Por Paula HernándezPaula Hernández
Con la buena acogida del estreno de 'Vis a vis', en Antena 3, la ficción española ha dado otro paso adelante definitivo. Hace algunos años que, con series como 'El Barco', 'Pulseras rojas' o 'Crematorio', las productoras dejaban claro que eran capaces de hacer nuevos productos. Pero en aquel momento, a veces las cadenas y otras veces el gran público, no se atrevieron a llenar la parrilla de series innovadoras. Porque aún funcionaban las viejas fórmulas, y si algo funciona...
Pero eso se acabó. Atresmedia fue el grupo que abrió el camino cuando decidió apostar fuerte por este género... Y ahora ya es una norma que intentan seguir todas las cadenas: ficción que no innova, ficción a la que castiga el público. Y serie rompedora, serie que lidera.
Así lo estamos viviendo este año, el año en el que 'Vis a vis' lideró contra 'La que se avecina' y su público fiel. Un 2015 en el que 'Cuéntame' está sufriendo el desgaste de sus historias. En la misma cadena que ha apostado por 'El Ministerio del tiempo', un producto tan difícil de llevar a cabo como seguidores que lo aprecian ha generado. Un momento en el que casi todos los días de la semana, gana la batalla de la audiencia una serie. Pero no cualquier serie, la que presenta ingredientes innovadores. Veámoslo con más detalle:
- 'Velvet' (febrero 2014, Antena 3):aunque la ficción protagonizada por Paula Echevarría y Miguel Ángel Silvestre, parecía que no aportaba elementos innovadores, si analizamos el continente más que el contenido, encontramos la clavedel éxito(4,8 millones y un 24,6% en su estreno). Puede que en un principio, la audiencia se asomara por el atractivo de los protagonistas, pero muchos de ellos te responden, que la historia que menos les interesa ahora es la principal. Quizá sean los amoríos de los personajes secundarios, o la colisión entre ricos y pobres, tantas veces contada, lo que mantiene fiel al público de esta producción. Pero lo que realmente agradece la ficción española, es la evolución que representa 'Velvet' en cuanto a calidad técnica. La serie es una delicia visual que “desfila” por nuestra parrilla, de la mano de la gran firma Bambú. Esa es, sin duda, su mayor aportación, que también ha sido comparada con productos norteamericanos.
- 'El Príncipe' (febrero 2014, Telecinco): por primera vez una serie española gira entorno al yihadismo. La ficción se ha atrevido a emitir en prime time uno de los temas que más preocupan a nuestro país, y ha arrasado. 'El Príncipe' también ha sabido hacernos entender la diferencia entre religión y terrorismo. Aunque sí mantiene elementos ya conocidos en nuestra ficción: tensión sexual no resuelta, chicos guapos, torsos desnudos...Era la primera vez que veíamos a un espía del CNI cristiano sumergirse en un pueblo que SÍ existe (otra costumbre poco utilizada) y que se enamora de una chica musulmana. La serie de Telecinco ha conseguido que las chicas quieran vestir con velo, causar interés por una Ceuta relegada al ostracismo y despedirse por la puerta grande. La productora había diseñado la historia para tener solo dos temporadas y así va a ser. Con los números que ha cosechado en el estreno de la nueva temporada, pocos querrían soltar esta gallina de huevos de oro, pero plano a plano ha preferido irse por todo lo alto, antes que desgastar la fórmula. ¡Bravo!
- 'Sin identidad' (mayo 2014, Antena 3): la serie de Diagonal TV es un thriller mucho más oscuro de lo habitual en nuestra televisión y aún así dominó en su estreno. Con unos personajes más grises que de costumbre, todos sus protagonistas tiene una parte buena y otra mala, con la que cualquiera se puede llegar a identificar. Otro punto a su favor es la protagonista: la, hasta ahora, dulce Megan Montaner muestra una evolución pocas veces vista en un personaje de la ficción española. De ser una niña pija, llega a ser prostituida en burdeles de China. Tratando de lejos el tema de los 'niños robados' que estuvo en auge el año pasado, el argumento principal de la serie es la venganza de la protagonista contra toda su familia. Algo que recuerda a 'Revenge' o 'El Conde de Montecristo'.'Sin identidad' apuesta todo a una sola carta: la misión de la protagonista. Dejando atrás las subtramas que, aunque las hay, todas giran entorno a la principal. Algo que hemos visto en ficciones extranjeras como 'Breaking Bad', pero que no se había hecho a nivel nacional. Es también otro ejemplo de serie pensada con un principio y un final, que apuesta por una trama redonda sin pretender alargar el acierto.
