Mediaset España repetirá en Scandal, la nueva serie que estrena este miércoles en Cuatro, la estrategia de bloques cortos de anuncios que ya usó en Homeland, y que le permitió lograr que el 96 por ciento de la audiencia no cambiara a otro canal durante las pausas publicitarias, según ha informado el grupo en una nota informativa.
Se emitirán dos bloques cortos “hiQuality” con un máximo de tres spots en cada pausa
De este modo, durante la emisión del nuevo melodrama televisivo de Shonda Rhimes (Anatomía de Grey, Sin cita previa) se emitiran solamente dos bloques cortos “hiQuality”, que incluirán un máximo de 3 'spots' en cada pausa.
Tal y como ya se hizo en Homeland, esta iniciativa irá acompañada de una serie de recursos gráficos en antena y elementos de continuidad de paso a publicidad con el objetivo de informar al espectador de la duración reducida de cada corte.
Objetivo: repetir los buenos resultados de 'Homeland'
Según el grupo, gracias a esta estrategia de bloques cortos y exclusivos diseñada por Publiespaña, Homeland registra “un elevado 11,4 por ciento de 'share' y 901.000 espectadores en el target comercial” -público al que está dirigido el anuncio-, lo que ha propiciado que “más de 30 marcas hayan apostado por Homeland para sus campañas”.
Las intrigas políticas de 'Scandal' llegan a Cuatro con doble capítulo
Cuatro estrena Scandal, la nueva ficción creada por Shonda Rhimes (Anatomía de Grey) y protagonizada por Kerry Washington (Django Desencadenado), Tony Goldwyn (Ghost) y Columbus Short (Studio 60), entre otros. Ambientado en Washington DC y teñido de intriga política, las historias personales se dan la mano en Scandal con secretos de estado y asuntos turbios relacionados con la administración y los intereses políticos de la capital norteamericana.
El primer capítulo se titula “Bomboncito”. Todo el mundo tiene secretos, pero solo Olivia Pope puede acabar con ellos. Un escándalo en la Casa Blanca salpica directamente al presidente de los Estados Unidos después de que una becaria le acuse de haber tenido una aventura. Cyrus Beene, el nuevo jefe de gabinete del presidente, acude a Olivia Pope porque es la única capaz de solucionar el problema y evitar que la noticia salte a la opinión pública. En la investigación del caso, Quinn Perkins, una de las abogadas del bufete, descubrirá que los clientes de ‘Pope & Asociates’ no son los únicos que tienen secretos que esconder.
A continuación, en “Trapos sucios”, el nuevo cliente de ‘Pope & Asociates’ es Sharon Marquette, dueña de uno de los negocios de chicas de compañía más conocidos de Washington que, además, está siendo investigada por la policía. El equipo de Olivia tendrá que hacer todo lo posible para mantener la privacidad de la cartera de clientes de Shannon porque en ella se encuentran las personas más influyentes del país. Mientras tanto, Quinn se verá inmersa en algunos problemas con la antigua becaria del presidente de los Estados Unidos, Amanda Tanner.