Un reportero y un cámara de Telecinco fueron ayer agredidos en Écija durante los incidentes que se produjeron poco después del incendio que acabó con la vida de seis miembros de una misma familia.
“Varias personas se acercaron a nosotros y, sin mediar palabra, nos propinaron un guantazo”, relató el periodista de Informativos Telecinco desplazado a la localidad sevillana durante el espacio que presenta José Ribagorda en prime time.
Asimismo, el brote violento de los vecinos tuvo como objetivo al cuerpo de bomberos de Écija, cuyo vehículo fue golpeado y apedreado poco después de las 12:15 horas. Un grupo de medio centenar de personas mostraba así su indignación por la tardanza con la que, supuestamente, actuaron los bomberos.
Tragedia familiar por un incendio
Seis personas murieron en la noche del sábado en Écija en el incendio de su vivienda. Los fallecidos son un matrimonio, sus tres hijos y el novio de una de las hijas. Todos dormían en la parte de arriba de una casa de dos plantas. El fuego pudo iniciarse en la planta baja por un brasero o un calefactor.
Los cuerpos, calcinados, fueron trasladados al Instituto Anatómico Forense de Sevilla para su identificación con muestras de ADN. Ayer, mientras la policía científica hacía su trabajo en el lugar de los hechos y eran evacuados los cadáveres, unos mil vecinos del barrio se concentraron frente a la vivienda.
Muchos insultaron a los bomberos, a los que acusaban de haber llegado tarde y haberse demorado en actuar. Al final, un numeroso grupo de vecinos apedrearon el camión de los bomberos cuando se marchaba.
Los vecinos rompieron las lunas del camión, que al dar marcha atrás golpeó contra varios vehículos que estaban estacionados. Algunos lanzaron botellazos e incluso un hombre llegó a golpear una de las lunas con su propia cabeza.
El ayuntamiento de Écija, por su parte, aseguró en un comunicado y posterior rueda de prensa que los bomberos llegaron en tres minutos y actuaron con diligencia.