TV Internacional

Sancionan a una televisión brasileña por transmitir un suicidio en directo

La sanción, impuesta por la Procuraduría General de la República a la cadena Record, obliga a ésta a emitir “noticias positivas” durante dos meses, en el mismo programa en que fue transmitido el suicidio de un agente de policía que se voló la cabeza frente a las cámaras.

Antes de disparar, el agente Reinaldo Antonio Domingos, de 30 años y con una diez años de servicio en la Policía Militar de Sao Paulo, dijo que estaba siendo objeto de una persecución “por tratar de ser un policía honesto”. La sanción a Record coincide con un escándalo desatado en la televisión brasileña por los excesos en que han caído los programas de corte sensacionalista, que en los últimos tiempos se han multiplicado en todas las emisoras y horarios. Hace veinte días, en un programa dominical emitido por el canal SBT, fue presentada una entrevista con dos supuestos miembros de una banda formada por presos que desde las prisiones paulistas controla el tráfico de drogas y armas en la más popular ciudad brasileña.

Los dos hombres, encapuchados y exhibiendo un viejo revólver, amenazaron de muerte a varios periodistas de emisoras rivales, a un famoso sacerdote y a autoridades de la región.

Las amenazas de muerte transmitidas “en directo” horrorizaron a muchos, pero nada escandalizó tanto como la revelación, unos días después, de que la entrevista en realidad había sido fraguada por los propios responsables del programa. Los dos encapuchados eran actores contratados para hacerse pasar por delincuentes y en su aparición frente a las cámaras siguieron un guión elaborado por los productores de la emisora, según ha podido determinar la policía. El caso está bajo investigación y Augusto “Gugu” Liberato, uno de los presentadores de televisión más populares del país y responsable del programa que urdió la farsa, corre el riesgo de ser acusado de apología del delito, incitación a homicidio y otros cargos.