5 razones por las que no ha funcionado el regreso de 'Hable con ellas'
'Hable con ellas' volvió ayer a Telecinco por tercera vez. El programa en el que todo puede suceder, y que aparece y desaparece de parrilla como comodín de la cadena, regresó - por primera vez en prime time- marcando un frío 11.1% y 1.196.000.
En otras etapas, el programa también arrancó discreto y poco a poco se fue asentando entre su público. ¿También conseguirá enamorar paulatinamente a más espectadores este verano?, ¿o es un formato de late night?, ¿le pasó factura el ser grabado?, ¿o fueron los nuevos fichajes los que no han calado en la audiencia?
Desde Vertele lanzamos cinco suposiciones que podrían responder a los bajos resultados que ha obtenido en su regreso:
1. Tema principal, ¿muy de actualidad pero minoritario para el público de Telecinco?
El formato cambiaba por primera vez de director, pasando de David Valldeperas a un tal “Charlie” como le llamaban las presentadoras.
Para el regreso del programa escogieron que dos de las presentadoras, Rocío Carrasco y Alba Carrillo, fueran las invitadas estrella. Ambas hablaron de la etapa por la que están pasando, una a punto de casarse y la otra divorciándose. Dos temas de actualidad, tratados en el universo Mediaset pero quizá no interesaron al resto de público que podía conectar con el programa.
A Lara Álvarez, en cambio, la “guardaron” para el final y su presencia hablando de 'Supervivientes' hubiera atrapado a los espectadores acostumbrados a 'El Debate' a esas horas abarcando un mayor número de espectadores al hablar, no solo de ella, sino también de los concursantes.
2. ¿Presentadoras muy parecidas y “muy buenas”?
La misma Sandra Barneda, nos confesaba, que echaba de menos un perfil más gamberro entre las cinco presentadoras. Ella junto a Mónica Martínez, Rocío Carrasco, Alba Carrillo y Soledad Léon eran demasiado “buenas”.
Varios espectadores opinaron en la misma línea que Barneda en las redes, echando de menos a Marta Torné o Yolanda Ramos que ejercían de contrapunto en las entrevistas, 'pinchand' con gracia a los invitados y sorprendiendo al público con su espontaneidad.
3. ¿Falta de ritmo y la magia del directo?
El programa arrancó con una entrevista a Rocío Carrasco a la que le faltó ritmo, preguntas incisivas y respuestas jugosas. La hija de Rocío Jurado no se mojó en sus palabras y 'ellas' evitaron temas peliagudos como el de su hija.
Un error para el público de Telecinco al que tienen acostumbrado a 'Sálvame' y 'Deluxe' con periodistas y colaboradores que no se muerden la lengua y para los que no hay tabúes.
La entrevista a Alba Carrillo tuvo mucho más ritmo, con vídeos, lágrimas, preguntas seguidas y respuestas completas. La nueva presentadora se abrió con el resto para contar con detalle por todo lo que está pasando. Algo que, de haberse emitido al principio - antes que la de Rocío- podría haber retenido a los espectadores que se asomaron.
Otra de las quejas más repetidas en las redes fue la de ser un programa grabado. Si algo tenían las anteriores etapas de 'Hable con ellas' era la magia del directo en el que “todo puede pasar”: desde un Jose Luis Moreno escapando de plató, a una Martar Torné lanzándose al público... una capacidad de sorpresa que ayer se esfumó al ser una grabación que detectaron rápidamente los seguidores.
4. ¿Falta de personajes masculinos?
'Hable con ellas' reivindica ser un programa de mujeres pero no solo para ellas. Y así lo demostraron en el pasado con Ion Aramendi en las redes sociales, o invitados masculinos como Moreno o Bertín Osborne que jugaron (cada uno a su manera) con las chicas.
El personaje masculino entre tanta mujer pone el contrapunto, de la misma forma que 'El Chiringuito de Mega' también apuesta por caras femeninas. Pero en este primer programa faltó esa figura masculina que le diera un aire más mayoritario, menos perfil Divnity que invitara a los hombres a sentirse identificados.
5. ¿El verano es para el cine?
La audiencia en verano busca ficción. Algo que empiece y acabe el mismo día sin necesidad de una continuidad a la que no podrán ser fieles por los hábitos estivales y las vacaciones.
Por ello, quizá a los programas de entretenimiento les cuesta aún más asentarse en prime time y luchar contra películas que no requieren estar al día, como un formato que trata temas de actualidad.