Lo de que el verano sirve para escapar de la rutina empieza a ser algo bastante cuestionable. Al fin y al cabo ¿cuántas habitaciones de hotel diferentes pero parecidas pueden llegar a mezclarse en nuestro baúl de los recuerdos vacacionales?
Si tienes ganas de hacer una escapada de última hora y quieres que la de este verano sea una memorable de verdad, te proponemos siete alojamientos distintos, singulares e incluso raros para que, al menos, la sorpresa esté garantizada.
Dormir al fresco dentro de una cueva en Granada
En la Sierra de Guadix, en Granada, se encuentra un conjunto de siete antiguas cuevas rehabilitadas a las que se ha añadido una piscina tipo infinity, suponemos, para que los inquilinos tengan un buen (y refrescante) motivo para salir de la madriguera.
Las Cuevas Balcones de Piedad están situadas en un entorno natural inigualable en el que la calma y el sosiego están garantizados.
En el interior de las cuevas se han mantenido la estructura original y el blanco de sus paredes, que aparece salpicado por coquetos muebles de madera y coloridos textiles que aportan a cada cueva toda la luz de la que, a priori, carecen.
Una cabaña junto al río en Santiago
Las tres sencillas y modernas cabañas que forman el conjunto de MU_Moradas no Ulla, a tan solo diez minutos en coche de Santiago de Compostela, están pensadas para disfrutar de una estancia en la que el contacto con la naturaleza sea tan constante como consciente.
Rodeadas de un imponente bosque y situadas a los pies del precioso río Ulla y su famoso puente colgante del Xirimbao, su cercanía con las solitarias playas de Arousa Norte las convierten en un campo base perfecto si lo que se desea es reencontrarse con lo esencial.
Un domo en las alturas en Cantabria
El concepto de alojamiento que encontramos en Chulavista mezcla magistralmente dos de los tipos de alojamiento singulares más en boga de los últimos años: las cabañas en los árboles y los domos o viviendas semiesféricas.
El nombre escogido para la finca es toda una declaración de intenciones y da varias pistas sobre lo que nos espera al llegar: naturaleza a raudales y unas vistas, las de las montañas de Miera, en Cantabria, de las que no despegarse en toda la escapada.
Solo hará falta decidirse entre el domo-cabaña en el árbol o un domo-burbuja, que permitirá observar el cielo estrellado desde la misma cama.
Soñar con otros mundos en una yurta mongola en el Delta del Ebro
Parece mentira que un (enorme, eso sí) trozo de tela pueda convertirse en un lugar tan acogedor y, sobre todo, que este sea el material de las viviendas que todavía se utilizan en países como Mongolia o Kyrguistán para hacer frente al frío y a las inclemencias meteorológicas.
Dormir en una yurta, especialmente en esta situada en el Delta del Ebro (disponible en Booking) es una experiencia memorable. El estilo de su decoración está directamente inspirado en la tradición mongola y nos traslada a la exótica Asia nada más cruzar su puerta.
Dentro encontramos un espacio diáfano y circular en el que hay todo lo necesario para pasar unos días en contacto con la naturaleza sin echar de menos ningún tipo de comodidad. Cuenta con una piscina exterior, un campo de golf, conexión wifi en toda la finca o la posibilidad de alquilar un par de bicicletas para explorar los alrededores.
Una tienda de campaña frente al mar en Tarifa
¿Te imaginas despertando dentro de una inmaculada y espaciosa tienda de campaña situada frente a la costa africana? Esta será tu vista al amanecer si te alojas en uno de estos tipis con vistas al mar cerca de la animada Tarifa (disponibles en Airbnb).
Aunque la cocina y el cuarto de baño sean compartidos con la otra tienda, se puede disfrutar de una más que correcta intimidad en el coqueto porche particular que tiene cada uno de los tipis. En ellos se puede disfrutar de un desayuno con vistas inmejorables antes de salir a explorar las solitarias casitas rocosas que quedan justo debajo de este sencillo y peculiar nido al aire libre.
Dormir dentro de un faro en La Palma
Esta es la experiencia que ofrece el Hideway Faro Punta Cumplida, en La Palma. El faro más antiguo de España, que ha cumplido los 150 años, es hoy un hotel cuyas habitaciones, recientemente reformadas, son un sueño pendiente para cualquier persona que se sienta atraída por el extraño magnetismo de estos vigías del mar.
Su piscina, una de las más bonitas del mundo según sus visitantes y una plataforma que se eleva 34 metros regalando unas vistas infinitas sobre el mar, completan esta opción que, si bien es la más costosa de las recomendadas en este artículo, también es un enclave idílico para celebrar cualquier acontecimiento importante o, por qué no, la vida misma.
La experiencia americana en una caravana en Cantabria
Cerramos este artículo con una caravana del año 1948 a la que sus dueños han bautizado como “Vagabond Travel Trailer”.
Una auténtica caravana americana situada en un enorme terreno plagado de árboles y naturaleza en la que se ha conservado todo su interior original de abedul, así como los elementos más característicos de estas casas con ruedas.
Este alojamiento que, además de tranquilo y pintoresco, es pet friendly (admite mascotas) te trasladará de inmediato al far west americano.