El Tribunal Supremo ha desestimado los recursos presentados por los principales operadores de televisión privados contra su auto del pasado diciembre en el que ordenó el cierre de nueve canales de TDT por haber sido adjudicados sin concurso público por el Gobierno de Zapatero, según informa Servimedia.
El Alto Tribunal notificó este jueves la desestimación a las partes en un auto del que informó este viernes el bufete Massmedia Assistants, representante de la empresa Infraestructuras y Gestión 2002 SL, que fue la que llevó la adjudicación de los canales a los tribunales.
El auto desestima la totalidad de los recursos interpuestos por Atresmedia, Mediaset, VeoTV, NetTV y la patronal de los operadores privados (Uteca) contra el cierre inmediato de nueve canales que ordenó el Supremo el 18 de diciembre.
Insiste en la exigencia de un nuevo concurso para el reparto de canales
El auto deja clara la exigencia de un nuevo concurso público al señalar que la nulidad del acuerdo de adjudicación de frecuencias que hizo el Gobierno socialista supone abrir el espacio radioeléctrico al concurso entre sujetos interesados en el ejercicio de dichas libertades, tal como requiere la Ley 7/2010 y la normativa comunitaria, en vez de efectuar una atribución directa a sujetos que ya disponen de dicha capacidad de ejercicio de las referidas libertades?.
A juicio de Massmedia Assistans, “el nuevo escenario legal implantado por la Ley General Audiovisual de 2010 y el cambio de criterio jurisprudencial adoptado por el Tribunal Supremo en la referida sentencia de diciembre de 2012, que acaba con el carácter de servicio público esencial de la radio y televisión y su consiguiente régimen de explotación concesional por particulares, pondrá fin al abusivo margen discrecional con que los distintos Ejecutivos, nacionales y autonómicos, han venido resolviendo tradicionalmente los preceptivos concursos para la adjudicación de dichos servicios de radio y televisión, pues los tribunales podrán fiscalizar mucho más fácilmente la actuación administrativa al poder excluir de plano criterios subjetivos a la hora de valorar las ofertas de los licitadores”.
Infraestructuras y Gestión 2002 SL también muestra su “total satisfacción” con el nuevo auto del Supremo y espera que “el cierre de los canales declarados ilegales se produzca de forma inmediata, por cuanto no existen razones que justifiquen por más tiempo demorar el cumplimiento de una Sentencia firme del más Alto Tribunal de la nación”.
Era la última bala de las TV antes de que el Gobierno se pronuncie
El recurso de reposición fue presentado ante la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Supremo con el objetivo de intentar convencer al alto tribunal de que la anulación de los canales de TDT no es, bajo su punto de vista, pertinente. “Las cadenas actuamos en su momento de buena fe, fue un fallo formal en su momento de la Administración, que ahora debe solucionar el Gobierno”, era el argumento de las privadas.
Se trataba de un penúltimo recurso que tenían las televisiones antes de que el asunto pase directamente al Gobierno, que deberá aplicar la sentencia o imponer una nueva legislación.
Siguiente paso: un recurso de amparo ante el Constitucional
Ahora que el recurso ante el Supremo no ha prosperado, el último paso sería presentar un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional.
Fuentes de los dos principales operadores privados, Mediaset y Atresmedia, explicaron que sus responsables jurídicos están plenamente convencidos de tener la razón en este caso, de ahí que hubieran tomado la decisión de presentar este recurso conjunto. UTECA, la asociación que representa a todos los operadores, fue la encargada de realizar todas las gestiones.
Ahora, confían en que el Gobierno arregle la situación
Una vez rechazados los recursos de las televisiones, en los cuarteles generales de los grupos esperan que el Gobierno les haga un favor de última hora ante una decisión que consideran “injusta”.
Las cadenas prevén agotar todas las vías judiciales a su disposición, en paralelo a un posible pacto con el Gobierno. El Ejecutivo ha transmitido a las TV que ya está trabajando en una nueva ley general audiovisual para recoger las demandas de los operadores.
Las cadenas solicitan poder elegir cuántos canales quieren operar, sin imponer un máximo. Es decir, Mediaset y Atresmedia quieren disponer de un espacio suficiente en los múltiplex para decidir, unilateralmente, qué canales desean tener.