Hubiesen podido ser pareja en ‘Super Shore’, el reality de la MTV con el que estuvieron juntos en antena durante varias semanas, pero sus formas tan opuestas de entender la vida hicieron imposible que acabasen juntos. Tras su paso por el programa más golfo y desmadrado de la parrilla, el madrileño de 25 años Abraham García y la milanesa de 21 (y heredera de la famosa marca de automóviles de lujo) Elettra Lamborghini han aparcado sus diferencias para ‘hacerse un Torito’ a dúo en las páginas de ‘Primera Línea’.
Ella aparcó los negocios familiares para probar suerte como concursante en el festivo programa de la MTV, convencida como está de que, hoy día, si no sales en la tele “no existes”. Y él causó sensación, tanto en ‘Gandia Shore’ como en ‘Supervivientes’, con su naturalidad y ese cuerpazo que exhibe sin remilgos en las fotos que acompañan a la entrevista.
Como es habitual en su sección en ‘Primera Línea’, Quique Jiménez ‘Torito’ les planteó el reto de posar con poca (o ninguna) ropa y sincerarse como nunca, en una charla a calzón quitado que aborda temas como la fama televisiva, el sexo, el acoso en las redes sociales o esas diferencias de carácter entre ellos que les impidieron ser buenos amigos y quién sabe si algo más durante su periplo televisivo.
“Abraham me gustaba como persona”, reconoce Elettra, “pero tiene un carácter bastante raro. Me cayó muy bien al principio, pero no hasta el punto de follar con él”. Abraham admite que hubo entre ellos “un poco de tonteo” inicial: “Su cara me atrae mucho y ella me gustó, porque la vi diferente a los demás, pero al final le acabé cogiendo mucha manía. Que sea heredera de Lamborghini no quiere decir que yo tenga que comerle el culo”.
Para Elettra, “la envidia” fue el principal motivo por el cual todo el mundo acabó por ponerse en su contra en ‘Super Shore’: “Yo me hice la antipática precisamente por eso, para hacerme respetar”. Abraham fue bastante más popular que la italiana en el concurso de la MTV, pero sí denuncia la actitud “homófoba” de los que le llamaban “marica”, en las redes y en la calle, con intención de insultarle: “Para mí, en absoluto es un insulto, pero quiero dejar claro que no me gustan los hombres, soy muy mujeriego”.
Puestos a hablar de sexo, aparcando por un instante las reflexiones sobre la fama y jugosas polémicas televisivas que centran buena parte de la entrevista, Elettra se declara “bisexual” con matices: “Ahora mismo tiro más por las mujeres, porque con ellas no me aburro, como con los hombres. Estoy en una fase en que los hombres me dan asco a nivel sexual”.
Abraham asegura haber pasado por épocas de promiscuidad extrema: “En mi época más sexual, yo no iba a las discotecas a beber, sino a follar. Y como me rodeaba de amigos muy guapos, me era muy fácil”. La heredera italiana le cuenta también a Torito que en la cama es una “tigresa”, activa y muy habladora, y que si alguna vez ha fingido un orgasmo fue solo “para que el chico se sintiese mejor”.
Abraham, muy fogoso en sus relaciones sexuales, asegura que en alguna ocasión le han llamado la atención por los gritos, jadeos y gemidos que a sus parejas y a él se les escapaban en plena faena: “Soy muy activo, pasional y guarro. Me gusta que me lo chupen todo, de arriba abajo. También soy muy de experimentar y de hacer cosas raras”. Elettra asegura que ella es muy de tener relaciones sexuales “en cualquier parte, donde sea menos en la cama”. Además, se declara “abierta a todo”: “Soy muy salvaje y, como buena italiana, conmigo no te vas a arrepentir de nada, y menos en el sexo. Alguna vez soy tan dominante que doy un poco de miedo a los hombres”, Ahí queda eso.