Rafa Méndez se ha convertido en uno de los rostros más populares de la televisión gracias a su participación en “Fama ¡a bailar!”, el reality que Cuatro emite cada tarde a las 15:30 horas.
Bailarín y presentador -en Italia ha trabajado junto a Raffaella Carrà-, Méndez es posiblemente el profesor más carismático de la escuela de baile y ha hecho populares entre la audiencia sus particulares gritos de guerra “amazing” y “energy”. Vertele.com ha hablado con él.
¿Cómo está viviendo el éxito de “Fama”?
Estaba muy nervioso antes de empezar. Tenía miedo de que el programa no fuera a funcionar y resulta que ha sido todo un éxito.
¿Por qué pensaba que no iba a cuajar?
Porque en Italia y en otros sitios donde se hace este concurso no se saca la parte de reality y aquí si. Tenía miedo de que el baile no le gustara a la gente y que hubiera que tirar demasiado de la telerrealidad.
¿Cree que el programa va a ayudar a que se valore más a los bailarines?
Nos va a ayudar mucho para que se reconozca más el trabajo de los que nos dedicamos a esto, claro. En España, la moda del baile en televisión comenzó en los noventa con Telecinco y luego no continuó. Ahora, todo el mundo está revolucionado con “Fama”. Hay hasta publicidad con bailarines…
¿Pensaba que usted iba a tener tanto tirón entre el público?
El otro día me dio por salir a la calle y el impacto fue increíble. Anhelaba el hecho de ser reconocido en mi país después de tanto tiempo fuera. Cuando vi como me recibió la gente, tuve que entrar en un bar para encerrarme en el baño y poder llorar.
¿Qué es lo que le dicen cuando le ven?
La gente me grita “energy”, “amazing”… (risas). Mi familia y mis amigos están muy contentos con que me esté pasando todo esto.
¿No le agobia demasiado la fama que está teniendo últimamente?
Vengo de Italia donde se me cayó un programa y me di cuenta de que la televisión es una mierda. Me vi en la calle sin hacer nada de repente, así que ahora estoy encantado en un programa con tanto éxito, no me agobia nada. La popularidad me da igual, es efímera. Ahora hay que aprovechar el momento.
¿Es necesario gritar tanto a los concursantes?
Sí, no me queda más remedio que gritarles para que aprendan y gritaré hasta el último momento.
¿Cree que hay que ser duro para que los alumnos aprendan?
Hay profesores muy malos en la realidad. Soy de los que creen que si una persona no sirve, no sirve. En ese caso, hay que decirle que se dedique a otra cosa.
¿Todos los participantes tienen un nivel adecuado para estar en la escuela?
Evidentemente, ha entrado gente que no me gustaba.
¿Tiene algún concursante preferido?
Tengo favoritos, claro, pero no quiero crear favoritismos. Hay un chico que para mí es el ganador y lo supe en cuanto entró por la puerta, sin verle bailar.
¿El talento se ve rápido, entonces?
Sí, creo que no hace falta mucho tiempo para darte cuenta de quién lo tiene. Hay gente que ha entrado y que desde el primer día sabía que no iban a valer.
¿Qué opina de Marcos, uno de los concursantes más peculiares?
Marcos tiene un talento espectacular. Fue la única persona con la que nos pusimos de pie de verdad. Puede resultar ‘freaky’, pero tiene el mismo derecho que todos. Le auguro un gran futuro, lo que pasa es que es un chico muy familiar, muy arropado y le falta contacto con el mundo. Tiene que tirarse a la calle, aún está un poco verde.
EL TEST DE VERTELE
Un programa o serie de televisión que le guste:
No soporto “Gran Hermano”, me encanta “Aída” y muchas de las cosas que hace Cuatro, y no porque sea la cadena en la que trabajo, sino porque hacen cosas geniales y apuestan por programas con talento. Sigo, “Cuenta atrás”, “Las mañanas de Cuatro”…
¿No le gustan mucho los programas de telerrealidad?
Me gustan los realities con sentido, pero no “Gran Hermano”, porque estoy harto de que trabaje en televisión la gente que no tiene talento.
Un programa o serie de televisión que no le guste:
No soportaba el “Tomate”.
Un trabajo de televisión del que se sienta orgulloso:
“Fama ¡a bailar!”.
Un programa de la infancia del que guarde buenos recuerdos:
“Barrio Sésamo” y “Un dos tres”
Una manía o superstición que tenga antes de ponerse delante de una cámara:
Antes era muy maniático porque era una persona muy insegura. Tocaba cosas de forma de manera compulsiva…
Un famoso/a de televisión al que admire:
Boris Izaguirre, porque ha hecho historia. Sardá me gusta y Mercedes Milá me parece total. Paula Vázquez también es genial porque se integra mucho en el programa.
Un directivo de televisión al que admire:
Me gusta mucho la gente de Cuatro, están haciendo unos programas muy interesantes y a mí me han tratado muy bien.