El reality show polémico del momento es “Little Miss Perfect” (“Pequeña Miss Perfecta”), recién estrenado en la cadena americana WeTV, que busca a la niña que mejor represente el canon de belleza actual.
Se trata de un concurso de belleza infantil donde las pequeñas aspirantes viven la experiencia de ser como una modelo adulta: largas sesiones de maquillaje, aprender a posar, desfilar con tacones, dibujar una sonrisa perfecta…
El programa trae a la memoria la película “Pequeña Miss Sunshine”, que ya reflejó con humor lo que esconden los concursos de belleza infantiles, muy populares en Estados Unidos.
El debate y las críticas a “Little Miss Perfect” no se han hecho esperar, con detractores que acusan en el foro del programa a los padres de las pequeñas concursantes de sufrir un “narcisismo tóxico” y de los posibles problemas psicológicos que pueden causar a sus hijas en el futuro.
Mientras tanto, “Little Miss Perfect” ha emitido tres episodios. En el primero, se enfrentaron dos niñas, de nueve y ocho años de edad por representar a Orlando en el certamen.
El segundo episodio enfrentaba a otras dos niñas, esta vez de cinco y de seis años de edad y donde se puede comprobar la competitividad por parte de las madres de las niñas intentando obtener la victoria de sus pequeñas.