Viajar es la opción favorita de muchos durante las vacaciones de verano. Tanto es así, que descubrir nuevos destinos o simplemente alejarse del ajetreo del día a día se ha vuelto casi obligatorio en nuestras vidas, permitiéndonos recargar pilas y volver con más fuerza a nuestras ocupaciones.
Pese a ello, los precios cada vez más altos en transportes, alojamientos y búsqueda de experiencias han llevado a más de un viajero a optar por otras alternativas, como quedarse en casa o seleccionar un destino no tan conocido, con tal de encontrar una opción más tranquila y económica.
Es recomendable organizar una escapada de vez en cuando, ya que permite conocer nuevos entornos además de despejarse y desconectar de las obligaciones del trabajo. Sin embargo, las complicaciones a la hora de seleccionar dónde ir pueden convertir la tarea en algo tedioso y poco atractivo.
Por ello, es aconsejable seguir unas indicaciones básicas, con las que no solo será posible ahorrar en el gasto total del viaje, sino que además te permitirán tener una experiencia más completa y estar preparado para cualquier contratiempo.
Planifica de manera anticipada
En la mayoría de casos, el precio de los viajes aumenta diariamente según se va acercando la fecha de salida. Por ello, si tienes un destino específico en mente, es recomendable buscar vuelos de manera anticipada. Gran número de aerolíneas te permiten planificar con meses de antelación.
Además, es importante buscar opciones en diferentes medios de transporte. Es común pensar que ir en avión es el método más efectivo, pero existen otras muchas alternativas con las que poder llegar al destino deseado dependiendo de su distancia. Otras alternativas como buses, trenes o barcos, según sea la distancia, también son viables y mucho menos utilizadas. Recurre a ellas y transforma al trayecto en una experiencia nueva y divertida dentro del viaje.
Si todo este proceso te resulta tedioso y desagradable, es posible recurrir a páginas especializadas en comparar precios, que harán la labor de seleccionar y examinar las mejores opciones por ti. Algunas de ellas no solo seleccionan viajes, sino también alojamiento e incluso actividades a realizar alrededor de la zona escogida.
Las páginas especializadas en búsquedas no solo te ayudarán a la hora de encontrar un destino al momento, sino que también es posible activar las alertas y registrar de qué quieres que te avisen, para estar siempre pendiente de los precios de un sitio en específico.
Descubre la vida local
Uno de los principales fallos que cometen habitualmente los turistas es actuar demasiado como turistas. Las ciudades y destinos con mayor masificación ya cuentan con zonas especializadas para viajeros, con comercios, tiendas, restaurantes y alojamientos propios, que en gran número de ocasiones distan diametralmente de la realidad de la zona.
Por ello, si quieres descubrir realmente la vida del destino elegido, existen algunas pautas que te permitirán mimetizarte entre los locales:
- Busca restaurantes de comida típica de la zona.
- Comunícate con los locales e intenta aprender algunas frases simples (si hablan un idioma distinto al tuyo).
- Evita los hoteles masificados.
- Visita las zonas menos conocidas de la ciudad.
- Conoce las costumbres locales.
Revisa las condiciones del viaje
En ocasiones, lo barato sale caro. Por ello, revisa las condiciones de los billetes, así como del alojamiento y otras experiencias que contrates, antes de pagarlas definitivamente. Es recomendable pagar la posibilidad de cancelación aunque el viaje salga algo más caro.
Si buscamos viajes con mucha antelación, no sabremos lo que podría pasar en unos meses. Así, la cancelación es un básico para no perder dinero, no solo si surge un imprevisto de última hora, sino que también da flexibilidad por si se prefiere posponer el viaje a otro momento.
Además, revisar las políticas sobre equipaje es fundamental para no pagar de más una vez llegado a la estación o aeropuerto. Chequea cuál es el máximo permitido en tu billete y haz la maleta en función de ello. Reflexiona bien sobre qué prendas serán realmente útiles en tu viaje y no metas ropa de más.
A la hora de elegir la maleta, selecciona -si es posible- una que te permita llevar en cabina sin necesidad de facturar por ella. Si no te entra toda la ropa, existen trucos como la de enrollar cada prenda o la de envasar la ropa al vacío para que ocupe menos espacio.
Prepárate antes de viajar al extranjero
En Europa, la mayoría de países utilizan el euro como moneda, sin embargo, no en todos es así. Por ello, infórmate de qué método de pago tienen en el país al que viajarás y acude a tu banco con antelación a pedir un cambio de divisa. Así, te ahorrarás hacerlo una vez allí, además de poder ahorrarte algunos de los intereses de la zona.
Por otro lado, comprueba tu contrato de compañía móvil para conocer la itinerancia de datos en el extranjero que te corresponde y si el uso de datos tiene un coste adicional fuera de tu país. Utiliza redes wifi o contrata otra tarifa en función del tiempo que vayas a estar fuera.
Además, planea el método de transporte para no perderte ninguna actividad, dependiendo de las actividades que pienses hacer, en qué zona se encuentren y lo bien comunicada que esté la misma.
Por ejemplo, alquila un coche si tienes que hacer trayectos de más de una hora para ir de forma tranquila, segura y sin horarios. Por otro lado, es recomendable manejarse en metro, tren o bus para realizar trayectos por ciudad. Revisa las líneas, las rutas y los posibles descuentos o billetes más económicos antes de llegar a la zona.