Las siete razones que te harán viajar a Tenerife en tus próximas vacaciones

E. García

20 de febrero de 2020 10:08 h

La isla de Tenerife no cesa de incrementar los increíbles encantos que la han puesto en el panorama turístico internacional como uno de los mejores destinos, no sólo por su naturaleza y su clima (la temperatura suele oscilar entre los 20 y los 24 grados todo el año), sino por actividades como el avistamiento de cetáceos los 365 días o la observación de estrellas. A ello se une una original gastronomía y una oferta de ocio infinita, además de tradiciones tan reconocidos como su carnaval. ¿Te vienes a recorrerla de nuestra mano y la de Logitravel?

1. Impactante naturaleza

Increíble, pero cierto. Tenerife atesora 43 espacios protegidos que ocupan casi la mitad de su territorio (el 48%, concretamente). Entre ellos se encuentra, cómo no, el Parque Nacional del Teide, declarado por la UNESCO Patrimonio Mundial de la Humanidad y donde se eleva el pico más alto de España: 3.718 metros. Puedes ascender casi hasta la cima mediante un moderno teleférico para disfrutar de unas vistas espectaculares.

Otros espacios naturales de gran belleza son los parques rurales de Anaga y de Teno. Sus bosques de laurisilva —una reliquia del Terciario— te sorprenderán con sus helechos gigantes y un aire mágico de cuento de hadas.

Justamente el agradable clima de la Isla y su naturaleza permiten experimentar de infinidad de propuestas de turismo activo. Desde practicar deportes náuticos como el windsurf, el surf, el body board o el buceo; a explorar la isla haciendo ciclismo o senderismo —en Tenerife te esperan más de 1.500 kilómetros de senderos—. O por qué no, planeando en parapente para sobrevolar sus increíbles paisajes desde la montaña más alta y hasta la misma costa

2. Ocio y diversión asegurada

En Tenerife siempre hay un plan perfecto para cada tipo de viajero. Si eres alguien para quien la diversión es irrenunciable, te aguardan innumerables beach clubs y roof top bars con la música, los cócteles y la gastronomía de primer nivel como protagonistas. Sorprendentes y variados espectáculos (cabarets, shows de acrobacia, otros que mezclan vino y sensualidad…) y, por supuesto, festivales, desde música electrónica a pop, jazz o alternativa —a los que puedes acudir en cualquier época del año— completan la oferta de ocio a la que te resultará imposible resistirte.

En familia, viajar a Tenerife es también una apuesta segura de pasarlo en grande. Tanto por sus magníficas playas como por sus parques temáticos pensados para deleite de los más pequeños de la casa (y también los adultos). El parque acuático Siam Park, en Costa Adeje; o Loro Parque, en Puerto de la Cruz, un increíble parque zoológico, están considerados por los propios usuarios entre los mejores del mundo.

3. Siempre el mar

Las suaves temperaturas de las que goza Tenerife durante todo el año hacen que sus playas atraigan a millones de visitantes cada año. Se hallan diseminadas por toda la isla y en todas podrás refrescarte y bañarte a gusto como, por ejemplo, en Playa Martiánez, una playa de arena negra muy frecuentada por surferos; o en Playa Jardín, un conjunto de estupendas playas de arena negra. Ambas en Puerto de la Cruz. Otras buenas opciones son la playa del Duque, la de Fañabé o la de Torviscas, en Adeje; o Las Vistas o El Camisón, en Arona. La de El Médano, en Granadilla de Abona, es ideal para disfrutar en familia.

Pero si lo que quieres es darte un chapuzón diferente y original, entonces lo tuyo son las piscinas naturales. Bajamar, Punta del Hidalgo o Garachico son excelentes alternativas. También el Lago Martiánez, en Puerto de la Cruz, un precioso complejo de piscinas con servicio de hamacas y restaurantes, ubicado junto al mar y diseñado por el artista lanzaroteño César Manrique en 1980, quien también ideó el Parque Marítimo de Santa Cruz, otra de las posibilidades para relajarte entre espectaculares piscinas.

