómo cree que lo recibirá el público? No lo sé, pero has dado en la clave de por qué he aceptado presentarlo, y es que nunca se ha hecho en España. Me apetece mucho hacer cosas que no hayamos visto aquí. No sé si será un éxito porque esto es un como un melón, hasta que no lo abres... ¿Por qué decidió dejar “TNT”? Telecinco me propuso este nuevo programa y yo preferí dejar “TNT”, un espacio consolidado que lidera su franja, por un riesgo como es éste, ya que esto me hace sentir vivo. “TNT” lo empecé en 2004, lo he llevado donde está y ya tiene su identidad en la parrilla... ¡Pues venga, a hacer otra cosa! No contempla, por tanto, un posible regreso... Para nada, ahora sólo veo “TNT” como espectador. Hay gente que no entiende esta decisión y me preguntan cómo se me ocurre dejar un programa que funciona con lo difícil que es hoy en día la televisión. Y yo contesto que, simplemente, porque `Engaño´ es nuevo. ¿Y qué le parece su sustituta en “TNT”, Yolanda Flores? Excelente. Me parece una decisión muy acertada por parte de Telecinco. Lo que más destacaría de ella es su rigor. También presentará “El debate” de “Esta cocina es una infierno”, ¿por decisión propia? Sí. Llevo cuatro debates de reality y la verdad es que me lo paso tan bien haciendo este tipo de programas, que fui yo quién pidió a la cadena que me dejara presentarlo. ¿Por qué cree que los reality shows, pese a su gran audiencia, no cuentan con el beneplácito de la crítica? No lo sé, pero me da tanta pereza hablar de esto... Hay cierto sector de la prensa que debería empezar a darse cuenta de lo que a la gente le gusta. Además, hay una cosa que me gustaría decir, y es que no pienso pedir perdón por hacer televisión. No es ningún delito hacer televisión de entretenimiento, si quieres la ves y si no quieres, no la ves, o la ves diez minutos y cambias de cadena, no pasa nada. Hay gente que le da vergüenza decir que ve “Gran Hermano”... ¡Por favor, que no les dé! ¿Sería usted un buen concursante de “Engaño”? Creo que no sería buen concursante de nada... Bueno, sólo de “Pasapalabra”. La verdad es que nunca me metería en un reality show porque soy muy tímido. Además, yo, como todos los hombres, soy muy mal mentiroso, las mujeres mienten infinitamente mejor porque tienen una mente más compleja. Una mujer es capaz de mantener una mentira 35 años mientras que un hombre, media hora. Después de trabajar durante estos últimos años en Telecinco de manera tan prolífica, ¿se ve algún día en otra cadena? No quiero trabajar en otras cadenas, quiero trabajar aquí. La verdad es que no tengo que hacer la pelota a nadie pero es que esta gente es muy buena trabajando, me lo ponen todo muy fácil. Estoy muy a gusto porque aquí la libertad es absoluta. De todos los formatos que ha presentado a lo largo de su carrera, que no son pocos, ¿cuál le gustaría volver a presentar? “Moros y cristianos”, sin duda. Me encantaría volver a hacerlo, aunque con otro título más políticamente correcto. Ya he propuesto a Telecinco volver a ponerme al frente de un debate popular. Me apetece muchísimo y creo que hay hueco para eso. Por último, ¿le gusta la nueva cadena Cuatro? No, y que hagan el favor de pintar el mar azul (entre risas). Esa cadena no puede funcionar si en la Información del Tiempo pintan el mar de rojo, hay códigos que en televisión hay que respetar. No me convence mucho pero acaban de nacer, seguro que irán mejorando. Además, como dijo un sabio de la televisión que es Maurizio Carlotti de Antena 3, no nacen bebés de 30 kilos ni cadenas con un 15% de share.