Después de haberse vuelto a convertir, durante casi tres días, en uno de los asuntos más tratados en Twitter en nuestro país a costa del hastag #GraciasSara, que ridiculizaba las respuestas cortas y sencilla de la periodista durante la Eurocopa, Sara Carbonero se ha defendido desde su columna en el diario Marca.
La enviada especial de Mediaset a la Eurocopa, que cubre a pie de campo los partidos de la selección española de fútbol, ha sido criticada por su labor incluso desde antes que la competición empezara, pero las críticas se multiplicaron tras el España-Croacia, cuando se creó el hastag.
Aunque muchos de sus compañeros de profesión ya han defendido su labor a través de la misma red social, como ya recogimos, Carbonero hasta ahora se había mantenido al margen de la polémica, pero ahora ha querido defenderse comparando la quema de brujas en la Edad Media con lo que a veces se hace a través de Twitter.
La columna completa de Sara Carbonero en Marca
La periodista comenzó refiriéndose sólo a la Eurocopa: “Dice un proverbio ucraniano que está bien pensar en la gente, pero nunca debes olvidarte de ti mismo. La noche de San Juan purificó con su fuego el escepticismo. Las hogueras eliminaron viejos miedos. Ya no podrán decir que España nunca ha ganado a Francia en partido oficial. Los guiñoles estarán aún más impresionados con nuestra selección de carne y hueso. La noche del fuego consumió también debates estériles”.
“Las hogueras fueron usadas para quemar brujas o a los que se envidiaba”
A continuación, comenzó a variar el rumbo: “Aunque en otras épocas las hogueras fueron usadas también para fines varios. Como, por ejemplo, quemar a las brujas, a los herejes, a los que eran distintos o a los que envidiaban. En la Edad Media y principios de la Moderna se torturó y se mató a muchos inocentes. Y no sólo en España, en muchísimos países de Europa y América”.
“No existía Twitter, pero se acusaba desde el anonimato para que quemasen a alguien”
“Aunque no existía Twitter, la práctica de acusar desde el anonimato e intentar que quemasen a alguien estaba muy extendida. ¡Menos mal que esa época ya ha pasado!”, concluía su texto, en clara alusión a su caso en la famosa red social.
Otra línea de polémica: las exageradas críticas, ¿fruto del machismo?
Sin al parecer querer salir del tema, son muchos los que aluden que las críticas exageradas que está recibiendo Sara Carbonero son fruto del machismo que produce que una mujer con su belleza y que comparte su vida con Iker Casillas ostente el puesto que la periodista tiene en Telecinco.
Ya en el mes de marzo la veterana periodista Rosa María Calaf arremetió contra Carbonero al considerar que “”hace un flaco favor a la mujer y al periodismo, pues frivoliza la imagen de la mujer y contribuye a que la apariencia sea más importante que el contenido“, como recogimos.
Tras la nueva polémica vía Twitter, compañeros como Risto Mejide, Carme Chaparro, José Ribagorda, César González Antón, Susana Guasch, Felipe del Campo o Ramón Trecet han querido apoyar a Carbonero; pero Mónica Planas quiso analizar más allá de lo superficial en las críticas.
Mónica Planas ha analizado el caso en “Machismo y periodismo deportivo”
La analista de televisión deportiva en el diario Mundo Deportivo dedicó al caso la columna “Machismo y periodismo deportivo”, en la que defiende la labor de la mujer en la prensa deportiva, a la vez que ataca a los que, tras fichar a mujeres bellas para ponerlas ante la cámara, luego no dan la cara si se las critica a ellas.
“Creo que Sara es víctima del machismo. Pero de otro. Del que exige a las periodistas ser además modelos de pasarela. Del que prioriza el físico al talento. De eso Sara no tiene la culpa. Es afortunada: tiene el trabajo y tiene la belleza. Tiene el derecho a aceptar las ofertas que recibe. Y sin duda, los comentarios soeces sobre su belleza y los que creen que Íker la ha ayudado es cierto que son machistas”.
