Tras varios días marcados por la preocupación de sus fans, la youtuber británica Marina Joyce finalmente ha salido al paso de la polémica que ha rodeado a sus últimos vídeos. Sus seguidores notaron en ellos un extraño cambio de actitud de Marina, lo que hizo saltar todas las alarmas.
Un cambio de actitud que muchos achacaban a un posible caso de maltrato por parte de su pareja. Incluso algunos suscriptores de su canal apuntaron que la joven estaba ausente, despistada, con falta de fuerzas y, sobre todo, con visibles moratones en su cuerpo.
La preocupación sobre su estado físico y mental hizo que los fans de Marina se movilizaran en las redes sociales, con el hasthag #SaveMarinaJoyce llegando a ser trending topic hasta en nuestro país. Esta iniciativa dio una gran visibilidad al caso, que llegó a manos de la policía de Enfield, la cual aseguró que la youtuber estaba “segura y bien” tras la visita de dos agentes a su casa.
“Ahora sé que si estoy en peligro, mis seguidores estarán allí para mí”
El siguiente paso en esta polémica, y a su vez el más esperado, han sido las explicaciones de Marina sobre todo lo sucedido. En primer lugar ha aclarado que no fue secuestrada por extremistas, como también se apuntó en un principio, y que la primera vez que supo sobre todo este asunto “fue cuando vi el hashtag y la gente comenzó a preocuparse”.
“La gente realmente se preocupó por mí”, explica la joven a The Sun, donde ha definido como “muy amables” a todos aquellos que mostraron interés en su situación. Joyce también ha confesado que está “realmente bien”, y que a raíz de todo esto su canal de Youtube tiene muchos más suscriptores, algo que “es muy bueno”.
Por último, la joven asegura que “ahora sé que si estoy realmente en problemas o en peligro, entonces mis seguidores de Youtube estarán allí para mí”