Rosa Regás se ha sumado hoy a la crítica de Soledad Murillo hacia el programa “Caiga Quien Caiga” por el tratamiento informativo que el programa de Telecinco realizó el pasado viernes en un reportaje sobre los actos conmemorativos del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, que se celebró el 8 de marzo. La directora de la Biblioteca Nacional ha invitado a no ver el nuevo “CQC” porque “no vale la pena” y porque ha ofendido “a las mujeres trabajadoras y a los hombres decentes” con la imagen que ofreció de la mujer el pasado 4 de marzo, informa la agencia EFE. Regás hizo estas declaraciones durante la presentación del libro 'Rebeldes, ni putas ni sumisas', de la periodista y escritora Gemma Lienas. Regás opina que el reportero de 'Caiga quien caiga' se mofó de la actitud pasiva que tenían las azafatas del congreso mientras se celebraba uno de los actos, en el que, lógicamente, “permanecían quietas a la espera de que acabase”. A continuación, según cuenta Regás,se acercaron a unos obreros que hacían diferentes arreglos en el jardín de la Biblioteca para mostrar “lo bien que trabajaban ellos y lo mal que lo hacían las mujeres” y dejaron que uno de ellos elogiara “el culo” de una de las azafatas y afirmara que ya le gustaría tener uno como ese en su váter. “Yo pido que no veamos este programa, primero porque no vale la pena, no tiene nada que ver con el de El Gran Wyoming, que era mucho más inteligente, gracioso, divertido y espontáneo, pero también porque nos ha ofendido no sólo a las mujeres de la Biblioteca Nacional, que somos más de 450 las que trabajamos aquí, sino a todas las mujeres trabajadoras y a todos los hombres decentes”. La directora de la Biblioteca Nacional calificó de “siniestro” el programa actual de 'Caiga quien caiga', aseguró que vive de la fama del antiguo y dijo que el reportaje que ofrecieron el pasado viernes “fue una desfachatez”. T5 inscribe el reportaje dentro del tono irónico del programa Telecinco respondió el mismo lunes a la denuncia de la secretaria general de Políticas de Igualdad, Soledad Murillo, contra el reportaje emitido en el último programa de 'Caiga quien caiga' lamentando que “la ironía que caracteriza a este programa no haya alcanzado por transmitir que el reportaje en cuestión era un ejemplo de esa misma ironía”. Murillo anunció el lunes el envío de una protesta a Telecinco quejándose por el tratamiento que en 'Caiga quien caiga' se dió el pasado viernes al citado reportaje. En el mismo, los reporteros animaron a trabajadores de la construcción reclutados para la ocasión a instigar a las azafatas del congreso, que éstos plasmaron en frases como 'que ese culito no pase hambre'. Un portavoz de la cadena declaró además que CQC “siempre ha sido un programa respetuoso” y que con el reportaje objeto de protesta por la responsable de Igualdad los guionistas quierían decir “qué es lo que no hay que hacer”. Murillo se quejó a Telecinco La secretaria general de Políticas de Igualdad, Soledad Murillo, remitió una carta a Telecinco quejándose por el tratamiento informativo que el programa de entretenimiento “Caiga quien Caiga'” ha realizado de los actos conmemorativos del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, que se celebró el ocho de marzo. Murillo adelantó que la protesta se produce por la emisión el pasado viernes de un reportaje sobre la apertura del Foro de Debate “Pekín + 10”, inaugurado por el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera. En el mismo, los reporteros del programa animan a diversos trabajadores de la construcción, reclutados para la ocasión, a instigar a las azafatas del congreso, y los obreros con frases como: “Que ese culito no pase hambre”. Posteriormente, el reportero hace preguntas ofensivas sobre las mujeres al titular de Trabajo, según el testimonio de la propia Murillo. “Me encanta compartir en clave cómica las críticas sobre la realidad social -aseguró-, pero esto no es humor sino machismo trasnochado. No me imagino a nadie haciendo este tipo de comentarios en un congreso sobre racismo o antisemitismo”. En este sentido, Murillo recordó que la Ley Integral contra la Violencia de Género recoge en su articulado medidas para evitar la emisión de imágenes sexistas en el ámbito publicitario y en el tratamiento informativo que ahora pide asuman los programas televisivos en el uso que hacen de la imagen de la mujer.