Cinco cosas que debes saber hacer antes de viajar al sudeste asiático

El sudeste asiático se ha convertido en un destino muy atractivo para muchos viajeros. La mayoría de los países que lo componen suelen ser económicos, ofrecen una gran variedad de contrastes, una comida espectacular, con culturas milenarias y una naturaleza exuberante. Sin embargo, si va a ser tu primera vez en países como Tailandia, Myanmar, Camboya, Laos, Vietnam, Malasia, Filipinas o Indonesia, te recomendamos que hagas los deberes y salgas de casa sabiendo hacer cada una de las cinco cosas que te proponemos a continuación. Haznos caso, nos lo agradecerás.

Conducir una moto

Uno de los mejores medios de transporte en prácticamente cualquier lugar del Sudeste asiático es la moto. Es el transporte local por excelencia, barato, rápido y eficiente, e igual que lo es para sus ciudadanos también lo puede ser para ti.

Ya sea en Tailandia, Laos, Camboya, Vietnam, Filipinas, Malasia, Indonesia… en cualquiera de ellos tendrás la posibilidad de alquilar una pequeña moto para moverte a tu aire, y salvo tu pasaporte es raro que te pidan ningún otro documento.

Alquilar una moto es económico y te dará independencia, por lo que es una opción muy inteligente si queremos desplazarnos con libertad. Eso sí, lanzarse a conducir una moto sin tener alguna noción básica previa en un país desconocido, donde las carreteras o las motos no siempre están en el mejor estado, es un poco temerario, incluso si se trata de un pequeño scooter de 50 o 125 cc.

Lo mejor, para mayor seguridad y comodidad, es que llegues sabiendo cómo conducir una moto. Por poco que practiques antes de emprender tu viaje ya será mejor que nada, y te aseguramos que una vez allí no encontrarás mejor método de transporte para descubrir a tu ritmo cualquier país del Sudeste Asiático. Ah, y aunque no te lo ofrezcan ¡no olvides pedir un casco!

Comer con palillos

Esto puede ser un poco embarazoso. Si saber conducir una moto va en favor de tu propia seguridad, lo de saber comer con palillos ya es cuestión de dignidad. Seguro que alguna vez habrás ido a algún restaurante asiático en el que, si no te defiendes con los palillos, te habrán puesto por delante un cuchillo y un tenedor. Pero eso, de viaje, a veces no es tan fácil.

Para descubrir los sabores más auténticos lo más recomendable es siempre alejarse de los lugares turísticos y buscar las opciones más locales, y es precisamente ahí donde más te costará encontrar unos cubiertos si los palillos son algo que no quieres ver ni en pintura.

¿Te vas a perder los mejores manjares por una simple cuestión de habilidad? De eso nada, antes de viajar búscate unos palillos y practica hasta que lo tengas dominado. Si no tienes a nadie que te pueda explicar cómo usar unos palillos recurre a Youtube. Una vez que sepas cómo cogerlos practica, practica y vuelve a practicar, será la única manera de sentirte con confianza en cuanto empieces a viajar por el sudeste asiático y no quieras pasar hambre allá donde vayas.

Regatear

Hay dos tipos de personas en el mundo, las que aman regatear y las que lo odian profundamente. ¿Con qué grupo te identificas? En el Sudeste Asiático vas a tener que regatear, o al menos deberías intentarlo. Si no lo haces es probable que salgas con la sensación de estar pagando más que el resto de personas que te rodean y nunca es algo agradable.

Si tienes pensado pasar más de una noche en un alojamiento propón una rebaja, si vas a alquilar una moto tampoco dudes en negociar el precio, si vas a llevarte varios artículos en una tienda de recuerdos haz lo mismo, y como estos verás que encuentras mil ejemplos.

El regateo es prácticamente obligatorio a la hora de coger un tuk tuk, un taxi-moto de tres ruedas extendido por prácticamente todo el Sudeste Asiático. Antes de subirte negocia el precio del trayecto y lucha por bajarlo. Pregunta por precios orientativos en tu alojamiento para saber en qué basarte y cuál es el precio justo o, mejor aún, quizá el mejor precio lo encuentres si el tuk tuk te lo gestiona el propio alojamiento.

Hablar inglés

¿Qué tal se te da el tailandés? ¿Y el vietnamita? Si no eres muy ducho en idiomas asiáticos lo mejor es que al menos lleves de base cierto nivel de inglés que te permita comunicarte con fluidez o, al menos, de manera efectiva.

Hablar inglés te abrirá puertas en todo el mundo, y si en Latino América tendremos mucho más fácil la comunicación en cualquier otro sitio siempre conviene llevar algo de inglés de base. En el Sudeste Asiático encontrarás gente que hable mejor o peor, pero ten por seguro que en cualquier lugar turístico no tendrán ningún problema en dirigirse a ti en un muy buen inglés.

Si hablar inglés es algo que dejaste en el tintero y hace tiempo que no te preocupas, te recomendamos que antes de salir de viaje le pegues un pequeño repaso aunque sea para afianzar las frases y situaciones más comunes.

Eso sí, que esto no quite que aprendas unas cuentas palabras básicas del idioma del país que estés visitando. Un “hola”, “gracias”, “por favor” o “adiós” a tiempo en la lengua local será apreciado en cualquier lugar del mundo, una muestra de respeto y de interés que no te costará mucho y te hará quedar como un viajero mucho más cercano que el que se limita a un simple “thank you”.

Ser un viajero responsable

Este es un tema importante que debes tener muy presente cuando viajas, sobre todo por países del Sudeste Asiático donde es muy fácil despistarse y caer en conductas poco aconsejables.

Antes de partir debes tener claro dónde vas y que ni cultura, ni recursos, ni economía son en los que te sueles mover normalmente, por lo que es importante saber cómo viajar de manera responsable y sostenible.

Por un lado, has de saber cómo es la cultura y las tradiciones del lugar al que viajas para respetarlas en todo momento, pero según donde vayas es probable que te encuentres con dos situaciones comprometidas: el cuidado del medio ambiente y el respeto hacia los animales.

Viajando por el Sudeste Asiático ten en cuenta que la gestión de residuos muchas veces no es la mejor, es recomendable que produzcas los menores desechos posibles para reducir al máximo la producción de basura.

Otro problema para el que conviene ir mentalizado es el respeto a los animales, encontrarás una gran variedad de actividades en las que la fauna salvaje es utilizada para el disfrute del ser humano y que es recomendable evitar si quieres ser un viajero responsable con los animales.