El pequeño pueblo de Aragón donde se elabora uno de los mejores quesos del mundo
En el corazón de la provincia de Teruel, a tan solo unos 39 kilómetros del centro, se encuentra Perales del Alfambra, un pequeño pueblo que a pesar de su tamaño, ha logrado hacerse un nombre en el mundo de la gastronomía. Rodeado por montes y pastizales, el pueblo ha conservado a lo largo de los años un fuerte vínculo con la tierra y sus recursos, lo que ha permitido el desarrollo de una ganadería de calidad y la producción de alimentos con identidad propia.
La cría de ovejas y cabras ha sido una práctica común en la zona, favorecida por el clima seco y la altitud, lo que influye directamente en la calidad de la leche y, por ende, en la elaboración de quesos con características únicas. Con menos de 300 habitantes, este enclave rural es el hogar de uno de los quesos más reconocidos a nivel nacional e internacional, el queso de Granja Perales, un producto que ha conquistado los paladares más exigentes y ha sido galardonado con siete medallas en los World Cheese Awards, el concurso internacional de quesos más prestigioso del mundo.
Más allá del queso, este municipio representa un ejemplo de cómo la dedicación y el compromiso con la tradición pueden convertir un pequeño rincón de España en un referente mundial. Si eres un amante de la naturaleza y la gastronomía, no te puedes perder Perales del Alfambra, donde disfrutarás con su entorno privilegiado y sus quesos artesanales.
Qué hacer en tu visita a Perales del Alfambra
La belleza y el entorno natural de Perales del Alfambra hacen que sea un destino perfecto para quienes buscan escapar del ajetreo de las grandes ciudades y disfrutar de la tranquilidad del campo. En este pintoresco rincón de Teruel, los visitantes pueden disfrutar de una serie de actividades que combinan la naturaleza, la cultura y la historia local. No te pierdas estas actividades:
- Dar un paseo por el pueblo: se trata de un lugar muy tranquilo donde puedes disfrutar de sus pintorescas casas de piedra, manteniendo su esencia más rural. También puedes visitar su iglesia y la antigua estación de ferrocarril.
- Realizar una ruta de senderismo: la zona cuenta con diversas rutas de senderismo donde poder disfrutar de la naturaleza. Una de las más comunes transcurre por el Valle del Alfambra, donde el camino asciende junto al río.
- Visitar sus queserías: allí aprenderás todo lo necesario sobre el proceso de elaboración de sus quesos y además, podrás realizar una cata de ellos.
- Descubrir el Yacimiento de Las Cerradicas y el Museo Paleontológico de Galve: a unos 26 minutos en coche se encuentra la localidad de Galve, donde podrás disfrutar de su impresionante yacimiento de huellas fósiles que evidencian la presencia de antiguas especies. También podrás hacer una visita al Museo Paleontológico de Galve, conocido por su gran registro fósil de vertebrados.
La tradición quesera de Perales de Alfambra
La tradición quesera de Perales de Alfambra tiene siglos de historia, comenzando cuando las primeras comunidades ganaderas de la zona domesticaron ovejas y cabras para obtener leche y elaborar productos lácteos. La realización de queso fue primordial para la subsistencia de las familias, que aprovechaban los recursos naturales del entorno montañoso para producir alimentos nutritivos y duraderos. Los quesos, generalmente de cabra u oveja, se curan en cuevas o lugares frescos, aprovechando el clima local para su maduración.
A lo largo del tiempo, la tradición de elaborar queso ha perdurado y, en el siglo XX, con avances en las técnicas de producción y conservación, el queso de Perales del Alfambra comenzó a destacar por su sabor y calidad, ganando reconocimiento en Aragón. Aunque la producción se ha modernizado, aún conserva las técnicas tradicionales. Hoy en día, este queso es premiado en concursos gracias a su sabor y el cuidado en su elaboración.
Iglesia de la Asunción de Perales del Alfambra
La Iglesia de la Asunción de Perales del Alfambra es un templo barroco que fue construido en el siglo XVII. Hecha de mampostería con sillas en las esquinas, su estructura incluye tres naves cubiertas por bóvedas de cañón, con una cabecera y un primer tramo más alto que el resto del templo. A lo largo del tiempo, se añadieron varias capillas, siendo destacada la capilla del Olivar, con una portada manierista que recuerda la Capilla de los Reyes en la Catedral de Teruel.
En el interior, el presbiterio destaca por su gran cúpula vacía, decorada con los evangelistas en las pechinas. Aunque no tiene imágenes importantes, la iglesia alberga dos piezas de orfebrería gótica del siglo XV: un cáliz y un relicario, ambos de un taller turolense, además de un sencillo cofre del siglo XVI.
Estación de ferrocarril de Perales del Alfambra
La estación de ferrocarril de Perales del Alfambra es otro de los lugares que puedes visitar. Esta estación formaba parte de la línea Teruel-Lérida (en el Tramo Teruel-Mequinenza), que nunca se llegó a acabar. Está formada por tres edificios: el edificio de recepción de viajeros, el edificio de servicios, y el muelle y nave de carga.
El Ayuntamiento de Perales del Alfambra convirtió el antiguo complejo rehabilitado en un espacio para actividades sociales y deportivas, como un albergue juvenil. El proyecto incluyó restaurar el edificio, tanto por fuera como por dentro, y mejorar los alrededores para hacerlos más accesibles y funcionales para la comunidad.
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