- 'El Chiringuito de Pepe' (junio 2014, Telecinco): La serie de Telecinco sorprendió a todo el mundo cuando los datos de su estreno superaron a los del 'El Príncipe', convirtiéndose en el mejor debut de ficción nacional en Mediaset desde febrero de 2005 ('Motivos Personales'). La ficción producida por 100 balas parecía que solo presentaba ingredientes conservadores pero justamente ahí aguardaba su elemento innovador: en los “ingredientes”, en lo culinario. En 'El Chiringuito de Pepe' sí que hay una tensión sexual clara entre los protagonistas, aparecen también personajes de todas las edades para atraer a todas las franjas, y, como no, transcurre toda ella en un bar...en un chiringuito, vaya, pero para el caso...Con todas las estrategias tradicionales seguidas, podría haber creado en el público el sentimiento de “esto ya lo he visto”, y ¿por qué no lo hizo? Porque la serie sí que contiene algo nuevo: la cocina. Tras la ristra de programas culinarios, y aprovechando el interés que suscitan, poner a un chef de protagonista y a sus platos como elementos imprescindibles, dio mejor resultado del que se esperaba. Sobre todo para una serie que habían preferido estrenarla en verano (otro, quizá, acierto imprevisto).
- 'Bajo sospecha' (febrero 2015, Antena 3): con tintes de las ficciones policíacas que se han puesto de moda en los últimos años, como 'Broadchurch' o 'The Killing', llegaba a los martes de Antena 3: 'Bajo Sospecha'. Ese contenido oscuro y frío pocas veces visto antes en una serie española, más la pareja protagonista - que recordaba a Mulder y Scully de 'Expediente X- y con la habitual tensión sexual entre ellos, dieron como resultado el mejor estreno de temporada con más de 4,2 millones de espectadores (21,6%). Otra de las novedades que la serie aportaba a nuestra parrilla es el sistema 'True Detective' de cambiar de caso en cada temporada. Algo que agradece el público ya que se les garantiza una respuesta al propósito planteado, sabiendo que tendrán otra tanda con los mismos protagonistas en el futuro.
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- 'El Ministerio del Tiempo' (febrero 2015, La 1) : si hay una serie que ha revolucionado a la ficción española este año, esa ha sido 'El Ministerio del Tiempo'. Por lo innovador en la trama, por elevar la conversación con su público a un nivel superior, y por el fenómeno fan que ha logrado arrastrar. La producción de TVE presentaba un argumento nunca visto antes en nuestras series, con guiños sin masticar a la audiencia que por primera vez decían: “si nos entiendes perfecto, pero no te lo vamos a explicar”, como el mismo Julián hace con Alonso cuando no capta sus bromas. Una ficción sin complejos para una cadena pública que necesitaba atraer a un público que ya ni pasaba por allí. Y lo que ha conseguido es captar a unos fans que ni siquiera sintonizaban la TV nacional. Generando un fenómeno fan pocas veces visto en una serie española, con apuestas transmedia, con movimientos en redes para su renovación, con blogs exclusivos para desentrañar las tramas... 'El ministerio del tiempo' ha viajado, por primera vez, al extranjero para recuperar a todos aquellos seriéfilos escépticos y devolveros a nuestra parrilla.
