El candidato del PP a presidir RTVE, José Antonio Sánchez, será elegido este 22 de octubre presidente de la corporación en una segunda y última votación en el Congreso de los Diputados, en la que deberá conseguir mayoría absoluta (suficiente con los votos del PP), según informa Europa Press.
Sánchez consiguió el pasado jueves el respaldo suficiente en segunda votación (mayoría absoluta) para formar parte del Consejo de Administración de la Corporación pero le faltó el apoyo necesario en primera votación (mayoría cualificada) para ser elegido presidente.
Tras el cambio legislativo aprobado por el Gobierno del PP en 2012, para ser elegido presidente de RTVE se necesita el respaldo de dos tercios (más de 230 escaños) en un primer intento, o al menos mayoría absoluta (176) en un segundo.
Sólo será imprescindible lograr la mayoría absoluta
Así, en el pleno específico que tendrá lugar este miércoles tras el debate de Presupuestos que se está celebrando esta semana en la Cámara Baja, ya sólo será imprescindible lograr la mayoría absoluta, que la tiene asegurada gracias a los votos del PP (185).
De esta forma, Sánchez será previsiblemente elegido como cuarto presidente de RTVE que accederá al cargo con el respaldo del Congreso, tras sus predecesores Luis Fernández, Alberto Oliart y Leopoldo González-Echenique.
En la primera votación del pasado jueves para ser elegido presidente el candidato de los 'populares' consiguió los 176 votos de apoyo del PP (por debajo de los 185 que componen el Grupo Popular), así como 94 votos en blanco, además de una papeleta nula.
Izquierda Plural, PNV y Amaiur optaron por no participar en la votación. De los 350 diputados llamados a votar individualmente de forma secreta, mediante papeleta y urna, sólo lo hicieron 271.
El sistema de votación
En el debate del pasado jueves, los grupos parlamentarios de la oposición coincidieron en criticar al Gobierno por este nuevo sistema de elección para los miembros y el presidente de la Corporación “a dedo”, tal y como rechazó la portavoz de UPyD, Irene Lozano, por ejemplo.
Mientras, el portavoz de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA), Ricardo Sixto, que no participó de la votación, tachó de “farsa” este procedimiento de elección.
Por su parte, el nuevo portavoz del PSOE en la materia, Germán Rodríguez, criticó que el PP “imponga” de esta forma a su candidato y “sin consenso”, ya que sólo es imprescindible que alcance el respaldo de la mayoría absoluta de la Cámara para ser elegido, garantizado con los votos del PP.
No obstante, el portavoz 'popular' en la materia, Ramón Moreno defendió, desde una “profunda convicción”, que Sánchez contaba con una capacidad y una solvencia “incuestionables” para presidir RTVE. Recriminó al resto de grupos de la oposición que criticasen a Sánchez “sin conocerlo” y desde el “sectarismo ideológico más trasnochado”.
“Cuanto más se empeñan en inventarse un futuro tenebroso para RTVE, más se empeña y se empeñará este Gobierno en afirmar, reafirmar y confirmar la viabilidad de futuro de RTVE”, sentenció.
Una nueva designación
José Antonio Sánchez, de 58 años, es licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense y ya ocupó un cargo en la corporación como director general entre los años 2000 y 2004.
Posteriormente, pasó a desempeñar la labor de director general de Coordinación Institucional de Telefónica Internacional y en el año 2011 fue nombrado director general de Telemadrid en sustitución de Isabel Linares. También ha trabajado en otros medios como la Agencia Efe, el diario 'ABC' o Canal 7, además de ostentar la vicepresidencia de la Asociación Española de Radiodifusión Comercial (AERC).
Durante el periodo de interinidad, el consejero a propuesta del PP José Manuel Peñalosa, ha ocupado la presidencia en funciones. El anterior presidente, Leopoldo González Echenique, accedió al puesto con la luz verde del Congreso en segunda vuelta, con 194 votos a favor (de PP y CiU) de los 279 votos emitidos, 74 en blanco y 4 nulos.
Esta designación es posible tras aprobar el Gobierno un decreto ley en el año 2011 por el cual modificaba la forma de elección del consejo de administración de la radiotelevisión pública, que exigía desde 2006 (año en que se aprobó la ley de reforma de RTVE) el consenso de dos tercios de la Cámara de los Diputados.
Este decreto reformaba el anterior sistema de renovación de RTVE y fue aprobado por el Gobierno con el objetivo de “desbloquear” una negociación entre los partidos políticos que no permitía acordar un nuevo presidente. Esta situación se prolongaba en el tiempo casi cerca de un año tras la dimisión del anterior dirigente, Alberto Oliart.
Antes de la aprobación de esta norma, el dirigente de la corporación debía ser elegido por dos tercios del Congreso de los Diputados, es decir, contar con el respaldo de al menos 248 diputados, según mandataba la Ley de Radiotelevisión pública estatal de 2006, lo que hacía necesario un acuerdo entre PP y PSOE.
Sin renovación del Consejo
A pesar de que se renueve la cabeza de la Pública, sigue pendiente de reforma el Consejo de Administración, con cuatro de sus miembros, en concreto, de dos consejeros propuestos por el PP, uno por el PSOE y otro por IU, que agotaron su mandato en diciembre de 2012. Se trata de Andrés Martín Velasco y Rosario López Miralles (PP), Miguel Ángel Sacaluga (PSOE) y Teresa Aranguren (IU).
Todos ellos fueron nombrados por el Congreso y el Senado el 19 de diciembre de 2006. Juraron su cargo el 15 de enero de 2007. Además, según la Ley de la radio y la televisión de titularidad estatal, su mandato es de seis años contados desde su nombramiento.
Una vez finalizado ese plazo, la ley prevé que los consejeros salientes continuarán en sus funciones hasta el nombramiento de los nuevos, que tienen que se aprobados con al menos un acuerdo de la mayoría absoluta del Congreso y el Senado, si transcurridas 24 horas desde la primera votación en cada Cámara no se consigue una mayoría de dos tercios.
La falta de acuerdo entre el PP y el PSOE provocó que la última renovación del Consejo de Administración de RTVE, prevista para 2010, se retrasara dos años, hasta junio de 2012, tras la reforma de la Ley impulsada por el Gobierno que cambió el proceso de elección y redujo el número de miembros, de doce a nueve consejeros.
Las cuentas de RTVE serán el principal reto al que se enfrentará Sánchez. Las pérdidas de RTVE se cifran en 716 millones de euros desde el año 2007, cuando nació la corporación, hasta el año 2013. Asimismo, el organismo arrastra desde los últimos dos años un déficit estructural en torno a los 100 millones de euros.