“Como periodista que ejerce su trabajo tiene que aguantar las críticas”
A pesar de esta defensa, la periodista también quiso aportar otro punto de vista, defendiendo que cualquier periodista está expuesto a las críticas por su labor, y reafirmando una vez que el machismo no es realizar el trabajo de Carbonero por ser guapa:
“Pero ojo. Como periodista que ejerce su trabajo tiene que aguantar las críticas profesionales y los comentarios como todos sus compañeros. Eso no es machismo si la consideramos una más en el oficio. Machismo es tolerar a mujeres bellas niveles profesionales que no se aceptarían en un hombre o en otras periodistas no esculturales. Machismo es perdonar la vida a las mujeres por el simple hecho de serlo”.
“Machismo es acordarse sólo cuando se ataca a Carbonero y no a Silvia Barba”
“Machismo es acordarse que existe sólo cuando se ataca a la Carbonero y no a Silvia Barba (otra periodista que ha aguantado críticas y bromas). Machismo es aceptar que Sara no use el uniforme que usan todos sus compañeros de retransmisión porque ella debe lucir más bella. Machistas son los que creen que ejercemos nuestro trabajo como mujeres y no como periodistas. Machismo es relacionar la belleza de alguien con las críticas profesionales. Machismo es pensar que todas las periodistas querríamos estar en el lugar (personal y profesional) de Sara”.
“Machismo es priorizar la pantalla a una mujer bella que a un periodista más capaz”
“Machismo es priorizar la pantalla a una mujer bella que a un periodista más capaz. Machismo es valorar un trabajo (o el contenido de un artículo) en función de si lo ha hecho un hombre o una mujer. Machismo es entender y valorar una crítica profesional en función del sexo de la persona de la que se habla. Queridos y queridas machistas: estáis caducos, sois aburridos y vais muy cortos de argumentos. Buscad otros motivos para defender a Sara porque la tele (como el tiempo) es fugaz y cruel: sólo perdura el talento y la creatividad”.
“Hay muchas periodistas que tienen ambas virtudes: en la tele, en la radio, en la prensa y en la vida. Y lo mejor es que todas ellas están dispuestas a llevaros la contraria. No por feminismo sino por profesionalidad y exigencia”.
La misma Mónica Planas criticó a Silvia Barba tras una entrevista a Silva
Precisamente Mónica Planas criticó al “espejo” de Sara Carbonero en TVE, Silvia Barba, que se encarga del inalámbrico a pie de campo en los partidos que el ente público emite de la selección española.
En aquel caso, que ocurrió en octubre de 2011 y fue recogido por Periodista Digital, Mónica Planas escribió lo siguiente sobre Barba: “Silvia nos obsequió a todos con una nueva modalidad de entrevistar a un jugador. Muy interesante e innovadora. Consiste en no hacerle ni una sola pregunta, sino todo lo contrario. Se trata de ofrecerle al futbolista las respuestas directamente porque ya sabes lo que te va a contestar”.
La analista televisiva de Mundo Deportivo también ha criticado a Paco González: “Paco González lleva toda la Eurocopa bautizando a Iniesta como ‘Andresito’ y a Navas como ‘Jesusito’. Y a Carreño se le está pegando. No logro entender el por qué de este viciado paternalismo, tratando a los futbolistas como títeres de propiedad. Lo tendrá que explicar Paquirrín González”.
Cada competición futbolística lo mismo: el “Circo Carbonero” ya pasó en el Mundial
Como si de una pesadilla que se repitiera cada cierto tiempo se tratase, no es la primera vez que Sara Carbonero se ve convertida en una diana para la polémica. De hecho, precisamente con la anterior gran competición de selecciones que emitió Telecinco, el Mundial de Sudáfrica en 2010, la periodista también se llevó críticas por “distraer a Iker Casillas” tras el primer partido perdido contra Suiza.
En aquel momento, ya realizamos una recopilación de algunas de las opiniones de la blogosfera y las redes sociales, y recogimos algunos datos que evidencian que si lo de Carbonero es un “circo”, no lo es porque ella quiera, sino porque las agencias mandaron 80 fotos suyas en 40 minutos o porque el “prestigioso” The Times la llevara a portada. La historia se repite.