Cinco iglesias de las más bonitas y peculiares de España perfectas para una ruta arquitectónica

Las iglesias son unos de los reclamos principales cuando visitamos una ciudad, sobre todo porque muchos de ellos son edificios que albergan mucha historia en sus paredes, siendo también monumentos icónicos de las ciudades en las que se encuentran como es el caso de la Sagrada Familia en Barcelona o la Catedral de Sevilla.

Sin embargo, de los miles de iglesias que hay en nuestro país, que supera las 20.000 según los últimos datos estadísticos de la Conferencia Episcopal Española, hay de todo tipo de estilos arquitectónicos, así como de distinta antigüedad, siendo algunas de ellas muy características y dando un carácter propio que las hace ser parada casi obligatoria en muchos casos si se está por la zona.

Iglesia Nueva de Son Servera (Mallorca)

Este templo, de estilo neogótico, se ha convertido en un símbolo de su arquitectura y no precisamente por su plan o por su bello presbiterio, sino por el hecho de que sea una construcción inacabada, debido a que en 1929 pararon las obras por problema de fondos y nunca se ha planteado terminarla, aunque sí se han llevado a cabo varios proyectos de conservación.

La Iglesia de Nueva de Son Servera se encuentra en la localidad de su mismo nombre, Son Servera, en el noreste de la isla de Mallorca y con alrededor de 12.000 habitantes, a 71 km de la capital, Palma. A pesar de estar inacabada, es un edificio consagrado, que merece ser visitado, y que fue obra de Juan Rubió Bellver, colaborador de Antonio Gaudí.

Iglesia de Iesu (San Sebastián)

Si vemos las imágenes podemos pensar que nos encontramos con una iglesia nórdica, pero lejos de ello, está localizada en la ciudad de San Sebastián y es una de las máximas exponentes de la arquitectura minimalista, construida en 2012 por obra de Rafael Moneo.

Esta Iglesia de Iesu se ubica junto al río Urmea y su planta tiene una forma de cruz quebrada y asimétrica con la intención “de reflejar las tensiones de nuestro mundo” en palabras de su arquitecto, que dejó vanos abiertos en el techo desde donde se da la entrada de luz y que crea un interesante reflejo en su interior.

Ermita de la Virgen del Mar (Almería)

Otra iglesia que parece poco propia de las habituales que vemos por la geografía española es la Ermita de la Virgen del Mar, en Almería, que, sin embargo, capta la esencia de la arquitectura tradicional de los entornos pesqueros y marítimos, con un blanco que recubre sus paredes en una cúpula en azul, habitual en la costa mediterránea.

Esta ermita, que también recibe el nombre de Torregarcía, fue construida en 1953 por el arquitecto Guillermo Langle Rubio y se ubica en el paraje litoral del mismo nombre, cerca de la torre homónima, en el mismo término municipal de la ciudad de Almería.

Iglesia de la Vera Cruz de Carballino (Ourense)

La Iglesia de la Vera Cruz, en Carballino, provincia de Ourense, es una de las obras inacabadas que dejó el arquitecto Antonio Palacios, conocido también por el Metro de Madrid o la Estación de Chamberí, y que, a pesar de su apariencia clásica, data de mediados del siglo XX, concretamente su construcción comenzó en 1943.

Sus obras se alargaron hasta 14 años, con financiación que corrió en parte por los propios vecinos del municipio, y tiene la peculiaridad de estar construido íntegramente con materiales de la zona.

Santuario de Santa María Magdalena de Novelda (Alicante)

El Santuario de Santa María Magdalena en Novelda (Alicante) es uno de los edificios religiosos característicos del estilo modernista diseñada por el ingeniero José Sala Sala y fue construida en tres fases, de 1918 a 1946. En su fachada destacan dos torres laterales que alcanzan los 25 metros de altura que culminan en una cruz, la misma en la cúpula, y en su decoración incluye, entre otros estilos, guijarros del río Vinalopó que baña la zona, así como otros materiales característicos.