Además, al sur de la Isla, a unas tres millas de la costa, se esconde una de las joyas de Tenerife: una colonia de delfines mulares y calderones tropicales que puebla dichas aguas de manera permanente y con la que tú puedes deleitarte los 365 días del año. Las embarcaciones de las empresas especializadas para realizar este tipo de excursión zarpan desde los puertos de Los Cristianos, Puerto Colón y Los Gigantes y hacen un trayecto de dos a cinco horas, que incluye paradas para bañarse en bellas calas de la isla y comida. Busca las excursiones certificadas según la carta de sostenibilidad.

4. Ciudades y pueblos con encanto

En toda la isla, entre el norte, el sur y el área metropolitana tinerfeña, hay 31 municipios, pueblitos y caseríos que sorprenderán a propios y extraños. Como Adeje, que aún conserva cierto carácter rural de cuando empezó siendo un pequeño pueblo casi de montaña con sus senderos y enclaves patrimoniales. Tampoco debes perderte La Laguna, Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, y localidades como Garachico o Icod de los Vinos, donde se halla el conocido Drago Milenario (cuya edad alcanza casi los 1.000 años).

En la capital, Santa Cruz, puedes admirar edificios vanguardistas como el Auditorio de Tenerife, el Centro Internacional de Ferias y Congresos, ambos, obra de Santiago Calatrava, o el TEA, Tenerife Espacio de las Artes, de Herzog y De Meuron.

5. Cocina exquisita

La gastronomía es otro de los puntos fuertes de la isla. No en vano, se trata de una cocina creativa y original, donde destacan productos como el atún, el plátano o el aguacate. No dejes de maridar estos alimentos con alguno de sus fantásticos vinos de sus cinco Denominaciones de Origen. Para conocer más en profundidad su historia, y degustarlos, acude a la Casa del Vino, en el Sauzal.

De modo que, a la hora de comer, el turista cuenta con infinidad de opciones en la Isla: desde restaurantes tradicionales o establecimientos de alta cocina con estrella Michelin. Cualquiera de ellos brinda una experiencia culinaria única.

6. Cielo puro y claro

Si siempre has sentido fascinación por los astros y el universo, Tenerife es tu destino. Su cielo es uno de los mejores del mundo para observar las estrellas gracias a su limpieza y ausencia de contaminación. Con ayuda de los guías de diferentes empresas especializadas en astronomía, podrás detectar cráteres de la luna o infinitas galaxias y nebulosas desde el mismísimo Teide, un lugar privilegiado a nivel internacional para la observación de estrellas. Los miradores del parque son los mejores puntos estratégicos, destacando el de Llano de Ucanca, así como la montaña de Guajara, el pico más alto del anfiteatro de Las Cañadas del Teide. Para los menos aventureros, basta con quedarse en los alrededores del Parador de Turismo.

7. El carnaval y la Semana Santa

El Carnaval de Tenerife es de los mejores del mundo, pero hay que organizarlo bien para disfrutarlo al máximo. Para empezar, planifica tu viaje para llegar a ver el miércoles la Gala de Elección de la Reina y el viernes la Cabalgata Anunciadora, a partir de donde la fiesta toma la calle. Santa Cruz posee el récord Guinness de gente bailando a la vez al aire libre desde 1987. Dentro de las dos siguientes semanas de jolgorio, destaca el desfile del martes de Carnaval en el Gran Coso de la avenida de Anaga. La noche del Miércoles de Ceniza es otra cita importante, junto con el Entierro de la Sardina, que se clausura con un baile multitudinario callejero y noctámbulo. La fiesta acaba el fin de semana de Piñata, al menos en la capital.

Las vacaciones de Semana Santa son otra fecha que debes apuntar en tu calendario para visitar Tenerife; tendrás la oportunidad de conocer las tradicionales procesiones y otros actos fervorosos como el Vía Crucis, en municipios como La Orotava, Puerto de la Cruz, Icod de los Vinos, Santa Cruz, Adeje, Arona, La Laguna, Candelaria, Güímar y Adeje.