- 'Allí abajo' (abril 2015, Antena 3): la ficción que recoge los tópicos por excelencia podría ser la antítesis de la innovación si no fuera por la inteligente estrategia que ha seguido la cadena. La productora Plano a Plano tenía en un cajón el guión de 'Allí abajo' desde hace años y no fue casualidad que cuando le dieran luz verde, acabara de estallar el fenómeno '8 apellidos vascos' y las “dos Españas” estuvieran de plena actualidad. Además, los creadores traían bajo el brazo el éxito de 'El Príncipe' y la guinda del pastel la puso el reparto: una apuesta por unos actores secundarios poco conocidos en la televisión nacional pero muy seguidos en las redes sociales. La cuadrilla andaluza que arropa a María León, son ni más ni menos que 'El Culebra y el Cabesa', como saltaron a la fama en Internet. Y los vascos que rodean a Iñaki en la ficción ya eran conocidos en Euskadi con su programa 'Vaya Semanita'. De esta forma, 'Allí abajo' se garantizó el interés de espectadores de ambos lados de la península estrenándose como el mejor estreno de ficción de la década y de Antena 3 de los últimos 20 años. Con destacados datos tanto en Andalucía como en Euskadi.
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- 'Vis a vis' (abril 2015, Antena 3): si las ficciones citadas anteriormente han dado un paso al frente en nuestra ficción, y 'El Ministerio del tiempo' ha revolucionado a la audiencia, 'Vis a vis' ha sentenciado: queremos series que rompan los moldes. La serie de Globomedia y Antena 3 lideró en su estreno frente a una imbatible 'La que se avecina' con ingredientes que en épocas anteriores la hubieran hecho fracasar: la serie no presenta una tensión sexual entre dos (guapos) protagonistas, ni una familia desayunando, ni unelenco de actores conocidos, sino que nos mete en una cárcel y encima...de mujeres. La cadena se fijó en la tendencia mundial sobre las ficciones carcelarias y quiso probarla en nuestro país, con reclusas con las que compartimos ADN y con los delitos nacionales. ¿Resultado? Las cadenas generalistas pueden subirse al carro de las tendencias mundiales en ficción, porque las productoras son capaces de hacer series innovadoras para todos y los espectadores las esperan con los ojos muy abiertos.
- 'Cites' (abril 2015, TV3): otra serie que se coló esta semana entre los trending topics de la red fue 'Cites', la adaptación catalana de la británica 'Dates'. Una apuesta de TV3 que hasta para los que nos habíamos “enamorado” de la ficción inglesa, nos volvió a conquistar. Aunque podría diferenciarse aún más de la original, cuando son inspiraciones tan bien traídas a nuestro pequeño país, se agradecen. Reconocer las calles de Barcelona en una primera cita, los perfiles típicos de las personas de un territorio, las aspiraciones, las costumbres... Series como 'Cites' o 'Vis a vis', le dan un valor añadido a nuestra cultura inspirándonos en lo mejor de las otras, no es tan mala idea.
En resumen: la arriesgada temática por la que apostó 'El Príncipe', la notable evolución de María Fuentes en 'Sin identidad', las acertadas adaptaciones nacionales de las tendencias extranjeras como 'Bajo sospecha', 'Vis a vis' o Cites', la evolución de la calidad técnica que muestra 'Velvet' o el valiente guión de 'El Ministerio del Tiempo' han logrado que nuestra ficción se haya renovado, actualizado y mejorado en todas sus vertientes. Y los espectadores las hemos acompañado en cada uno de sus aciertos.
Por ello, series como 'Bienvenidos al lolita' o 'Alatriste', se quedaron por el camino, la fórmula de 'Aída' se desgastó y 'Cuéntame' está haciendo mínimos históricos en sus audiencias. En la actualidad el caballo ganador de las cadenas es la ficción innovadora.
¿Qué pasará con lo que está por venir? Tanto Atresmedia como Mediaset parecen apostar por ficciones más allá del costumbrismo y de la dramedia más convencional. Véanse los casos de 'El incidente', una serie basada en un “high concept” y con una importancia capital de espectaculares escenarios naturales; 'Refugiados', que también plantea una suerte de ciencia ficción bajo un tratamiento más o menos cotidiano; o 'Mar de plástico', que sigue en la senda del género policíaco ya transitada por 'Bajo sospecha'. Y lo mismo se puede decir de 'Rabia', en Telecinco, ficción que apuesta por el thriller y el horror.
Los ejemplos ya en emisión, como los que están por emitirse, bien demuestran que es posible otra ficción, con profesionales de solvencia más que probada en todos los ámbitos (desde el guión a la dirección, pasando por el incremento gradual de caras nuevas en sus repartos). Aún hay mucho por cambiar, pero la actual plantilla de series españolas es, como poco, prometedora.